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/ SergeyTikhomirov
Víctor Fuentes Campos

La venta de vehículos nuevos en el Perú ha experimentado un cambio drástico en la última década. Aunque las ventas anuales se han mantenido relativamente estables entre 150 mil y 160 mil unidades, la composición de las categorías ha cambiado significativamente. Las camionetas (incluyendo las SUV y ‘pick-ups’) casi han duplicado su participación en la venta de nuevas unidades, pasando de 47% en 2015 a 82% en 2024, mientras que los automóviles han visto su cuota reducida de 53% a 18%. Este fenómeno global responde, principalmente, a una mayor oferta y precios más competitivos.

En los últimos 10 años, el número de camionetas nuevas vendidas en el país aumentó 67%, de 75 mil en 2015 a 124 mil en 2024. Las camionetas SUV lideran este crecimiento, duplicando sus ventas: de 37 mil unidades en 2015 a 74 mil en 2024. Hoy en día, uno de cada dos vehículos nuevos adquiridos en el Perú es una SUV, consolidándose como la categoría preferida de los compradores peruanos. Las camionetas ‘pick-up’, por su parte, han crecido 78%, impulsadas por el desarrollo minero, alcanzando 29 mil unidades en 2024 y representando el 20% de las ventas totales.

Esta transformación se refleja en las calles, donde se observan nuevos competidores y logotipos. De las 10 marcas más vendidas en el segmento SUV en 2024, cinco ingresaron a este mercado durante la última década. En el ranking de las ‘pick-up’, otras cuatro marcas nuevas aparecen en su top 10. Cabe destacar que las nueve marcas de ingreso más reciente provienen de China.

La mayor oferta ha significado un ajuste en los precios. Usando el registro de Aduanas de los 1,5 millones de vehículos livianos nuevos importados durante la última década, estimo que la mediana de los precios de importación al llegar al puerto (no el precio al público) de las camionetas SUV se redujo en 30%, al pasar de US$19.300 en 2015 a US$ 13.250 mil en 2024, considerando dólares internacionales de 2024. Dicha reducción responde, por un lado, a una oferta: el precio de importación medio de SUV de marcas chinas llega a US$9.850. Por otro lado, la mediana del precio de importación de las marcas tradicionales también se redujo en términos reales tras ampliar su portafolio de productos (incluyendo SUV más compactas) y reubicando sus plantas de ensamblaje (por ejemplo, de Japón a Indonesia).

El ajuste en los precios, sumado a una creciente insatisfacción con la calidad de los caminos, que llegó a un máximo de 74% en 2024 según una encuesta de Ipsos, ha fomentado un cambio en los patrones de compra de los peruanos: de automóviles a camionetas SUV.

El mercado automotriz peruano seguirá evolucionando, impulsado por la apertura del Puerto de Chancay, que promete intensificar la competencia y beneficiar a los consumidores. Sin embargo, este crecimiento plantea un desafío crítico para las políticas públicas: asegurar un parque automotor más sostenible mediante la promoción de tecnologías más eficientes, como el uso de GNV, GLP y vehículos eléctricos, y la inversión en infraestructura clave, como carreteras en mejores condiciones y estaciones de carga eléctrica.

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