Dejamos atrás –al fin– el 2023, un año de muchas idas y venidas, y bastante lento para el ámbito económico. De hecho, nadie vio venir un año tan complicado, y más de un economista ha comentado públicamente “nos equivocamos”, refiriéndose a las proyecciones de crecimiento del 2023.
Además del PBI y la inversión privada, hay dos indicadores –entre otros tantos –que reflejan lo duro que fue el año pasado. El primero, los ingresos del Estado. El ministro de Economía, Alex Contreras, dijo el último jueves que hemos enfrentado la peor caída de ingresos desde finales de los noventa, dejando de lado la pandemia. Y el segundo, el sector agropecuario, que tuvo su peor desempeño en los últimos 30 años durante el 2023.
Sin ánimos de hacer una lista de nuestros pesares, aprovecho el inicio del 2024, que trae (algo de) esperanza, para recordar algunos temas económicos urgentes que deberemos retomar en las próximas semanas y meses. Está, por ejemplo, el debate de la reforma del sistema de pensiones que deberá retomarse en la Comisión de Economía cuando se inicie la legislatura. También, es necesario dejar los mensajes equívocos y esquivos para la inversión privada para cambiar la tendencia de las expectativas a 3 meses, que llevan mucho tiempo ya en terreno negativo. Y, el debate del proyecto que presente el Ejecutivo al Congreso para simplificar los regímenes tributarios.
El 2024 debería ser un año de recuperación y desde donde estemos parados, ejercer nuestra ciudadanía es un deber en aras de recuperar aunque sea algo de lo que hemos perdido, siendo la institucionalidad de las cosas más delicadas y complicadas de reconstruir.
Nuevo año, nueva sección
En esta edición, la primera de Dia1 de este año, les presentamos el “Ping Pong con...”, una nueva sección con la que arrancamos nuestras celebraciones por los 20 años de este Suplemento y los 185 años de El Comercio. ¡Feliz año nuevo para todos!