Innumerables veces hemos recibido llamadas de números desconocidos y al momento de contestar con un “aló”, el silencio se apodera del otro lado de la línea, sin obtener respuesta alguna; pero no sólo es eso, después de unos segundos, terminan la llamada abruptamente sin decir una sola palabra. Una situación molesta que puede ocurrir a cualquier hora del día (mañana, tarde, noche e, incluso, madrugada). ¿Te has preguntado alguna vez por qué sucede esto? o ¿quiénes están detrás de estas llamadas?
Esta experiencia se repite casi a diario, generándo rechazo en quienes las reciben. Algunas peronas temen ser víctimas de estafas y fraude al recibir estas llamadas telefónicas en sus smartphones. Una de ellas se denomina “vishing” y la otra es conocida como “wangiri”.
El “vishing” es un tipo de estafa en la que a través de una llamada, se suplanta la identidad de una organización o persona de confianza. El objetivo es sustraer información personal de la víctima como el nombre, apellidos, hasta los datos de tus tarjetas de banco.
Por otro lado, el “wangiri” es otra modalidad de fraude o estafa, ocurre cuando el receptor de la llamada responde y, automáticamente, la llamada se corta. Esto hace que la víctima devuelva la llamada, generando así ingresos para el estafador.
¿POR QUÉ RECBIMOS LLAMADAS Y NO CONTESTAN?
¿Por qué llaman y no contestan? La razón detrás de este tipo de llamadas en las que nadie contesta y cuelgan está relacionado con el telemarketing. Conocido como “llamadas fantasma”; los centros de atención telefónica, comúnmente conocidos como call centers, que les prestan sus servicios a distintas entidades son quiénes están detrás, ¿cómo operan?
Según han explicado en más de una oportunidad, las “llamadas fantasmas” se producen porque funcionan con un sistema de automatización de llamadas que están programados para “optimizar al máximo el tiempo de los teleoperadores”.
En este tipo de lugares, los empleados cuentan con un sistema automático que selecciona al azar los números a los que tiene que llamar para ofrecer diversos servicios, productos o realizar encuestas.
Cuando el sistema elige el número, el personal puede hablar con los usuarios. Sin embargo, cuando las personas no se encuentran en turno o en su lugar, y no hay nadie que hable, es el momento en el que se genera el incómodo silencio, que termina por colgar la llamada sin recibir ninguna respuesta después de que contestamos.
A pesar de ser una ventaja para las empresas porque brinda la posibilidad de contactar a más clientes, Liliana Alvarado, directora general de la Escuela de Posgrado de la UTP, declaró a Gestión que no siempre puede ser así, pues se trata de un sistema que puede ser muy molesto para el consumidor si no está bien programado.
“Si bien, optimiza el trabajo de los teleoperadores también puede generar mucha insatisfacción en el cliente. La tecnología es beneficiosa, sí, pero no piensa, solo sigue las instrucciones de quién lo programa. Lo más inquietante es que te llaman y nadie contesta, por lo que este ‘spam telefónico’ es una falta de respeto al consumidor porque le hacemos perder el tiempo”, afirma.
¿QUÉ DEBO HACER?
La mejor solución que pueden hacer los usuarios es reportar los números o bloquearlos en su celulares. Además, algunas personas descargan una app que es capaz de detectar las “llamadas fantasma”, que las envía al desvió del celular y evita que se vuelvan a contactar.
Recuerda, evitar devolver las llamadas a números sospechosos, pues podrían tratarse de algún tipo de estafa, anteriormente mencionadas.
Asimismo, Indecopi a través del programa “No insista” te permite reportar estos métodos comerciales agresivos y el uso de información sin consentimiento previo. Puedes denunciar siguiendo este enlace.