La riqueza de la naturaleza peruana conquistó nuevas fronteras en el mundo de la moda. Sioduhi, reconocido diseñador indígena oriundo de Brasil, explotó al máximo el gran potencial de la yuca peruana para crear moda sostenible. A través de una innovadora tecnología que desarrolló, trabajó con comunidades artesanas para crear tintes naturales a base de este tradicional tubérculo. En esta exclusiva entrevista, el joven diseñador reveló todos los detalles detrás de este creativo proyecto.
Sioduhi es un diseñador de moda e investigador originario de la comunidad indígena Piratapuyo, ubicada en el territorio Alto Rio Negro en Amazonas, Brasil. Siendo parte de las minorías brasileñas, el destacado diseñador recorrió un arduo camino para lograr establecer su propio estudio enfocado en incorporar el futurismo indígena en la moda. Esta pasión llevó a Sioduhi a tierras peruanas, donde encontró una innovador forma de aprovechar uno de los tubérculos más antiguos en el Perú, la yuca.
—¿Cómo descubriste el potencial de la yuca peruana para crear tintes naturales?
El insight para usar la cáscara de yuca vino de la observación de los magníficos tonos de la yuca peruana que pude apreciar en los mercados cusqueños, especialmente el de Izcuchaca, Anta, adonde llego siempre que voy de vacaciones. A partir de esa observación, al volver a Brasil he realizado muchos experimentos y comencé a utilizar la cáscara de yuca de la Amazonia para desarrollar mis colecciones.
—Lograste crear estas increíbles piezas con tintes naturales a través de un proyecto innovador, ManioColor. ¿En qué consiste esta tecnología?
La tecnología consiste en utilizar la cáscara de yuca que es descartada en las plantaciones de la amazonía brasileña. El tinte de yuca, producido de tubérculos orgánicos, no manipulados ni transgénicos, se elabora de las cáscaras de la yuca que son hervidas y filtradas para producir un concentrado que se aplica en una paleta de cinco colores en prendas de fibras naturales como el algodón, lino, tocuyo y viscosa certificada, satinada.
—¿Cómo fue el proceso de experimentación con la yuca peruana?
El proceso tuvo un gran éxito gracias al alto poder de fijación del tinte y la belleza de los tonos obtenidos. El proceso de conversión de la raíz toma un tiempo de hasta 3 horas dependiendo de la cantidad que se obtiene posterior al recojo de la merma, es decir del residuo, de la cáscara de yuca.
—¿En qué tipo de piezas utilizaste estos tintes a base de yuca?
Actualmente utilizo el tinte en mis propias creaciones como vestidos, ponchos, sombreros, pantalones, camisas, polos y otros.
—Conectaste mucho y te llevaste un buen recuerdo de los artesanos peruanos. ¿Cómo fue trabajar con la comunidad de mujeres campesinas cusqueñas?
Tengo enorme admiración por las creaciones peruanas y el trabajo milenario con el teñido de prendas realizado en la comunidad del Distrito de Chinchero, Cusco. Hasta el momento mis experimentos han sido de manera particular, individual mientras me encontraba de vacaciones en Cusco con los insumos obtenidos gracias a las mujeres campesinas de Izcuchaca, Anta. Estoy muy interesado en desarrollar posibles colaboraciones con artesanos peruanos utilizando la tecnología ManioColor y creando piezas, tal y como vengo trabajando con artesanas indígenas de la Amazonía Brasileña.
—Eres un diseñador joven enfocado en reconectar con la herencia de tus ancestros indígenas amazónicos, ¿de dónde viene esta pasión?
El futurismo indígena es el centro de esta pasión, de pensar en el tiempo en espiral, de abordar la dinámica de nuestras identidades, culturas, tecnologías, es así que estas continúan siendo creadas, generadas y atesoradas, puestas en valor. Actualmente existe un enorme desafío para mí, con la neocolonización y a partir del desinterés de muchos jóvenes indígenas en la transmisión oral de nuestra cultura. Este desafío consiste en que dentro de mis posibilidades, debo y quiero crear signos que tengan sentido, significado para nuestras culturas, ya sea por medio de la estética o de la producción audiovisual. Nuestra autoestima nunca fue tan necesaria como hoy en día, debemos retomarla de nuestros conocimientos y calidad de vida, no sólo como indígenas sino de cara al mundo, para el mundo.
—Perteneces a la minoría indígena y LGTBQ + de Brasil, ¿cómo fue abrirte paso en el mundo de la moda como diseñador?
