Cuatro candidatos no declararon datos sobre sus empresas

Entre los candidatos presidenciales que poseen acciones en alguna compañía, solo el líder del partido Orden, Ántero Flores-Aráoz, declaró en la hoja de vida que entregó al Jurado Nacional de Elecciones (JNE) el valor de estas. Los otros, entre los que están César Acuña (Alianza para el Progreso del Perú) y Hernando ‘Nano’ Guerra García (Solidaridad Nacional) omitieron reportar esa información. 

Flores-Aráoz dijo ante el JNE ser propietario del 99,97% de la empresa Construcfac S.A., participación valorizada, según su hoja de vida, en S/1’616.666; del 50% del estudio Flores-Aráoz y Asociados SCRL, equivalente a S/604.453; y de 376.605 acciones en el Banco Financiero, valorizadas en S/1 cada una. 

Además, el ministro de Defensa del segundo gobierno aprista (2006-2011) declaró ser titular de la compañía Inverfac EIRL, cuyo valor patrimonial es de S/757.394. 

“Yo no he dejado de poner nada, inclusive exponiéndome a que me rapten. Está mal que otros candidatos no lo hayan hecho, se debe cumplir la ley. Y hay algunos que no tienen ingresos. Que me digan cómo viven. Eso es realmente milagroso”, manifestó Flores-Aráoz en comunicación con El Comercio. 

Según el reglamento de la Ley de Partidos Políticos, la declaración de bienes y rentas de los candidatos debe ser igual a la presentada por los funcionarios públicos. Según la norma aplicable a dichos funcionarios (DS N° 080-2001 PCM), estos deben informar sobre sus bienes (lo que ya de por sí incluye cualquier acción o participación en empresas) así como “todo aquello que [les] reporte un beneficio económico”. Cabe precisar que los bienes incluyen cualquier activo en el Perú o en el extranjero. 

Para el ex secretario general del JNE Roque Bravo, el objetivo de la norma es claro: “La idea es que la ciudadanía conozca cuál es el patrimonio real de una persona que aspira a ejercer un cargo. No solamente se debe consignar el valor nominal [de las acciones o de la empresa], sino el comercial”, acotó. 

Bravo también señaló que las acciones o el valor patrimonial de una empresa forman parte de los “bienes muebles” que se deben declarar ante el JNE. Similar posición tuvo el constitucionalista Enrique Bernales, quien señaló que el Código Civil establece que las acciones en una compañía son consideradas bienes “muebles”. Añadió que los candidatos deben presentar información sobre todos sus bienes, incluyendo inversiones, cuentas de ahorros, colecciones, entre otros. 

¿Y las acciones de la UCV?
Si bien el candidato presidencial por APP, César Acuña, declaró ser dueño de ocho terrenos, nueve inmuebles, entre casas y departamentos, 110 vehículos, incluso un estadio de fútbol, no consignó en su hoja de vida cuántas acciones tiene en la Universidad César Vallejo (UCV) y en el resto de su consorcio educativo. 

Según los estados financieros de la UCV al 2014, a los que este Diario tuvo acceso, el valor patrimonial de las acciones de dicha casa de estudios asciende a más de S/587 millones. Esta cifra no incluye el valor de las participaciones que el candidato de APP mantiene en las universidades Señor de Sipán y Autónoma del Perú, que también son de su propiedad. 

Al respecto, el personero legal de APP, Carlos Gonzales, dijo que toda la información que presentaron ante el JNE es la que exigía la norma. “Hemos llenado el formulario de manera escrupulosa y con la asesoría de un contador. Eso es todo lo que tengo que decir”, refirió. 

El postulante por Perú Patria Segura (PPS), Renzo Reggiardo, tampoco reportó el valor de las participaciones que mantiene en la empresa Ariana Publicidad S.A.C. “El formato del jurado no exige esa valoración comercial de la empresa, no tengo problemas en decirlo, mi agencia vale S/5 millones […]. No sé por qué el drama o el misterio. Si me lo piden, lo pongo, en tal caso hay un vacío, no hay espacio para ponerlo”, respondió el también congresista. 

El ex alcalde de Los Olivos Felipe Castillo (Siempre Unidos), quien fue uno de los últimos en inscribir su candidatura presidencial, registró ante el jurado que trabaja como director de la compañía Especialidades Médicas Los Olivos. 

Consultado sobre quién era el dueño de esta empresa, Castillo dijo, en un inicio, que era él y luego se retractó y señaló que se la había traspasado a sus hijas. “Es una cosa pequeña”, indicó. 

Otro aspirante a llegar a Palacio que no consignó en su hoja de vida el valor de su empresa fue Hernando ‘Nano’ Guerra García, de la alianza Solidaridad Nacional-Unión por el Perú. Él es titular de Nano Guerra-García E.I.R.L., compañía fundada en el 2010 y que se dedica a la asesoría de negocios. Este Diario intentó comunicarse, sin éxito, con el postulante por SN-UPP.

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