Starcraft 2: Wings of Liberty

El universo de Starcraft está compuesto por tres razas: los Terran, los Zerg y los Protoss. La primera está formada por los terrícolas que han llegado al siglo XXVI con importantes avances tecnológicos pero con la misma ambición descontrolada de siempre. Las otras dos razas fueron creadas por otra estirpe ancestral ya desaparecida, llamada Xel’Naga. Los Zerg son sumamente salvajes, mientras que los Protoss se caracterizan por su misticismo. Se han escrito varios libros que relatan la historia del universo de Starcraft y expanden lo visto en el primer juego de la serie y en su expansión llamada Starcraft: Broodwar. 

Los hechos de Starcraft 2 ocurren 4 años después de lo acontecido en Broodwar. Jim Raynor, quien anteriormente era uno de los pilares del ejército Terran, es ahora el más buscado de la galaxia tras marcar sus distancias con Arcturus Mengsk, el emperador del nuevo gobierno Terran denominado el Dominio. Raynor forma un grupo de revolucionarios y planea derrocar a Mengsk y descubrir qué sucedió con la soldado Kerrigan, su ex compañera que fue apresada por los Zerg y convertida en su nueva reina.

La historia de Starcraft 2: Wings of Liberty se centra en los Terran y específicamente en Jim Raynor. Él, al mando de un crucero interestelar, deberá explorar distintos planetas y realizar misiones en ellos para cumplir sus objetivos. Las próximas entregas de Starcraft 2: Heart of the Swarm y Legacy of the Void, se centrarán en los Zerg y Protoss, respectivamente.

El modo para un jugador trae entonces una campaña centrada en los Terran. Se necesitarán alrededor de 15 horas de juego para terminar todas las misiones que el juego nos ofrece y que son sumamente variadas. Por ejemplo, en una deberemos sobrevivir 20 minutos a los constantes ataques Zerg, mientras que en otra tendremos que recolectar una cantidad específica de mineral.

Este modo nos permitirá utilizar algunas unidades que no están presentes en el modo multijugador, como la médica o el lanzallamas (más conocido como firebat). Además, se ha incluido un entorno más complejo entre cada misión, que además de permitirnos conocer más sobre algunos personajes y sobre la historia del juego, nos permitirá realizar upgrades a nuestras unidades y edificios, contratar mercenarios e incluso, investigar nuevas tecnologías para utilizarlas en el campo de batalla.

Los videos son de una excelente calidad, tal y como nos tiene acostumbrados Blizzard desde hace un buen tiempo. La música es épica y sirve para envolvernos en este universo de ciencia ficción. Por útlimo, las voces de todos los personajes están muy bien realizadas, y la versión latina carece de cualquier acento regional fastidioso.

Además de la campaña, Blizzard nos ofrece un tutorial y un modo de Retos en el modo para un solo jugador. El primero, nos explicará lo esencial para aprender a jugar un juego de estrategia en tiempo real (RTS) y el segundo nos ayudará a entender algunos conceptos básicos como qué unidades son útiles para determinadas situaciones. Esto, ante la crítica que se hizo al primer juego sobre que la campaña no nos entrenaba para salir a jugar en el modo multijugador. Blizzard espera que este nuevo modo ayude en algo a internarnos en el aspecto competitivo de Starcraft 2.

Starcraft se convirtió en uno de los principales representantes de los ciberdeportes en todo el mundo. Corea es el mejor ejemplo de esto. Allá no solo es considerado un deporte nacional, sino que los mejores jugadores son idolatrados cual estrellas de rock y ganan miles de dólares. 

Al ser un juego de estrategia en tiempo real, es necesario practicar mucho y estudiar diversas estrategias para ponerlas en práctica en el momento apropiado. Es una batalla mental en la que un solo error puede costar la partida. Los jugadores del juego hablan mucho del “Macro” y “Micro” manejo. El primero está centrado en el desarrollo de la economía de nuestra facción y en la creación de unidades de combate. El segundo tipo de manejo está centrado en el control específico de cada unidad y sus habilidades especiales. 

Hasta la versión anterior, uno podía competir en Starcraft a través de una red LAN, como sucede en una cabina pública en Perú. Sin embargo, ante el avance de la piratería, Blizzard decidió remover esta opción y ahora solo se podrá jugar en línea a través de los servidores de la empresa, mediante el servicio Battle.net. Para acceder a él,es necesario contar con una copia original del juego. Además, se debe tener cuidado a la hora de elegir la versión a comprar de Starcraft 2: Wings of Liberty, ya que existen 5 servidores distintos: Norteamérica, Europa, Corea, Taiwán y Latinoamérica. Si uno tiene la versión de una región del juego, solo podrá jugar contra aquellos que tengan la misma versión.

Ya conectados a Battle.net, el sistema de encontrar un oponente es bastante fácil. Además, el sistema nos pondrá en ligas de acuerdo a nuestro nivel, para tener una mejor experiencia de juego. El juego sigue siendo igual de equilibrado que su antecesor, y las tres razas tienen unidades y estructuras totalmente diferentes a las de las demás. Se han incorporado nuevas unidades que hacen al juego más dinámico, como el Thor, una especie de Goliat mejorado que será una de las unidades antiaéreas más fuertes de los Terran.

Starcraft 2: Wings of Liberty ha logrado lo que Age of Empires 3 no pudo hacer: mantener la esencia del juego que saltó a la fama y crear una versión a la altura de las exigencias técnicas de la actualidad. Creo que es un excelente juego de estrategia que continuará impulsando los ciberdeportes en el mundo, junto con Warcarft 3, Fifa, Counter Strike y los juegos de consolas. El juego (que cuesta $60) puede ser comprado a través de Amazon, o en forma digital a través de la página de Blizzard con una tarjeta de crédito. 

Los dejo con la espectacular introducción del juego: