La alarma sanitaria global se enciende ante un preocupante resurgimiento del . Mientras América reporta un incremento exponencial de casos y Europa alcanza cifras no vistas en décadas, Estados Unidos, que había declarado la enfermedad erradicada en el año 2000, también experimenta un aumento significativo. ¿Qué factores están detrás de esta alerta mundial y cuál es la situación actual en territorio estadounidense? A continuación, te contamos todos los detalles.

¿QUÉ SE SABE SOBRE LA ALERTA MUNDIAL POR POSIBLE RESURGIMIENTO DEL SARAMPIÓN?

La Organización Mundial de la Salud ha emitido una alerta específica para América del Norte y del Sur debido al alto riesgo de propagación de sarampión. Canadá ha reportado un total de 1,177 casos hasta el 19 de abril de 2025, una cifra significativamente mayor a los 12 casos que tuvo el país en todo el 2023. México también enfrenta un brote con 421 casos confirmados y 384 bajo investigación. En Sudamérica, aunque con números menores, se han detectado los primeros dos casos en Belice desde 1991, cinco en Brasil y 21 en Argentina.

La situación en Europa es igualmente grave, donde el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades informó de 35,212 casos en 2024, lo que representa su pico más alto en 25 años.

(Foto: Freepik)
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¿QUÉ SE SABE SOBRE EL AUMENTO DE CASOS DE SARAMPIÓN EN ESTADOS UNIDOS?

Estados Unidos está experimentando un notable incremento en los casos de sarampión en 2025. Hasta el 2 de mayo, las autoridades de salud habían confirmado 935 casos distribuidos en 30 estados, lo que representa un aumento considerable en comparación con los 285 casos reportados durante todo el año 2024.

Este aumento contrasta con los niveles históricamente bajos de la enfermedad en el país, donde se registraron menos de 100 casos anuales entre 2000 y 2010, y brotes aislados de aproximadamente 200 a 300 casos por año desde entonces, con la excepción de un brote mayor de 1,274 casos en 2019.

La mayoría de los casos actuales en EE. UU. se concentran en Texas, que hasta el 6 de mayo contabilizaba 702 contagios, resultando en 91 hospitalizaciones y tres lamentables fallecimientos, incluyendo dos niños. Este brote en Texas es uno de los doce focos activos de sarampión documentados en el país en lo que va de 2025.

La fiebre y la erupción cutánea son los primeros síntomas del sarampión. (Foto: Bilanol /iStock)
La fiebre y la erupción cutánea son los primeros síntomas del sarampión. (Foto: Bilanol /iStock)

¿CÓMO LLEGÓ A ELIMINAR ESTADOS UNIDOS EL SARAMPIÓN EN EL AÑO 2000?

Estados Unidos logró la erradicación del sarampión gracias a una estrategia sostenida de vacunación masiva. Inicialmente, tras convertirse en una enfermedad de notificación obligatoria en 1912, el país enfrentaba entre 3 y 4 millones de casos anuales y alrededor de 6,000 muertes, a pesar de la mejora en la atención médica. El punto de inflexión llegó en 1963 con la introducción generalizada de la primera vacuna contra el sarampión, seguida en 1971 por la vacuna triple vírica (MMR).

Un esfuerzo gubernamental clave fue la Iniciativa Nacional de Inmunización Infantil de 1977, que buscaba asegurar la vacunación de los niños en edad escolar contra diversas enfermedades, incluyendo el sarampión, logrando tasas de vacunación del 96% en niños que comenzaban la primaria para 1981. Posteriormente, en 1993, el programa Vacunas para Niños facilitó el acceso universal a la inmunización.

Estos programas de vacunación resultaron tan exitosos que para el año 2000, los casos autóctonos de sarampión se redujeron a cero, limitándose las infecciones a viajeros, lo que llevó a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades a declarar la erradicación de la enfermedad en el país.

La única forma de prevenir la sarampión es vacunándose (Foto: Freepik)
La única forma de prevenir la sarampión es vacunándose (Foto: Freepik)

¿POR QUÉ ESTÁ SURGIENDO NUEVAMENTE EL SARAMPIÓN EN ESTADOS UNIDOS Y EN EL MUNDO?

El resurgimiento del sarampión tanto en Estados Unidos como a nivel mundial se atribuye principalmente a la disminución de las tasas de vacunación durante las últimas dos décadas, una tendencia que se intensificó durante la pandemia debido a las limitaciones en la atención médica.

A diferencia de las infecciones bacterianas, el sarampión, causado por un virus, no tiene un tratamiento específico, pero es altamente prevenible mediante la vacunación. La inmunización estimula la producción de anticuerpos protectores, y aunque una dosis suele ser efectiva, una segunda refuerza la protección a largo plazo.

Dada la alta contagiosidad del sarampión, que requiere una cobertura de vacunación del 95% para lograr la inmunidad de grupo y proteger a la comunidad, la caída en las tasas ha dejado a una porción significativa de la población vulnerable. Esta situación ha llevado a expertos en enfermedades infecciosas a temer que el sarampión, que había sido controlado e incluso erradicado en algunos lugares, esté regresando como una infección común.

La única forma de prevenir la sarampión es vacunándose (Foto: Freepik)
La única forma de prevenir la sarampión es vacunándose (Foto: Freepik)

¿QUÉ PUEDE PASAR SI LAS TASAS DE SARAMPIÓN SIGUEN EN AUMENTO Y QUÉ SE PUEDE HACER PARA PREVENIRLO?

Si la tendencia actual de aumento en los casos de sarampión persiste, Estados Unidos podría enfrentar la reemergencia de la enfermedad como endémica, similar al resfriado común o la COVID-19. En este contexto, estudios proyectan escenarios alarmantes: si las tasas de vacunación no mejoran, hasta 15 millones de niños estadounidenses podrían ser vulnerables en los próximos cinco años, y en un horizonte de 25 años, se podrían registrar entre 850,000 y 11 millones de casos si las tendencias actuales de vacunación se mantienen o disminuyen.

Para prevenir este futuro, es crucial un aumento constante en las tasas de vacunación comunitaria; un incremento del 5% podría limitar los casos futuros a entre 3,000 y 19,000 en 25 años. La intervención temprana en los brotes, con el apoyo de las autoridades de salud locales, también es vital, siempre y cuando la cobertura de vacunación alcance el 85%. Esto requiere garantizar el acceso equitativo y gratuito a las vacunas infantiles y trabajar en la restauración de la confianza pública en la vacunación contra el sarampión, según informa Forbes.

Un trabajador sanitario prepara una dosis de la vacuna contra el sarampión en un centro de salud de Lubbock, Texas, el 27 de febrero de 2025 (Foto: Ronaldo Schemidt / AFP)
Un trabajador sanitario prepara una dosis de la vacuna contra el sarampión en un centro de salud de Lubbock, Texas, el 27 de febrero de 2025 (Foto: Ronaldo Schemidt / AFP)