¿Quién debe suceder a Chemo?
Se fue sin exigir la millonada con que sus detractores se llenaban la boca. José del Solar no es más técnico del club y toca pasar la página, pensar en lo que viene. Quien lo sustituya tendrá que cargar una mochila muy pesada para lo que necesita conocimientos y rodaje. Manejar un grupo en emergencia, sin posibilidad de refuerzos hasta en al menos dos meses, requiere una alta dosis de ingenio y de saber administrar -y potenciar – lo poco que tendrá a mano.
Admiro a Ñol Solano como jugador y nunca olvidaré su aporte fundamental en el título del 2009. Sin embargo, su presente como entrenador me genera dudas. Como ha dicho Rafael Rizo Patrón, presidente de la comisión consultiva del club, la situación en que se encuentra Universitario no está para debutantes. Desde mi punto de vista, contratar a Solano en estos momentos sería lo mismo que lanzar una moneda en el aire. Al menos dos diarios, Depor y Líbero, dan como un hecho su contratación. No lo descarto para el futuro, pero en este momento sería un riesgo innecesario.
Rizo Patrón quiso ofrecerle el equipo a Juan Carlos Oblitas quien, curiosamente, debutó como técnico con la ‘U’ en 1987, año en que se consagró por primera vez campeón nacional. Antes que le hiciera una propuesta formal, el ‘Ciego’ le dijo no, pese a que tiene previsto volver a dirigir (en principio sus miras están en el exterior, aunque no descarta en un futuro próximo volver a hacerlo en el país).
¿Era Oblitas el técnico ideal para la ‘U’? No lo creo. Si bien su principal virtud es formar grupos sólidos, que matan por una idea -un aspecto importante en estos momentos-, sus equipos necesitan tiempo para madurar. Por lo demás, al margen del cariño que estoy seguro le tiene a Universitario, difícilmente iba a poner en riesgo su prestigio en un club con tantos problemas.
He escuchado -y leído- los nombres de otros candidatos. Algunos francamente suenan disparatados y, quiero creer, responden más a los deseos de ciertos periodistas o a mala información brindada por algunos empresarios.
Antes que dar un nombre, los encargados de elegir al técnico deben responderse una pregunta: ¿qué queremos para la ‘U’? A partir de la respuesta que genere consenso deben empezar la búsqueda del sucesor de Chemo. Si lo que se quiere es solo salvar la baja, pues habrá que buscar un técnico que responda a esa necesidad (un ‘Caruso’ Lombardi). Si el objetivo es salvar la baja e iniciar un trabajo de largo plazo, en el que se dé cabida a jóvenes con el fin de potenciarlos, el perfil del técnico es otro.
Cualquiera sea la elección, el responsable deberá tener claro que mucha plata no va a ganar, los refuerzos -que no serán de primer nivel- llegarán recién en agosto y que a la ausencia de Polo, se podría sumar la de Flores. ¿Cuál será su mayor ganancia? La gloria y el aprecio eterno de la hinchada más importante del país.
Las cartas están lanzadas. Es hora de elegir bien.
¿Y para ustedes, quién debería hacerse cargo del equipo?
Espero sus comentarios. Un abrazo para todos.