Iron Lamb: punk hecho por metaleros
Seguimos con Suecia y no es intencional, es solo el deseo de dar cuenta de lo que considero el día a día más relevante.
La escena extrema sueca de metal, a diferencia de la de Estados Unidos y otras naciones arranca en el hardcore punk antes que en el heavy o thrash metal. La banda Nihilist, matriz creativa de Entombed y Unleashed y ejemplo para Grave y Dismember entre muchas otras, se nutría del sonido punk de bandas como Discharge de Inglaterra y Anti-cimex de Suecia. No es raro entonces que la filiación punk/metal sea parte del más íntimo background de muchos deahtbangers y blackers de ese país. Considerando eso, no es raro que integrantes de conocidas bandas de metal se unan en un proyecto de impronta punk pero que resuma metal por todos sus poros. Los ejecutores de esta aventura son Johan Wallin (General Surgery, ex- Repugnant), Thomas Daun (Dismember, ex-Insision),Grga Lindström (Ghost, ex-Repugnant) y Daniel Ekeroth (ex- Dellamorte, ex- Insision, además de historiador y teórico del metal autor de”Swedish Death Metal”). Bajo el designio de dar un tributo a aquellos sonidos premetálicos que les nutrieron en su formación musical original han conseguido un producto inteligente, oportuno, original y de calidad musical. Este es Iron Lamb.
No sé exactamente qué implicaciones tendrá el nombre elegido, Iron Lamb, pero me encanta. El término Iron empleado en el metal con tanta frecuencia para designar el poder unido a la palabra Lamb (cordero) no unida para nada al imaginario metálico ( no me vengan con Lamb of God, por favor, esto va en serio) genera una impresión única entre sarcástica y paródica que motiva el interés. La portada bícroma blanca de dibujo en negro con una oveja coronada también conspira a la seriedad con un dejo de humor instantáneo. Acertado.
El disco se abre con una guitarra distorsionada que podría abrirse a un tema crust, pero comienza una tonada punk acelerada, una voz que me recuerda a alguna vieja banda thrash de los 80 se oye desde el fondo. Se trata de Rotten Wood, el tema de apertura del disco. Muy activo y veloz, en estructura es completamente punk, las guitarras se mueven dentro de los esquemas clásicos del rock con eficiencia. Hay profusión de coros.
The Original Sin sigue un modelo que nos remite a Motörhead, sobre todo al del 77 – 79. Muy roquero y melódico a la vez. Dubious Preacher es incluso más setentero y es en esta en la que encuentro una notable influencia de lo que hicieron las Runnaways cuando aún cantaba con ellas Cherie Currie. Acá tienen un papel importante las melodías de guitarra que le dan variedad al tema y por extensión al conjunto que estaba ya muy duro. Our Demise suena completamente a Motörhead, en concreto a Iron Fist. Poison también se aleja del punk y entra en el rock puro, simple y directo en el que pudo derivar el punk. Suicide es más hardcoriana pero en un estilo melódico. I don’t Wanna be like You parece un cruce entre Sonic Youth y Nirvana, es más rock de los 90, pero más duro de lo que fueron esas bandas. I don’t Like cuenta con una introducción hablada, al parecer de una cinta. La canción en sí vuelve a la tónica punk de los primeros temas, pero los solos de guitarra entran más en el heavy metal. Iron Lamb es un tema que cae ya dentro del metal con matices rockeros, no es tan punk y se oye muy moderno. Dead Inside es un tema compendio en el que se puede oír bastante de todas las influencias, desde Motörhead hasta Nirvana pasando por Runnaways y algo de la NWOBHM.
No es un disco de metal, pero es un disco hecho desde el metal. Es una reinterpretación de lo punk a partir de quienes están haciendo metal extremo desde hace más de una década. El sonido es muy bueno y el disco como tal tiene actitud. Es un buen ejemplo de lo bueno que se puede hacer contando ahora con tantas influencias y tantos desarrollos paralelos dentro y fuera del metal. Además, es interesante saber que hacen los headbangers fuera del metal y en este caso el proyecto vale completamente la pena.