Devuélveme mi disco
¿DÓNDE ESTARÁ MI QUERIDO PRIMER CD?
Yo quería un disco de Los Beatles pero me llevé a casa uno de Vilma Palma e Vampiros. No los conocía pero el rock argentino es mi única debilidad declarada. Ese disco compacto (el primero de mi vida) simplemente parecía ser un mal menor. Por la compra del minicomponente LG con reproductor de CD, el vendedor solo nos dio dos opciones para el disco compacto de regalo. O era Vilma Palma o eran Los Paquines. O “Mojada” o “El Venado”. Mis hermanos y yo regresamos a casa en “un auto rojo”.Me gusta la música del pasado porque escuché discos de vinilo hasta casi los 15 años. En casa se malograron todos los equipos de sonido pero la que siempre resistía era la vieja radiola Imperial del año de Ñangué. La revolución tecnológica y musical llego tarde a casa, recién cuando mis hermanos mayores comenzaron a trabajar e hicieron colecta entre los tres para comprar el equipo. Ese “modernísimo” LG también nos abría al desconocido mundo de los discos compactos. Abrí el disco de Vilma Palma y lo puse en el reproductor. Hasta hoy recuerdo cuál fue la primera canción que sonó aquella tarde de 1993.
Antes de “3980″ (así se llamaba el disco) solo se escuchaba vinilo en casa. O casetes que mi hermano y yo grabábamos con devoción (por ejemplo algunos especiales imperdibles de Doble 9 o Radio Miraflores). Casi duró 2 meses esa monotonía musical, después llegó Led Zepellin, Queen y The Police, los tres discos de mi hermano. Yo, con 13 años, tenía que conformarme con “Travesti” y con “Me vuelvo loco por vos”. Hasta que Patricia, mi hermana, llegó con un amigo a la casa. El varón vio mi disco de “Vilma Palma” y me dijo:
-Chévere Vilma Palma, préstamelo pues.
-No, es el único disco que tengo.
-¿Y si te dejo uno de garantía?
-Atraco.
Por fin había llegado lo que tanto había esperado. Al fin iba a tener un disco compacto diferente, no el que yo quería pero sí un sonido para relajar el estrés auditivo de escuchar siempre lo mismo. El amigo de mi hermana, cuyo nombre (maldita sea) no recuerdo, vivía cerca de casa. Solo demoró 20 minutos en traer ante mis ojos mi redondo y plateado objeto de deseo.
-Tengo solo este, es paja ¿puede ser no?
-…..
Pasé casi dos meses escuchando repetidas veces los añorados vejestorios de Air Supply. Me sentía cursi y algo debilucho tarareando las letras de “Lost in love” o de “All out of love”. De alguna manera comencé a extrañar las estrofas fáciles del ‘Pájaro’ Gómez. Busqué a mi hermana para preguntarle por su amigo. Quería volver a hacer el ‘cambiazo’.
-Nos peleamos, es un tarado.
No era posible. Se había roto la amistad y no hubo repartición (ni devolución) de bienes. Mi disco de Vilma Palma jamás regresó. No volví a ver a ese sujeto, a ese embustero, a ese vividor de los trueques. ¿Dónde estarás, fabricante de mentiras? Te aprovechaste de un chibolo de 13. Lograste tu cometido. No querías la amistad de Patty, solo el disco de Vilma Palma de su adolescente hermano. Te salió linda, jugador.
Si alguien conoce el paradero de mi “3980″ avise por favor. Ofrezco generosa gratificación. Atrás de la portada está mi nombre y alguna frase de motivación, de esas que acostumbraba a escribir en tiempos de colegio. En la mudanza familiar de ese 93, se perdió el disco de Air Supply. Yo no lo quería. Igual, ya había aprendido de memoria todas sus canciones, con primera voz y segunda. Si alguno de ustedes visita algún vacío Karaoke limeño y escucha que por los parlantes se escucha “Lost in love” no busque mucho. Ese soy yo.
¿Recuerdas dónde dejaste tu primer disco compacto? Pasaron algunos años para que pueda tener fácil acceso a los discos de mi hermano y unos cuantos más para que pueda armar mi colección personal. Tengo casi toda la discografía de Andrés Calamaro en versión original, algunos de Los Beatles, otros de Charly y uno de The Cure. Después que mi viejo rematara la vieja radiola Imperial (hace unos 15 años) no he podido regresar a los discos de vinilo que escuché por tanto tiempo. Estoy tentado a comprarme un tornamesa. Pero esa será otra historia.
Con tanta desvaloración de la música, con tanta piratería y música en MP3, comprar discos compactos es un auténtico acto de nostalgia. Aún compro discos, compactos y de vinilo. He regalado discos compactos en el “Amigo Secreto” y en Navidad. He perdido discos en equipos portátiles de personas que ya no veo (querida M. espero me hayas perdonado y así recuperar mi compilación de baladas ochenteras en inglés). Hace 4 años entrevisté a Gian Marco para una conocida revista limeña, al final me regaló uno de sus discos y yo le pedí que la autografíe (para ti) con grabación de voz incluida (dedicándote “Después de mi” con la buenísima frase de la alfombra y la inocencia). Después de esa oferta del minicomponente, nunca más me regalaron un disco.
Compadrito, ex amigo de mi hermana, si estás leyendo esto devuélveme mi CD. Mi primer disco compacto fue una inesperada yapa pero cuando leí que Vilma Palma venía a Lima quise volverlo a tener en casa. Porque fue la primera vez, porque crecí y me cambió la voz intentando sorprender con “Otra canción de amor”. Mañana iré a ver a ese grupo argentino y espero que repita las canciones de ese, mi primer CD. No será un disfrute de exquisitez musical, ni nada que se le parezca, pero sí será un oportuno punto de retorno. Con las canciones y los discos a veces no solo importa si suenan bien. Sus melodías pueden ser simples pero se convierten en intensas sinfonías por la forma como llegan (para después irse).
Va el slam ¿Cuál fue tu primer disco compacto? ¿Cuál fue tu último disco de vinilo? ¿Recuerdas las canciones de esos discos noventeros que compraste? Esta pregunta si es polémica ¿podrías confesar cuál fue tu último disco original?
La palabra es de ustedes
TRES DE MI PRIMER CD DE VILMA PALMA
“Mojada” (la otra feeling del disco)
“Auto rojo” (esta creo que es la más nostálgica de las tres, regreso al colegio en una)
“Te quiero tanto” (solo vos y shoooo… eh ah uh uh eh eh ah)
EL NOSTÁLGICO DE LA SEMANA
[Vuelva esta sección clásica con uno de los mejores: el genial Dyango y la que pudo haber sido una de sus primeras apariciones estelares. Canta “Amar y Perder”… porque es mejor querer y después perder que nunca haber querido]
LO MÁS CURSI
[Uno de los grandes hits de Muñecos de Papel. Ricky Martin y Sasha cantando “Todos mis caminos van a ti” (las convulsiones del ex Menudo son memorables)
MÁS NOSTALGIA
Puedes seguirnos por el grupo del facebook que funcionó muy bien para la reunión de aniversario o en el Twitter donde ya hemos unido a más de 400 seguidores (vamos todavía). Hasta la próxima semana (o quizá antes, estén atentos)
ACTUALIZACIÓN URGENTE
Por motivos que escaparon totalmente de sus manos, Pedro no ha podido actualizar los comentarios ni las respuestas en este post. Ha prometido retomar todo en las próximas horas. Gracias a todos los fieles lectores que le han escrito esta semana, los comentarios están intactos y aparecerán en cualquier momento. Como diría Canelo (vamos, todavía!!!!).