El twitter que se volvió serie
Cuando Justin Halpern terminó con su novia y perdió su trabajo tuvo que ir a vivir con su padre. De esa experiencia se le ocurrió crear un blog y una cuenta de Twitter para contar las anécdotas de la forzada convivencia. El resultado fue abrumador: hoy día esa cuenta tiene casi 2 millones de seguidores, Halpern ha escrito un libro que se encuentra entre los más vendidos en Estados Unidos y una serie de televisión se basa en su historia. ¿Cómo ocurrió esto?
Shit my dad says, título original de la cuenta del Twitter y de la serie, y narra cómo un hijo ya adulto busca el reconocimiento de su padre y cómo un padre descubre que su hijo puede enseñarle algunas lecciones sobre la vida. En la serie, el papá es interpretado por William Shatner, tiene 72 años y ha vivido de todo debido a que es un médico del ejército retirado, tiene tres ex esposas y pasa mucho tiempo en su jardín. Es malhumorado, es vehemente y mantiene una personalidad arrolladora que contrasta con la de su hijo, más bien racional y tranquilo.
El éxito de esta serie, que empezará a verse en nuestro país a través de Warner Channel, radica en que se basa en una de las nuevas tecnologías de comunicación y que logró la aprobación del público mucho antes de estar en la pantalla chica. Los millones de seguidores ya estaban allí, el público no necesitaba ser conquistado porque simplemente ya estaba esperando saber más de la historia. Se trata de la primera vez en que la televisión se alimenta de una red social para crear un producto.
Shit my dad says es divertida, apela a las situaciones cómicas diarias de dos personajes completamente diferentes. Pero se puede ver con el pasar de los capítulos que ambos protagonistas tienen mayor profundidad y evolucionan a medida que ambos se unen cada vez más. Una de las cosas que la hacen única es que es la primera serie de televisión que incluye una lisura en su nombre original.
En el fondo, es una serie que habla de cómo un padre de 72 años necesita a su hijo y cómo un hijo adulto necesita de su padre, aunque todo esto se logre entre risas. La audiencia ha acompañado muy bien a esta serie durante su primera temporada en Estados Unidos, ahora veremos cómo le va en Latinoamérica.