Están en películas de terror y hasta dibujos animados: ¿cuál es la verdadera historia de los duendes de Navidad?. (Fuente: iStock)
Están en películas de terror y hasta dibujos animados: ¿cuál es la verdadera historia de los duendes de Navidad?. (Fuente: iStock)
Redacción EC

Hoy es Nochebuena, pero desde inicios de diciembre, los elementos que la componen suelen llamar la atención y manifestarse mediante historias que revelan cierto misterio. En este caso, y así como ocurre con Papá Noel, por ejemplo, los representan figuras asociadas a una Navidad llena de simbolismos, entre otros personajes representativos que podemos observar hasta en dibujos animados. Conoce quiénes son, origen del mito entorno a la temporada de fiestas, y mucho más al respecto.

LOS DUENDES Y SU HISTORIA COMO PERSONAJES ASOCIADOS A LA NAVIDAD

Así como Papá Noel, el duende es un personaje vinculado a la mitología que según narraciones tradicionales, acompaña precisamente al también llamado Santa Claus cuyos orígenes han trascendido con el tiempo igualmente.

Cada Navidad, los regalos vienen en costal, y envueltas con ayuda de esas criaturas de forma humanoide, quienes con el tiempo terminaron cristalizándose en la narrativa de aquellos elfos que laboran en taller del Polo Norte hasta confeccionando los juguetes requeridos.

Vinculados a la mitología germánica y escandinava, los duendes navideños figuran descritos también como seres bellos, inmortales o de gran longevidad, que viven en la naturaleza y son amantes de la música, teniendo poderes sobrenaturales y magia capaz de hacerse notar mientras protagonizan películas, dibujos animados, entre otros formatos.

¿LA HISTORIA SOBRE PAPÁ NOEL ES VERDADERA? ESTO SE SABE ACERCA DE LOS ORÍGENES DEL ICÓNICO PERSONAJE NAVIDEÑO

El hombre de la tercera edad, contextura gruesa, barba amplia y frondosa que viste un traje rojo con cinturón negro, representa la ilusión de los más pequeños del hogar en época navideña.

Lo que hoy conocemos como Papá Noel tuvo su origen milenario en el siglo III después de Cristo bajo la imagen de San Nicolás, un obispo que nació en Patara, Turquía.

Las reliquias de San Nicolás se veneran en la ciudad italiana de Bari, y cuya festividad se celebra cada 6 de diciembre para conmemorar el día de su fallecimiento, dando inicio a un mes que lo identifica con la Navidad y Papá Noel.

Nicolás de Bari era muy dadivoso con los más necesitados, pero tenía especial devoción por ayudar a los niños, destacándose para ejemplificar ello el momento cuando sus padres fallecieron, porque decidió repartir todos sus bienes, y refugiarse en la religión a fin de mitigar sus penas.

En el siglo XII, la tradición católica del santo turco se expandió por Europa, y en los posteriores siglos XVII y XVIII, la imagen de San Nicolás fue adentrada por inmigrantes de distintas culturas como la británica, neerlandesa y la alemana, en Estados Unidos.

Junto a la cercanía del Día de San Nicolás, el mito de los regalos a los niños en 1820 se popularizó en Navidad, y dio fama a la presencia de Papá Noel como la derivación del nombre del santo turco que en alemán significa San Nikolaus.

Con el transcurrir de los años, y la contemporaneidad, la capa de obispo y la mitra fueron reemplazadas por el clásico traje con ribete de piel blanco y rojo.

LA RELACIÓN ENTRE COCA-COLA Y PAPÁ NOEL QUE PERDURA CON LOS AÑOS

Un poema navideño llamado “” del escritor estadounidense, Clement Clarke Moore, de 1823 es la representación más semejante que se tiene de Papá Noel desde mediados del siglo XIX hasta la actualidad.

Su llegada en un trineo con 8 pequeños renos, y su bajada por la chimenea con un costal con juguetes sobre su espalda, es la escenificación tradicional que realza la historia mítica del barbudo blanquirrojo.

Los colores de Navidad papanoelísticos tienen como referencia al traje de obispo que vestía San Nicolás, pero que ayudó a consolidar como la bonachona imagen que tanto alegra a los niños.

En 1920, Papá Noel apareció por primera vez en un anuncio de Coca-Cola ilustrado más de una docena de veces por Thomas Nast en The Saturday Evening Post, mientras su imagen que permanece como leyenda urbana a semejanza de San Nicolás en pleno siglo XXI, fue dibujado por Haddon Sundblom 11 años después a pedido de D’Arcy, la agencia de publicidad de la reconocida marca de gaseosa.