Sudamericana: ¿hay motivos para tener fe?

Pensar en que la suerte cambiará en la Sudamericana es un acto de fe. No hay sustento futbolístico para avalar un cambio radical en relación a lo mostrado hasta la fecha. Universitario llega a su debut ante el Anzoátegui con la esperanza convertida en una moneda al aire: ¿amanecerá afilado Morel?, ¿jugará menos presionado Vitti? ¿encontrará la llave del gol Fano? Mañana (jueves), a partir de las 8:45 p.m., lo sabremos.
Con este triunfo, Anzoátegui eliminó al Deportivo Quito y clasificó para jugar con los cremas.

En su último partido por el torneo venezolano, Deportivo Anzoátegui cayó en casa 0-1 con el ACCD Mineros que logró el triunfo pese a terminar el juego con diez hombres. La DANZ marcha octavo en la tabla de posiciones con seis puntos, a cuatro del puntero Deportivo Lara, con dos partidos ganados y otro par perdido. ¿Es suficiente para pensar que la crema llega como favorito? De ninguna manera.
Como ha dicho Sergio Markarián, pese al brillante tercer puesto en la Copa América y la remontada en el ránking de la FIFA, el Perú continúa en la cola de Sudamérica. Las recientes eliminaciones de Vallejo y Aurich así lo confirman. Ningún equipo nacional puede darse el lujo de mirar con desdén al rival que tenga enfrente. Universitario mucho menos.
La última presentación en Huancayo fue un homenaje al aburrimiento y la incapacidad. Pensé, ingenuamente, que la devolución de los puntos perdidos en mesa con Unión Comercio le devolvería al plantel el ánimo extraviado entre tantos líos. Pero fui, insisto, un ingenuo. Olvidé que la voluntad no obra milagros, que la incapacidad no se resuelve con una palmadita en el hombro. Obvié, además, un factor crucial: los errores de Chemo.
La formación mixta presentada ante el once de Mosquera tenía cierta justificación ante la cercanía del partido por la Sudamericana. Pero insistir en un jugador apático y sin mayor vuelo como Ísmodes es un asunto inexplicable. Y apostar por aguantar en campo propio, cuando pudo haberse optado por jugar en campo ajeno o lo más lejos posible del arco de Llontop, fue como entregarle la llave del arco a los delanteros contrarios. En el primer tiempo la ‘U’ no pateó a la valla de Rivera una sola vez y en el segundo aumentó su volumen ofensivo solo cuando se vio en desventaja. Mientras tanto, Llontop se convertía en figura, sacando pelotas con acrobacias propias de los alumnos de la academia de Vania Masías.
Prefiero no hacerme muchas esperanzas en la Sudamericana. Seguiré los partidos con la ansiedad y la fe propios de todo hincha, tratando de ocultar lo que el cerebro me grita cada fin de semana: que nos cuesta un mundo hacer una pared, que patear de lejos no está en el manual del volante crema o que hacer un gol es más difícil que ver a Pacheco y Álvarez abrazados otra vez.
¡Ah! Y mientras acá tratamos de discutir de fútbol, la directiva se incendia entre acusaciones de corrupción, traiciones y otras lindezas. Así está la ‘U’.

Si quieren más información sobre el Anzoátegui, aquí les dejo algunos links:

http://www.deportivoanzoategui.com.ve/

http://www.facebook.com/DeportivoAnzoategui#!/DeportivoAnzoategui?sk=info

http://www.federacionvenezolanadefutbol.org

http://www.balonazos.com

Esta es su cuenta de twitter @Dvo_Anzoategui

Mis cuentas son @tcrema y @orbisa35

Espero sus comentarios. Un abrazo para todos.