Pantaleón llegó a China
Somos pocos pero cuando estamos juntos parecemos muchísimos. La inauguración de la Semana del Perú en China con la cinta “Pantaleón y las Visitadoras” en el Instituto Cervantes ha demostrado una vez más la importancia de trabajar juntos, con el máximo esfuerzo y desinteresadamente. Con el corazón puesto en la construcción de ese Perú que queremos reflejar. Somos peruanos y seámoslo siempre, hasta en China.
El Embajador Gonzalo Gutiérrez Reinel abrió la noche con un mensaje de agradecimiento que dejó una grata impresión en el público chino ya que en esta cultura se valora mucho el trabajo en equipo y las muestras de gratitud.
Agradeció, entre otras varias personas, al encargado de la sección cultural de la Embajada del Perú, Iván Silva, por su trabajo en la organización de este ciclo cinematográfico. Iván no se contentó con hacerlo bien sino que puso su corazón, al mismo estilo de Pantaleón.
Es la primera vez en China que se presenta un ciclo de diez películas peruanas con subtítulos en chino. Esto ha sido posible gracias a un equipo de trabajo formado por nueve estudiantes chinas de español de tres universidades de Beijing y nuestro peruano César Espinosa Su.
César, contagiado por el entusiasmo de Iván, ha sido el editor de los subtítulos, verificando que a pesar de los giros idiomáticos no se pierda el encanto de los diálogos en la traducción del español al chino. Este grupo puso tanto compromiso que se logró una versión china impecable.
Tras la exhibición, el periodista peruano Michael Zárate no solo comentó esta cinta, sino que además hizo referencias a la primera adaptación cinematográfica de 1975, a cargo del propio Vargas Llosa, y estableció un paralelismo con el libro. El panorama quedó completo.
Y estas personas hasta preguntaron, comentaron y felicitaron públicamente a los peruanos…
El aporte de Iván-César-Michael, el apoyo de los amigos chinos, y la presencia de la pequeña comunidad peruana en Beijing ha dado como resultado que la inauguración de la semana del Perú en China trasmita precisamente ese espíritu que nos caracteriza y nos hace tan pero tan peruanos. Ese don de compartir con alegría.
¡Y eso que la semana recién empieza!