Reseña: Pathfinder: Wrath of the Righteous
Pathfinder: Wrath of the Righteous acaba de salir y tuve acceso a una versión de evaluación. ¿Qué hay de nuevo en el género de juegos de rol isométricos?
Pathfinder: Wrath of the Righteous es el nuevo juego de Olwcat, el estudio ruso que trajo de vuelta el género de juegos de rol isométricos con Pathfinder: Kingmaker hace unos años. Esta vez, el juego es publicado por Meta, un conglomerado de estudios que hace unos meses mostró su parrilla de juegos iniciales.
DE VUELTA AL MUNDO DE PATHFINDER
Pathfinder es un juego de rol que se basa en el clásico sistema de Dungeons and Dragons. Sin embargo, la historia y el universo es otro. En ese sentido, el juego de rol tiene libertades que la franquicia de Wizards of the Coast no puede tener. Pathfinder, es entonces bastante familiar para los clásicos jugadores de rol pero al mismo tiempo tiene un aire fresco que muchos han esperado por mucho tiempo. Eso se notó en el primer juego de Pathfinder, Kingmaker, que nos llevó a un mundo lleno de problemas y en el que nosotros debíamos no solo hacernos cargo en las batallas sino también en la administración de un reino. Ese fue uno de los pilares que lo diferenciaba de otros juegos del género, como PIllars of Eternity o incluso el nuevo Baldur’s Gate 3. Sin embargo, esa gestión tuvo algunas críticas por lo burocrático que se sentía a veces y por la poca injerencia que tenía en el juego final.
En esta oportunidad, Pathfinder: Wrath of the Righteous nos presenta una campaña independiente a la del juego original (no es una secuela directa) pero tiene muchos elementos que lo mantienen por la misma línea, mientras agrega dos características fundamentales: los caminos míticos y las cruzadas.
CAMINOS MÍTICOS
El foco en los juegos de rol son los personajes. Y en este nuevo juego podremos no solo aumentar el nivel y las habilidades de nuestro personaje, sino llevarlo al campo mítico. En un momento de la historia podremos llevar a nuestro personaje a otro nivel, por ejemplo, convertirlo en un Lich o en un Dragón, y poseer habilidades muy por encima de los personajes habituales. Estos nuevos poderes los utilizaremos para combatir con las huestes de demonios con las que nos enfrentaremos.
Este aspecto le da un giro más épico a la historia. Ya no solo estamos salvando al mundo con personajes comunes, sino lo haremos con un héroes extremadamente poderoso porque así lo requiere la ocasión.
LAS CRUZADAS
Si Pathfinder: Kingamaker tenía la administración de un reino como uno de sus puntos centrales, en Wrath of the Righteous tendremos que comandar a un ejército para enfrentarnos con los demonios. De esta forma podremos ir explorando el mapa poco a poco y dirigiendo de manera general a nuestras unidades.
Esto le añade complejidad al juego pero de acuerdo a lo experimentado, calza muy bien con el espíritu del juego y se integra bien a la historia.
COMBATES POR TURNOS
Otra crítica o pedido que muchos hacían era la utilización de un sistema por turnos, como el que usa Divinity: Original Sin. Si bien algunos como yo crecimos con el clásico sistema de combate activado por pausa, los más nuevos en el género lo reclamaban. Los desarrolladores escucharon y han agregado ese modo que puede ser accedido en cualquier momento de la pelea presionando la tecla T.
UNA MEJOR CURVA DE APRENDIZAJE
Los juegos de rol suelen ser complejos y difíciles de entender, sobre todo para aquellos que no tengan experiencia en el género. Eso sucedió con la primera entrega, pero en esta, Owlcat Games aprendió la lección y nos ofrece una serie de tutoriales muy bien trabajados que permiten que los jugadores novatos puedan integrarse fácilmente a la historia y a las características del juego. Por ejemplo, cómo equipar al personaje, cómo elegir sus habilidades y sus hechizos, cómo descansar, etc.
El equipo de desarrollo ha mejorado mucho en términos de experiencia de usuario y el juego se siente así. Mucho más solido. Más robusto. Con menos bugs. Pues una crítica que tuvo el primer juego es que no se sentía terminado cuando se lanzó. Esta vez esto no sucede así, y esta entrega está muy bien trabajada y pulida.
EL JUEGO DE ROL DE 2021
Pathfinder: Wrath of the Righteous es el mejor juego de rol isométrico de 2021. Y si bien no han habido mucho competidores este año, con Baldur’s Gate 3 aún en Early Access y ningún otro lanzamiento sólido, es un reconocimiento que vale la pena mencionarlo. El juego mantiene la esencia del original y le agrega varias características que lo hacen único y especial. En sus más de 50 horas de juego, en el que podemos experimentar 25 clases y 12 razas, que además dejan abierta una puerta para más DLCs, Pathfinder: Wrath of the Righteous es un juego con una excelente narrativa y excelente apartado técnico. Muy recomendable.
Pathfinder: Wrath of the Righteous está disponible en PC a través de Steam, GOG y la Epic Game Store a 50 USD.