Desde que el presidente Pedro Castillo asumió el poder, la relación del Ejecutivo con la prensa no solo ha sido tensa, sino también de asedio. La última reportera en sufrir una agresión física por funcionarios cercanos al jefe de Estado ha sido Hellen Meniz, de RPP Noticias. Franco Pomalaya, asistente de Comunicaciones de Palacio de Gobierno, intentó arrebatarle violentamente el micrófono cuando buscaba recoger una declaración del profesor.