A 35 años de la muerte de Charles Chaplin
Han pasado tres décadas y media desde la muerte de Charles Spencer Chaplin (1889-1977). Si uno piensa en la historia cinematográfica, no puede olvidar al popular ‘Charlot’, uno de sus íconos y el que representa mejor que nadie el encanto, ingenio y vitalidad de la edad de oro del sétimo arte. Para muchos Chaplin fue el único genio que dio el cine.
El 16 de abril de 1889 Inglaterra lo vio nacer y de esa isla se embarcó hacia el ‘sueño americano’ en 1912, entonces no pasaba de ser un joven actor de una agrupación de vodevil (‘vaudeville’) que llegaba a Hollywood con esperanzas de quedarse. A los pocos meses, en diciembre de 1913, fue contratado por los estudios Keystone.
Nace ‘Charlot’
Fue en su segundo filme que apareció con la vestimenta clásica de ‘Charlot’, ese personaje de los zapatos grandes, sombrero hongo, saco corto y bastón inconfundible. Ese 1913 fue un año de trabajo brutal, pagó su ‘derecho de piso’, pues realizó 35 películas a cambio de menos de 200 dólares por cada una de ellas.
Sin embargo, sus cualidades histriónicas, su trato afectivo y una extraordinaria capacidad de trabajo lo llevaron en corto plazo a la realización de importantes películas, como ‘The vagabond’ (‘El vagabundo’) de 1915, por la cual ganó muchísimo más que los modestos “200 dólares” de antes.
Su vuelo artístico y buen olfato empresarial, lo hicieron cambiar de rumbo comprometiéndose en 1916 con los estudios de la Mutual. Chaplin era, sin duda, un actor que empezaba a ser reconocido, y su libertad -algo muy importante para él- era el elemento clave que le permitió ser lo que era y sería.
Se trataba de un artista integral: escribía, interpretaba y dirigía prácticamente casi todas sus películas. Era, esencialmente, un cómico, pero con una especial capacidad interpretativa, cuyos gestos de ternura, ironía e ingenio le daban esa originalidad que todos hemos visto en sus filmes.
La historia del cine le tenía reservado un lugar de honor. Las cintas clásicas vendrían en su mejor etapa, con su propio estudio el United Artists, que fundó en 1919. Para muchos estudiosos aquella sería “la primera productora de cine independiente de la historia”.
En United Artist Chaplin dio lo mejor de su creatividad. Entre las mejores cintas aparecen ‘The kid’ (‘El pibe’) de 1921, pero también ‘The gold rush’ (‘La quimera del oro’) de 1925, un clásico de clásicos.
Un Óscar merecido
Las primeras noticias de los ‘premios Óscar’ también están vinculadas con este genial hombre, pues Chaplin recibió de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood, un Óscar honorífico en la primera edición de los premios, la cual condecoraba las películas estrenadas entre el 1 de agosto de 1927 y la misma fecha de 1928.
Salvo un premio especial para ‘El cantor de jazz’ (primera película sonora), las demás cintas premiadas fueron mudas. Chaplin obtuvo el reconocimiento esa noche del 16 de mayo de 1929, por su trabajo de guionista, actor, director y productor de ‘The circus’ (‘El circo’) de 1928.
En verdad, hoy por hoy, no hay película de Chaplin que no sea ya parte de la mejor historia del cine moderno. ‘City lights’ (‘Luces de la ciudad’) de 1931 y ‘Modern times’ (‘Tiempos modernos’) de 1936, gozaron de la musicalización del genio inglés. ‘Modern times’ fue, además, el último que grabó sin voz.
Su legado antibelicista llegaría al paroxismo con ‘The great dictator’ (‘El gran dictador’) de 1940, donde su sarcasmo feroz contra el dictador nazi Adolf Hitler marcó el final del personaje ‘Charlot’ en el cine.
Siete años después, en 1947, se estrenó ‘Monsieur Verdoux’ y en 1952 ‘Candilejas’. Le seguirían ‘Un rey en Nueva York’ de 1957; y luego ‘La condesa de Hong Kong’ de 1967. Se marcaba así un gran ciclo productivo en el cine de la primera mitad del siglo XX.
Sus últimos años
Tras varios matrimonios y, sobre todo, numerosos escándalos sexuales -debido a su apego a las mujeres más jóvenes que él- se casó a los 54 años de edad, en 1943, con la hija del dramaturgo Eugene O’Neill, Oona O’Neill, de apenas 18 años.
En los años ‘50 el macartismo norteamericano le prohibió el ingreso a los Estados Unidos. Pero en 1972 rompió su promesa de no pisar tierra americana, al ir a recibir un nuevo premio Óscar.
En 1975 el actor inglés, quien fue un niño muy pobre, terminó convertido por voluntad de la nobleza británica -y especialmente de la reina de Elizabeth II-, en Sir Charles Spencer Chaplin.
El histrión más talentoso del mundo murió a los 88 años, el 25 de diciembre de 1977, en su casa de Ginebra. Allí crió a sus ocho hijos al lado de su eterna Oona. Chaplin había hecho 81 películas, 67 de ellas antes de que el actor cumpliera los 30 años de edad. Un fenómeno.
El 3 de marzo de 1978 sus restos fueron robados del cementerio local y no fue encontrado por la policía sino hasta el 18 de mayo del mismo año.
En el 2007 se anunció que su casa de Ginebra se convertiría en un museo para el público de todas partes del mundo… ¡Qué mejor final para una vida fuera de serie!
(Carlos Batalla)
Fotos: Agencias