Escucha el disco completo: Riot - Immortal Soul - Steamhammer Records - 2011
Una de las más grandes expresiones del metal, injustamente relegada ante la arremetida de los “grandes”. Riot ha editado uno de esos gigantes y ultraortodoxos discos de heavy metal que al final constituyen nuestra línea de alimentación principal y nuestro vínculo con la tradición que forma nuestra identidad.
Épico a la vez que veloz, Immortal Soul, último álbum de Riot, ha caído como un gran ramalazo de corriente eléctrica en la escena heavy de este año. Se formaron en 1975 y su primer disco, Rock City, es del 77, y ya llevan 14 discos a cuestas, cada uno es una completa verdad metálica. Su perido de mayor apogeo en popularidad fue a comienzos de los 80 y sobre todo entre los seguidores del metal de la NWOBHM. Riot fue la banda estadounidense que más afinidad estilísitca desarrolló con esa movida y se acopló bien al éxito que alcanzó. No me interesa mentir sobre lo que sé, así que confieso no haber escuchado todos los dicos de ellos, pero los que he escuchado ninguno me ha dejado indifirente. Destaco sobre todo Narita, Fire Down Under, Thundersteel (mi favorito) y The Brethren of the Long House. El alma del grupo y único integrante de la primera alineación es el guitarrista Mark Reale. La actual alineación cuenta con el aporte de Tony Moore vocalista de varios clásicos ochenteros y que también ha estado cantando en los discos de la última década.
La propuesta de Riot siempre fue la de un speed/power metal altamente energético, y en esa línea se mueve este disco. Qué decir de la influencia que han tenido en su país sobre generaciones posteriores. De hecho, la U.S Power metal integrada por Helstar, Sanctuary, Obsession, Savage Grace, Lizzy Borden, Armored Saint, y un enorme etcétera les deben muchísimo o casi todo. En la actualidad, su legado es claramente expresado en el trabajo de Twisted Tower Dire y Cage, entre otros.
Lo que más me ha gustado del actual disco es su equilibrio entre las principales tendencias que le componen. Hay heavy metal clásico, por supuesto, speed metal, power de estilo europeo y aires hard rock ochenteros, además, por ratos, rasgueos de metal contemporáneo (pero solo poquito). El tema Riot abre con una intro melódica con suaves aires medievales para luego ser rota por una guitarra que nos introduce en el puro speed metal. La voz asalta con la claridad que Tony Moore sabe imprimir, una claridad que está completamente recuperada. Los punteos nos remiten a las mejores épocas de los ochentas entre las bandas que ignoraron todo lo que fue el punk y que se mantuvieron en la línea dura. El tema es speed metal completo. Still Your Man sigue por el sendero trazado por el primer corte, es speedica aunque con mayor protagonismo de la percusión, en la que encontramos a Bobby Jarzombek a quien conocemos más por su reciente participación en Halford. El tema sin embargo tiene la voz enfilada en una línea más melódica y no tan veloz. Crawling baja la velocidad y entra en los medios tiempos matadores, de esos que inundaron al metal desde mediados de la década de los ochenta. El tema permite el completo lucimiento de la voz, que se hace coros a sí misma. El speed regresa con Wings are for Angels pero se le nota una huella más power europeo al estilo de Iron Savior. El tema da mucha energía, aunque el estribillo no me gusta mucho.
Fall Before Me vuelve al medio tiempo y se engarza con sonidos metálicos contemporáneos que a la vez se aunan a una voz en completa clave hard rock. Extraña mezcla que les ha funcionado. Sins of the Father es un clásico tema de heavy metal con raíces en lo hecho por Judas Priest, sin embargo la voz no estalla a ese nivel sino que se mantiene contenida. Majestica es como dice su título majestuosa pero no es más que un puente melódico a la siguiente parte del disco. Immortal Sou,l que le da el nombre al disco, es un tema reflexivo sobre la condición del hombre que trata de mantener una línea metalera épica pero no veloz, solo intensa, parece un poco Masterplan. El tema es bueno y gana con las sucesivas escuchas. Insanity retoma algo de la velocidad del inico del disco y es, creo, uno de los más claros ejemplos de lo más típico de Riot, recordemos que el speed metal de comienzos de los 80 no era tan speed si lo comparamos con lo que se hizo despues. Whiskey Man tiene un excelente comienzo guitarrero que anuncia uno de los grandes temas del disco, aunque al final no se apuntan a lo más veloz, sino a lo rockero. Believe tiene otra de esas entradas con punteo de guitarra que enganchan y el desarrollo posterior del tema es más fuerte, es una canción bastante melódica. El disco acaba con Echoes que tiene una intro más orquestal y que desemboca en un tema de heavy metal clásico que se acerca de nuevo a las velolcidades del inicio del disco con una voz de More realmente espectacular alcanzando los agudos que esperamos en esta clase de metal.
Actualizado el 18 de noviembre del 2011:
A continuación se puede oír el disco completo