1 / 7 Reemplaza la escalera por un tobogán para que los niños se deslicen de un piso a otro de la casa. Otra opción es usar una resbaladera desmontable. (Foto: Hey Cheese)
2 / 7 Cubre una pared secundaria del área social con pintura pizarra y enmárcala con listones de madera previamente pulidos con lija de grano N° 60, para que no tengan astillas. (Foto: Int 2)
3 / 7 La mesa de comedor también puede ser una zona para disfrutar con los niños. Cuelga sus trabajos con tiras de yute y ganchos de madera para ropa. (Project Nursery)
4 / 7 En este dormitorio las camas de los niños se han dispuesto en módulos de tono azul intenso que simulan ser madrigueras de ratón. (Foto: Onion Design)
5 / 7 Esta zona de juegos tiene 1,20 m de ancho y varios niveles para que los niños escalen. También posee escaleras colgantes y mallas de seguridad que funcionan como hamacas. (Foto: Ruetemple)
6 / 7 En un rincón de la sala de 2 m x 2 m, diseña un espacio para pintar. Coloca una mesa circular de 1 m de diámetro y un caballete de madera de 1,20 m de alto. (Foto: Taka Tomo)
7 / 7 La zona de juego está enmarcada por su tono amarillo. En este lugar coloca viniles de sus personajes favoritos o crea figuras geométricas con esténciles. (Foto: Yodezeen)
Los espacios de entretenimiento, donde adultos y niños puedan compartir sin salir de casa, son la alternativa perfecta para divertirse y pasar el tiempo libre. Es posible crear estas zonas aprovechando los espacios vacíos de las áreas sociales.
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Utiliza un rincón de la sala o el comedor, de al menos 2 m x 2 m, para crear un espacio dedicado al arte. Coloca una mesa de trabajo de 60 cm de altura y de 1 m de diámetro, y un caballete de madera natural y de altura regulable, para colocar los lienzos a la hora de pintar con los niños. Asimismo, incluye un organizador de plástico con ruedas para colocar los pinceles y las témperas, y como mobiliario dispón pequeñas almohadas.
Y si la cocina está abierta al área social, la mesa de comedor puede servir como espacio para dibujar o pintar, y compartir con los niños al momento de cocinar. Puedes añadir una cuota divertida al lugar, instalando un cordel de yute para colgar sus trabajos con ganchos de madera. Además, emplea pintura pizarra negra como acabado para alguna pared secundaria de la sala o la cocina, para que los niños puedan intervenirla en cualquier momento del día.