Hoy es el Día Mundial de la Diabetes, una enfermedad crónica que afecta a cada vez más personas. Es una enfermedad caracterizada por un exceso de glucosa, o azúcar, en sangre. Si bien existen tres tipos principales, la más común es la diabetes tipo 2. En nuestro país afecta aproximadamente al 7% de la población.
En personas con diabetes tipo 2, el control de la enfermedad está directamente relacionado con su alimentación y estilo de vida. Si bien se necesitan fármacos para ayudar al control de la enfermedad, si la alimentación y el estilo de vida de los pacientes son adecuados, los niveles de glucosa se mantendrán estables. Lograr este objetivo previene o retarda la aparición de las complicaciones como problemas al corazón, a los ojos o los riñones, por ejemplo.
Es precisamente por esta estrecha relación entre la alimentación y el control de la glucosa que aparecen tantos mitos sobre qué es correcto consumir por una persona que tiene esta enfermedad y qué no. Por ello, la educación en pacientes con diabetes tipo 2 y sus familiares es uno de los pilares fundamentales para el control adecuado. Si bien cada caso es diferente y se necesita personalizar la alimentación de cada paciente, es importante aclarar algunos mitos sobre la alimentación en personas con diabetes tipo 2:
1. Las personas con diabetes tienen prohibido consumir algunas frutas: Falso. Todas las frutas son alimentos saludables, nutritivos y parte de toda alimentación balanceada. Los pacientes con diabetes pueden consumir frutas, siempre enteras o picadas. Sin embargo, la cantidad que se consume es importante, usualmente se recomienda el consumo de dos raciones al día. Es importante que en los controles del paciente con su nutricionista se discuta la cantidad recomendada de frutas, ya que puede variar según el paciente.
2. No se recomienda consumir azúcar, pero se puede reemplazar por miel: Falso. Es cierto que el consumo de azúcar, y alimentos que la contienen en altas cantidades, está desaconsejado en pacientes con diabetes porque elevan rápidamente los niveles de glucosa en sangre. Sin embargo, la miel causa casi el mismo efecto. No se recomienda reemplazar azúcar blanca por miel ni por azúcar rubia, sino por edulcorantes sin calorías. Para encontrar el mejor reemplazo del azúcar para cada paciente, es recomendable conversarlo con un nutricionista.
3. Las personas con diabetes tienen prohibido comer huevo: Falso. El huevo es un alimento que no contiene carbohidratos (azúcares), por lo tanto, no eleva el nivel de glucosa en sangre. Se puede consumir huevo: tanto la clara como la yema. Consumir uno o dos huevos al día no tiene ningún efecto en la glucosa sanguínea.
4. Las personas con diabetes pueden comer cualquier tipo de alimento y en cualquier cantidad, ya que sus pastillas controlan la glucosa: Falso. Para un adecuado control de la glucosa se necesita llevar una alimentación balanceada y adecuada, además de hacer actividad física y tener otros hábitos saludables, como evitar el tabaco, por ejemplo. Si la persona sólo basa su tratamiento en fármacos es muy probable que su glucosa se eleve y aparezcan complicaciones.
Se recomienda a todos los pacientes con diabetes tipo 2 y a sus familiares que conversen sobre esta información con su nutricionista, endocrinólogo y su educador en diabetes. Es importante y necesario adaptar y personalizar siempre la alimentación de todos los pacientes según sus objetivos, su nivel de control, otras enfermedades que el paciente pueda tener, entre otros aspectos relevantes.