La impuntualidad es una característica que afecta a muchas personas. Todos conocemos a alguien que, sin importar el motivo o el lugar, llega tarde a todos lados. Es más, uno mismo puede ser aquella persona que no puede evitar la tardanza a la hora de dirigirse a distintos lugares o eventos. Uno podría creer que las personas impuntuales simplemente son así, pero nuevas perspectivas de la psicología revelan que podría haber mucho más detrás de la impuntualidad. Descubre cuáles son estas razones y la importancia de conocerlas para tratar de corregir esta mala costumbre.
¿Qué significa llegar tarde, según la psicología?
Nuevos reportes desde la psicología revelan que la impuntualidad dice mucho más de lo que se creía sobre una persona. Por ejemplo, una persona impuntual en la mayoría de casos es una persona que puede no tener respeto por el tiempo de los demás. Así como el reflejo de alguien para priorizar sus responsabilidades o para autocontrolarse y gestionar lo que se espera de ella.
Sin embargo, también se afirma que la impuntualidad podría ser una manifestación de ansiedad social. Después de todo, una persona que sufre de esta afección muchas veces se sabotea a sí misma para llegar tarde y de esta manera evitar el estrés o la incomodidad que le produce socializar con otras personas. En este caso, el retraso sería una solución inconsciente a situaciones que pueden considerar como incómodas.
¿Cómo ser una persona puntual?
Dejar atrás la impuntualidad, sin duda, no es tarea fácil. Pero se puede lograr a través de una mejora en los malos hábitos de las personas. A continuación, una lista con acciones que cualquiera puede realizar para tratar de mejorar:
- Mayor organización: Sirve de mucho anotar todas las cosas por hacer en un calendario y una lista, así como poner alarmas para las actividades principales. De esta manera, una persona puede tener una mayor gestión de su tiempo y los constantes recordatorios pueden ayudar a evitar la impuntualidad.
- Identificar patrones: También puede ser de mucha utilidad tratar de determinar aquellas acciones o malos hábitos que en el pasado han ocasionado el llegar tarde a un lugar. Así en futuras ocasiones se puede tratar de evitar estas situaciones que nos retrasan.
- Terapia: El apoyo profesional sería de utilidad para quienes sufren de ansiedad social o luchan con la procrastinación, pues los especialistas, a través de un análisis de cada persona, pueden recomendar nuevas estrategias para superar primero estas afecciones y luego mejorar la puntualidad.
Es importante que cada persona realice una especia de introspección que le permita identificar los principales problemas por los que es impuntual. Solo a través del conocimiento de los malos hábitos y la aceptación de los mismos podrán trabajar en mejorarlos y dejar de llegar tarde a todos los lugares.