Siguen los escándalos por las celebraciones clandestinas en la sede oficial del gobierno británico. En esta especie de fiesta interminable que se revela por cuenta gotas, el diario The Telegraph reveló otras dos reuniones sociales durante tiempos de restricciones contra el COVID-19.
Ahora las denuncias apuntan a dos fiestas de despedida que habrían tenido lugar nada menos que la noche anterior al funeral del príncipe Felipe, en abril pasado, un evento que contó con un número limitado de invitados y donde rigió un estricto distanciamiento social por la pandemia de coronavirus.
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El personal de Downing Street bebió alcohol hasta la madrugada en esos dos eventos, de acuerdo con el informe. Ese viernes 16 de abril de 2021, Gran Bretaña esta en un período de luto oficial. Las banderas en los edificios públicos estaban a media asta para marcar la muerte del marido de la reina Isabel II, la semana anterior.
En una capilla privada en el Castillo de Windsor, recuerda el diario londinense, el ataúd del príncipe yacía durante la noche. Al día siguiente la reina, con el rostro cubierto por un mascarilla negra, se despediría de su compañero de 73 años. Y se sentó sola por las reglas de distanciamiento.
“Sin embargo, el ambiente en Downing Street ese viernes por la noche era bastante diferente. Asesores y funcionarios públicos se reunieron después del trabajo en dos eventos separados para marcar la partida de dos colegas”, dice la investigación de The Telegraph.
Uno era James Slack, director de comunicaciones de Johnson. El otro era uno de los fotógrafos personales de Johnson. Según revelaron testigos presentes en los eventos, hubo alcohol en exceso y bailes durante largas horas.
Se trata de la revelación más reciente de la aparente laxitud que regía en la sede del gobierno del primer ministro Boris Johnson, a contramano de las rígidas imposiciones a la vida social que debían cumplir el resto de los ciudadanos británicos.
Según las recomendaciones del gobierno, no se podía socializar en el interior “excepto con su hogar o burbuja de apoyo”, y se podía reunir al aire libre, incluso en jardines, pero “en grupos de seis personas o dos hogares”.
Los testigos relataron a The Telegraph que las dos reuniones se llevaron a cabo primero en diferentes partes del complejo, antes de unirse a medida que avanzaba la noche. En total fueron unas 30 personas las que asistieron a las dos reuniones combinadas.
La cadena de televisión ITV reveló esta semana otra reunión clandestina, donde se había invitado a un centenar de personas también a la sede del gobierno, en un evento que se realizaría con “distancia social”, el 20 de mayo de 2020. Finalmente fueron unos 40 los invitados que concurrieron.
Y antes también se había revelado que el 18 de diciembre de 2020, todavía bajo confinamiento estricto, se celebró una fiesta a la que asistieron “decenas” de personas.
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