Carlos Martin González, un joven mexicano de 26 años, se encuentra detenido desde el pasado 7 de julio en un centro migratorio de alta seguridad en Florida, a pesar de haber ingresado legalmente a Estados Unidos con una visa de turista vigente. Su único error: viajar en un auto sin registro válido.
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Según informó Univision Orlando, todo comenzó cuando la Patrulla de Carreteras de Florida detuvo el vehículo en el que se desplazaba González.
Aunque la infracción administrativa no constituía un delito penal, las autoridades emitieron de inmediato una retención migratoria (immigration hold), lo que desencadenó su transferencia al sistema de detención federal.
Desde entonces, su situación ha ido complicándose sin claridad sobre su futuro legal.
Las autoridades migratorias trasladaron a Carlos Martin González al centro migratorio Alligator Alcatraz tras una infracción vial menor. | Crédito: YouTube Univision Orlando
Sin caso, sin abogado y sin asistencia consular
Carlos permanece recluido en el centro migratorio Alligator Alcatraz, una instalación ubicada en una remota y pantanosa zona del estado.
De acuerdo con sus familiares, no ha podido recibir visitas, ni establecer comunicación directa con representantes consulares mexicanos.
Tampoco cuenta con representación legal, ya que al no habérsele asignado un número de caso migratorio, ningún abogado puede intervenir formalmente.
“No entendemos por qué lo tratan como a un inmigrante indocumentado. Tiene visa vigente, entró de forma legal. ¿Por qué encerrarlo en un centro como ese?”, cuestionó su padre, quien viajó desde México con la esperanza de verlo, pero fue rechazado en la puerta del centro.
Las pocas llamadas telefónicas que Carlos ha podido hacer son prepagadas, limitadas a cinco minutos y bajo estricta supervisión, lo que ha complicado aún más cualquier intento de organizar su defensa o presentar una queja formal ante las autoridades migratorias.
La familia de Carlos Martin González denuncia que no ha recibido visitas ni asistencia consular desde su detención el 7 de julio.| Crédito: YouTube Univision Orlando
Un limbo legal que se repite
Expertos en inmigración han señalado que el caso de Carlos no es un hecho aislado. Aunque entró legalmente, su detención refleja una falla estructural en el sistema migratorio estadounidense, en el que una infracción menor puede derivar en consecuencias desproporcionadas.
“Hay un vacío legal que permite que personas con visa válida terminen tratadas como si hubieran cruzado ilegalmente”, advirtió una abogada consultada por el citado medio.
Desde el consulado de México en Orlando, se confirmó que conocen el caso, pero que no pueden intervenir sin un número de expediente formalizado, lo que agrava aún más la indefensión en la que se encuentra el joven.
La familia de Carlos continúa exigiendo su liberación inmediata, recordando que no ha cometido ningún delito y que su visa sigue vigente.
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