El ganador es el amor
Por amor, he cruzado todas las fronteras que existen. He viajado por el Oriente de un extremo al otro. He convivido con personas de culturas diametralmente opuestas, de las cuales casi siempre me he enamorado. He ido y he venido, a veces sin prisa, a veces corriendo. Me he internado en bosques tenebrosos sin esperar ver la luz. Me he caído desde el pico más alto hasta un pozo sin fondo. Veinte años después de estas expediciones, estoy de vuelta, al mismo punto de inicio.
Es que a veces el amor es un círculo…
Quiero agradecer profundamente TODOS los comentarios que ha recibido este post. A todos aquellos que decidieron abrir sus corazones y compartir sus historias de amor y desamor. A los que analizaron otras experiencias y nos dieron más luces sobre este espinoso tema. Y también, a los que leyeron en silencio cada uno de los relatos. A todos, muchas gracias de corazón.
Ayer, precisamente el 1 de noviembre fue mi cumpleaños. Desde el amanecer cayó nieve y la ciudad se cubrió de blanco. Por la noche volví a leer cada uno de los comentarios de este post porque los considero hermosos regalos. En ese momento, fue casi imposible elegir solo uno de ellos. Así que me fui a dormir con la esperanza de encontrar a la mañana siguiente al “ganador” o “ganadora”.
Cuando desperté, esto fue lo primero que vino a mi mente: “Ella tomó mis problemas como si fuesen de ella, lloró conmigo, caminó conmigo, lidió con mucha gente local por mí, me defendió como si fuera algo grande de ella, qué no hizo por mi”. El amor nos salva, nos rescata, nos hace mejor personas, nunca nos hunde ni nos abandona.
Por eso, declaro a “Muy anónimo”, ganador de este primer concurso. Aunque a estas alturas, creo que todos ganamos, quienes abrieron sus corazones, quienes analizaron la situación, quienes leyeron. Absolutamente todos ganamos. Qué pena que no tenga más estampillas, porque todos ustedes se las merecen y lo digo de corazón.
Así que “Muy anónimo”, si quieres las estampillas por interno mándame tus datos (nombre y dirección de correo postal). Tienes 1 (una) semana para revelar tu identidad al capitán de esta nave. Caso contrario, se las daré al segundo lugar y así sucesivamente hasta que las estampillas partan felices de mis manos a un lugar donde también se aloje el amor.