Mi padre es Li Gang
En China donde las sentencias son tan severas que hasta 68 delitos califican para la pena de muerte, Li Qiming acaba de ser condenado a seis años de cárcel por manejar ebrio, matar a una estudiante y herir a otra, abandonar a sus víctimas, amenazar a los testigos y desafiar a los guardias de seguridad que intentaron arrestarlo.
Esta es la segunda parte de “Mi padre es Li Gang”, un caso que ha remecido a la sociedad china porque entre otras cosas, pone en evidencia los privilegios del hijo de un funcionario.
Puedes leer la primera parte AQUI.
El domingo pasado hemos publicado en el diario la segunda y última parte de este expediente. Puedes ver el texto AQUI en nuestro nuevo suplemento “i” (Internacional) de la Edición Impresa.
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“¿Saben ustedes quien es mi padre? Denúncienme si se atreven. Mi padre es Li Gang”, gritó el joven de 23 años a bordo de su Wolswagen sedan. Su progenitor es el subjefe de la policía en la provincia de Hebei, sede de la Universidad de Hebei donde sucedió el accidente.
Un caso que sin la campaña de denuncia que emprendieron los internautas en la red local, no habría trascendido. El victimario Li Qiming es hijo de un funcionario del gobierno, la clase privilegiada en China, mientras que la víctima Chen Xiaofeng era hija de un campesino pobre, el grupo menos favorecido del crecimiento económico chino. La otra estudiante, Zhang Jinqing, ya dejó el hospital.
Inicialmente, las autoridades intentaron bloquear los reportes sobre el caso “Mi padre es Li Gang” en la red y en los medios estatales. Pero ni el gigantesco aparato censor chino pudo contener la avalancha de mensajes que inundaron el ciberespacio de 470 millones de usuarios demandando justicia. Quedó en evidencia el profundo resentimiento que existe entre la gente común hacia la poderosa elite china.
Para calmar a la opinión pública, Li Qiming y a su padre Li Gang aparecieron en la televisión estatal, visiblemente abatidos y pidiendo perdón. Llorando, el alto funcionario prometió que no protegería a su hijo. Nueve días después del accidente, Li Qiming fue arrestado y al cabo de tres meses, sentenciado.
En un intento por demostrar que protegen los derechos de los más pobres, las autoridades cambiaron de actitud y difundieron el caso. El juicio fue cubierto por la prensa estatal aunque no se permitió el ingreso de periodistas extranjeros a la Corte Popular de Wangdu, rodeada de fuerte resguardo policial. La agencia estatal de noticias Xinhua dio a conocer el veredicto.
Li Qiming de 23 años de edad, compareció por primera vez ante el tribunal la semana pasada, tres meses después del accidente. Se declaró culpable de haber conducido en estado de ebriedad y haber cometido un homicidio vehicular involuntario, según un comunicado de la sala publicado por Xinhua.
Los Li indemnizaron a las familias de las víctimas. Los padres de la fallecida Chen Xiaofeng recibieron casi 70.000 dólares y los de Zhang Jinqing, 14.000 dólares. De acuerdo con los abogados de estas familias, Li Gang les pidió que se abstengan de solicitar una condena mayor para su hijo y de hablar con los medios.
Pero la pena ha sido muy indulgente. Li Qiming fue sentenciado por el delito de “muerte accidental por infracción de tránsito” que se sanciona con tres a siete años como máximo de prisión. En casos anteriores, los acusados han sido condenados por el delito de “amenaza a la seguridad pública” que conlleva castigos más drásticos, incluyendo la pena capital.
La Corte de Wangdu explicó en su informe que Li Qiming “no ha tenido la intención de causar la muerte en el accidente de tránsito, por lo cual sería inapropiado condenarlo por el delito de amenaza a la seguridad pública”. Según el dictamen, es merecedor de una sentencia leve porque “confesó todos sus delitos y su familia compensó económicamente a los familiares de las víctimas”.
“El veredicto no ha sido justo”, declaró Zhang Kai, el primer abogado de los Chen hasta que esta familiar recibió la compensación de Li Gang y lo despidió. Aunque Zhang reconoció que si este caso no hubiese recibido la atención pública, Li Qiming nunca habría ido a juicio. Es hijo de un funcionario.
Posdata: En esta nueva temporada de Planeta China colgaré aquí los artículos publicados originalmente en la edición impresa. En ocasiones las notas que aparecen en el diario son más cortas debido a la dictadura del espacio. Sin embargo, en el blog las encontrarás completas y sin editar. Varios lectores, especialmente los que viven fuera del Perú y no pueden adquirir la edición impresa, me han dicho que tienen problemas para ubicar los textos sobre China en la web. Con esta iniciativa espero poder ayudarlos.