La Semana Santa 2024 ya está aquí y, como es de esperarse, la demanda de productos marinos incrementará considerablemente durante los feriados de esta conmemoración tan importante del país. En ese sentido, desde el terminal pesquero de Villa María del Triunfo los comerciantes adelantan desde qué día se percibirán los aumentos en los precios.
¿Cuál es la oferta actual de pescado por Semana Santa?
De acuerdo con el Ministerio de la Producción, el abastecimiento de pescados y mariscos sera mayor que el del año pasado en los mercados mayoristas de Lima y otras regiones. La ministra Ana María Choquehuanca señaló que se podría alcanzar las 8,400 toneladas métricas durante esta Semana Santa. Esta cifra significa un incremento del 3.6% en comparación al 2023, mientras que, haciendo la misma comparación, el consumo semanal también será dos o tres veces mayor.
Asimismo, prevén que el bonito, perico, pota, jurel, caballa, lisa, cabinza, lorna y machete serán las especies de mayor consumo durante estos días.
¿Cuándo subirá el precio del pescado?
Los comerciantes del terminal pesquero en Villa María del triunfo aseguran que el alza del precios se podrá percibir desde el miércoles 27 de marzo, ya que desde ese día muchas personas acuden a adquirir sus productos, preparándose para el Viernes Santo. Sin embargo, aseguran que los precios todavía se mantendrán al alcance de todos. Mientras tanto, los precios de algunos pescados, como el perico y la corvina, se mantienen alrededor de los S/10.
¿Por qué se come pescado en Semana Santa?
En realidad, no existe una sola explicación para el consumo de pescado durante el Viernes Santo. Como se sabe, este día se conmemora la crucifixión de Jesucristo, por lo que no es una fecha para celebrar, sino de reflexión, en la que se promueve el ayuno y la abstinencia. La razón más sencilla es que se relaciona a las carnes rojas con la carne de Cristo, por lo que se opta por otro tipo de carne, que vendría a ser la del pescado. Otra explicación sugiere que se relaciona a las carnes rojas y de aves con la opulencia y el placer, por lo que, ya que Viernes Santo es una fecha de reflexión, se opta por la carne del pescado, a la que se asocia con la humildad o solidaridad con las personas de menores recursos.
Lo cierto es que esta tradición se encuentra dentro del derecho canónico. En el artículo número 1251 del capítulo II, referente a la penitencia, se establece que todos los Viernes Santos se debe practicar la abstinencia de carne o de otro alimento definido por la Conferencia Episcopal. La única excepción vendría a ser que este día en particular coincida con una solemnidad.