Todo un desafío en un país y un continente que opaca, oprime, y apaga a los pueblos indígenas y a la población LGBTQ+. En Brasil hoy en día estamos avanzando de a pocos en la lucha, acabamos de lograr el Ministerio de Pueblos Indígenas. La moda va más allá de la investigación y las colecciones de ropa, también es un asunto político puesto que refleja la lucha por nuestra autonomía y nuestros derechos.
—Liderar una marca de moda sostenible va de la mano de un fuerte compromiso personal con el medio ambiente. ¿Cómo es tu relación con la naturaleza y el activismo ambiental?
La moda desde su concepción está ligada al consumismo, a la “glamourización” y al cambio constante. Desde la creación y fundación de mi marca vengo reflexionando sobre el impacto de la industria de la moda en las vidas de los seres humanos y los seres vivos. Mi relación con ambas temáticas: seres vivos y seres humanos, es de una visión de importancia en ver más allá de la naturaleza, principalmente en aquellas personas que permiten, hacen posible que esta naturaleza permanezca y se mantenga viva. Pienso mucho en los impactos positivos de estas cadenas milenarias.
—¿Por qué es importante la investigación y el uso de recursos (como la yuca) y tintes naturales en el mundo de la moda?
La industria de la moda es una de las que más hace consumo del recurso agua, así como la que contamina más los cuerpos, reservorios, depósitos de agua, principalmente cuando hablamos de teñido sintético, artificial. Por otro lado, es importante recordar que no todo recurso natural puede y va a ser sostenible, sustentable. Por ejemplo, uno de la historia de mi país, el árbol que lleva y da nombre a mi país, palo Brasil, hoy en día está prácticamente extinto, ha sido sobreexplotado con un uso exhaustivo para fines textiles. Entonces necesitamos pensar hacia innovaciones e investigaciones de materiales provenientes de residuos, mermas que puedan ser reinsertados en la cadena productiva y regresen a la naturaleza sin agredirla, atacarla o extinguirla.
—Hablemos sobre tus colecciones. ¿De qué tratan Manioqueen y Amõ Numiã?
Las dos colecciones fueron obtenidas, creadas a partir del teñido con la tecnología ManioColor. La colección ManioQueen (“Manioca” mandioca/yuca + “Queen” Reina) fue inspirada en las piedras y rocas de mi territorio natal, Rio Negro en Amazonas. La colección refleja las manualidades milenarias de procesamiento de la mandioca/yuca, como se obtiene esa soberanía de poder autoalimentar a los pueblos indígenas con esta raíz. Asimismo proyecta la fuerza, espiritualidad, y el buen vivir. Esta colección es teñida con la tecnologia Maniocolor, con el tinte à base de la cascara de mandioca/yuca oriunda del Sistema Agrícola Tradicional do Rio Negro (SAT-RN), patrimonio imaterial.
Sobre la colección Amõ Numiã: Ayer, Hoy y Mañana, representa las transformaciones hechas por ellas, las “Amõ Numiã”, las primeras mujeres, hijas de Ʉmʉkoho Mahsʉ (Creador del Universo). En la transmisión oral de los pueblos indígenas de Alto Rio Negro, las mujeres que dominaban las miriã pʉ (flautas de juruparí), fundaron un matriarcado y lideraron el manejo del território y del universo por un período primordial de la historia. En este proyecto, Sioduhi Studio, une fuerzas y suma con las tecnologías manuales milenarias de las mujeres de Alto Rio Negro y las habilidades creativas de las mujeres de Manaus en el Amazonas y de Cotijuba para cocrear un momento de celebración a la mujer, la femeneidad, y memoria de las “Amõ Numiã” que representan el pasado, el presente y el futuro.
—¿Cuáles son los lugares que más frecuentas cuando vienes a Perú para desarrollar tus proyectos?
Actualmente permanezco más en Cusco, y visito las provincias y distritos más cercanos, alrededor de la ciudad, de la zona. Desde hace 3 años, el Perú es mi lugar de renovación, descanso e inspiración. Por ser indígena de la Amazonia, me identifico mucho con la belleza y resistencia del pueblo cusqueño.
—Cuéntanos sobre el proyecto inmersivo que buscas desarrollar en Chincheros, Perú...
Pienso compartir la tecnología ManioColor, en la aplicación en diferentes fibras naturales locales. Asimismo, quiero incluir la tecnología en el desarrollo de nuevos productos para la moda con las tecnologías manuales artesanales ya existentes en la región. Todo siempre relacionado y referido al futurismo indígena.
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