Leslie Stewart es un claro ejemplo de la importancia que tiene reaccionar tempranamente contra el cáncer. Pese a que admite no haberse informado lo suficiente antes, tenía el hábito de hacerse chequeos cada año debido a los antecedentes de este mal en su familia.
En el 2014 fue intervenida quirúrgicamente debido a un incipiente cáncer causado por el virus del papiloma humano. Su recuperación no interfirió con su agenda laboral y, aunque el proceso fue rápido, no se confió de los resultados que obtuvo. Más adelante, en el 2017, le detectaron cáncer de piel; y, como la vez anterior, ella actuó a tiempo. “Las mujeres a veces damos por sentado que con la prueba de Papanicolaou es suficiente. Pero una tiene que exigir más y preguntar sobre los tipos de enfermedades que hay. A partir de mi experiencia, me he vuelto más consciente de que debo ahondar más en estos temas”, señala la intérprete.
Por ello, para Stewart es importante remarcar que es mucho más sencillo lidiar con el cáncer al comienzo. En su caso, al detectarle la anomalía le recomendaron extirparla lo antes posible. Después solo tuvo que guardar dos días de reposo y continuar con revisiones médicas cada seis meses. “No hay nada que temer. Uno tiene que cuidarse, pero tampoco tiene que angustiarse. A veces cometemos el error de decir que no tenemos tiempo para ir al médico. Pero instituciones como la Liga contra el Cáncer ponen a disposición de la gente varios recursos. Pensemos un poco en nuestra familia y demos un ejemplo a los más jóvenes”, asegura la actriz, que por el momento alterna su rol como embajadora de la liga con su actividad laboral.
—Un mal que merece atención—
El cáncer de piel, al afectar a un órgano más visible, es relativamente fácil de detectar. Sin embargo, existen algunas enfermedades benignas que podrían confundir a la mayoría de personas. Ante la duda, el doctor Christian Loayza, cirujano oncólogo de cabeza y cuello de la Liga contra el Cáncer, recomienda primero asistir al dermatólogo. “Es el primer especialista en identificar algo anormal. Cuando hay sospecha de un cáncer, se ordena hacer una biopsia. Esa pequeña muestra es llevada al laboratorio y ahí se confirma el diagnóstico”, explica.
Según cuenta, esta enfermedad se puede clasificar principalmente en dos grupos: melanoma o no melanoma. El primero de ellos es del tipo más agresivo y con un gran riesgo de hacer metástasis, es decir, cuando se extiende a los órganos o a los ganglios. No obstante, suele afectar al 10% de pacientes de cáncer de piel.
Otro factor a tener en cuenta es que la enfermedad se desarrolla a lo largo de los años. Por tal motivo, es importante que desde temprana edad se convierta en parte de los pendientes asistir cada año a una revisión. Debido a que la radiación solar suele ser la principal causa de este tipo de cáncer, Loayza enfatiza que gran parte del éxito al momento de cuidarse depende del bloqueador en la piel.
“Hay sombreros anchos que son útiles, ya que los gorros no suelen proteger mucho. Debe cubrir las orejas y el cuello. También es recomendable usar ropa de material sintético y de colores oscuros. Estos tonos repelen mejor la radiación. El consumo de vitamina A es igualmente importante”, finaliza el especialista.