Cuando David ‘Kung fu’ Carradine filmó en Lima
Hace 25 años el actor norteamericano David Carradine pisó tierra peruana. Fueron 8 semanas las que se quedó el protagonista de Kung Fu en nuestro país. ¿Qué lo trajo por estos lares? Fue la filmación de “Calles peligrosas, año 2040”, película dirigida por nuestro compatriota Lucho Llosa y en la que actuó junto a grandes actores nacionales como Orlando Sacha. En Huellas Digitales recordamos aquellos gratos momentos de su primera visita.
Con más de cincuenta años encima y sin hablar español, David Carradine llegó a nuestro país para interpretar a Jason, un ex delincuente incorporado al sistema policial. El personaje maquiavélico de “Calles peligrosas” que mezclaba simpatía con cinismo pisó suelo peruano el 4 de abril de 1988, desde aquel momento el actor quedó encantando con la amabilidad de los peruanos.
En una entrevista concedida a El Comercio reveló las ganas que tenía de conocer nuestro país, tanto afecto se debió porque en su primer trabajo de teatro interpretó al Inca Atahualpa en la obra “La Caza Real del Sol”, allí empezó su atracción por la cultura peruana, que hasta entonces solo conocía por los libros.
Por aquellos días, el alto y rubio David Carradine generaba mucha expectativa en el público peruano, pues todavía permanecía en nuestras retinas su personaje: el ‘pequeño saltamontes’ Kwai Chang Caine, de la serie “Kung Fu”, interpretación que lo hizo famoso. Sin embargo, eso no parecía nublarlo, todo lo contrario durante su estadía se mostró muy sencillo y se describía como un hombre común con hijos, caballos, perros, amante de los libros de ciencia ficción y que de vez en cuando jugaba billar. “No hay nada especial que me haga distinto a los demás” confesó el hijo del célebre John Carradine.
El buen ojo de Luis Llosa lo trajo a nuestro país por 8 semanas, tiempo que duró la filmación de “Crime Zone” titulada así para el público norteamericano o “Calles peligrosas, año 2040”. En una conferencia prensa, el director peruano detalló que las grabaciones se hacían de noche con el fin de darle un ambiente futurista. “En esta película se visualiza el mundo del futuro, de sus calles, de su gente y una sociedad desestabilizada por un gobierno totalitario” explicó Llosa.
La locación principal era una casa miraflorina y también algunas calles de ese distrito. Con un presupuesto de 700 mil dólares se realizó la película y su estreno se dio en simultáneo en Perú y Estados Unidos a fines de ese año. Algunos espectadores todavía recuerdan las salas repletas y cómo no ir a verla, si además de David Carradine había renombrados actores nacionales como Orlando Sacha, quien interpretaba a un viejo aviador amigo de la pareja protagonista Helen (Sherilyn Fenn) y Bone (Peter Nelson). También se encontraba la actriz Diana Quijano, quien tenía el papel de una cruel policía femenina y un joven Carlos Bañuelos quien interpretó a un ladronzuelo que le puso el toque de humor a la historia. Además de Susy Dyson, madre de Kina Malpartida, y Erika Stockholm.
Después del aquella película, el actor no volvió más por nuestro país. Su adicción a las drogas y la inestabilidad familiar, se casó con 5 mujeres, lo hizo retroceder en su carrera y solo se dedicó a actuar en películas de clase B. Aquella vez cuando se le preguntó acerca de su problema, su respuesta fue: “Las drogas son una pérdida de tiempo”. Tiempo que jamás recuperó.
Fue necesario esperar hasta el 2002 para volver a ver a este patriarca de una familia de actores en “Kill Bill”, de Quentin Tarantino, su último gran papel. Siete años antes de encontrarlo muerto, en un cuarto de hotel en Bangkok, Tailandia. Esa fue la despedida fatal de un actor, que siempre lo vimos en películas violentas, pero que en el fondo le hubiera gustado hacer una de amor, así lo confesó en aquella visita, pero lamentablemente nadie se lo ofreció.
(María Fernández Arribasplata)
Fotos: Archivo Histórico El Comercio/ Agencia