La primera película de boxeo que vi no tuvo un minuto de ficción pero sí mucha fantasía. No hubo sala de cine, ni proyector, solo un televisor viejo de trece pulgadas y un canal de señal abierta con transmisión en vivo y en directo. Sugar Ray Leonard regresaba, después de un apurado retiro, para retar al campeón de campeones de esos días, el hasta entonces imbatible Marvin ‘Maravilla’ Hagler. Fue un duelo insuperable, la técnica notable, cada puño más letal que el otro, las coreografías irrepetibles. Todos tuvimos una pelea del siglo en el álbum de los días. Movedizo, soberbio, impecable, glorioso Sugar Ray Leonard en un retorno legendario. Sus golpes no solo movieron a Hagler sino también el centro de nuestro corazón. Un 6 de abril de 1987 el más movedizo y carismático de los peleadores se recuperó de un traicionero desprendimiento de retina para volver al ring con el auténtico ojo de tigre.
Este sábado millones de personas en el mundo le darán una nueva oportunidad al boxeo después de una larga ausencia. Manny Pacquiao y Floyd Mayweather se batirán en la pelea más esperada de los últimos veinte años. Otra vez una “pelea del siglo”, quizá el encuentro más mediático desde aquella memorable golpiza que Julio César Chávez le aplicó a Héctor ‘Macho’ Camacho el 12 de setiembre de 1992, el mismo día que era capturado Abimael Guzmán (aquella vez Canal 13 detuvo su transmisión para anunciar tremenda noticia). Por fin el deporte de los puños recupera la emoción perdida después de largo tiempo con encuentros desiguales y con devoción a cuidar la billetera. ‘Pacman’ vs. ‘The Money’ pelearán como debieron hacerlo, por lo menos, siete años atrás. Un combate del 2 de mayo para llenar nuestro libro de historia.
En 1987, la economía del Perú se derrumbaba pero los amantes del boxeo vivían días de riqueza. Los mejores del planeta se retaban, se peleaban, se noqueaban, se volvían a pelear, se convertían cada año en costosa carne de presidio. Sugar Ray Leonard vs. ‘Mano de Piedra’ Duran; ‘Mano de Piedra’ vs. Tommy Hearns; Hearns vs. Hagler. Era un juego de tronos incesante con muchos héroes caídos.
La expansión abrumadora de asociaciones y federaciones, la necesidad de extender reinados en cada categoría y la ambición por acumular lluvias de millones cada vez hizo más difícil que los más grandes del boxeo se enfrenten en su mejor momento. Pacquiao y Mayweather llegan un poco tarde a esta fiesta que costará trescientos millones de dólares. Pelea de siglo para mí fue esa de 1987, para otros será la de Alí contra Frazier y algunos dirán que Tyson ante Holyfield. Todos somos fieles devotos de lo que pudimos ver. Así que alisten su sábado, enciendan ese televisor y emociónense como niños. Quizá esta sea su pelea del siglo. Quizá la próxima ya los encuentre en la lona, con los ojos bien cerrados después que la vida decidió contar hasta diez