Por tres décadas hemos visto a Fernando Colunga en el clásico papel de galán de telenovelas. Otrora símbolo de Televisa, junto a estrellas del melodrama como Thalía, Adela Noriega, Edith González, por mencionar solo a algunas figuras, el actor de 56 años se nos muestra abierto a darle un nuevo giro a su carrera y a retarse a sí mismo en quizás el papel más complejo y oscuro que le toca interpretar como actor en “El secreto de la familia Greco”, la versión mexicana de la serie argentina “Historia de un clan” de 2015, acerca del sonado caso de la familia Puccio que secuestraba personas en su propia casa por dinero.
Con cambios en el guion y adaptada a la realidad mexicana, Colunga da vida a Aquiles Greco, el líder de la familia, un personaje difícil de entender pero que en palabras del actor, despertó sensaciones que necesitaba explotar a nivel actoral.
Producida por Telemundo, bajo la batuta de Sebastián Ortega, “El secreto de la familia Greco” se estrena este 4 de noviembre en Netflix.
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-Ha sido una sorpresa verte en un personaje súper distinto al que nos tienes acostumbrados ¿Cómo llegó a ti este proyecto?
El señor Marcos Santana (productor de Telemundo) me dice un día: “Dale un vistazo a esta serie”. Entonces la veo, me llama muchísimo la atención a nivel construcción, a nivel producción, a nivel lenguaje y me dice: “Sebastián Ortega, que es la persona que originalmente ha estado detrás de esta historia, quiere que platiquemos los tres” porque habían pensado en mí. Cuando me lo proponen, yo obviamente feliz y asustado de ver cómo le iba a dar vida a un personaje tan complejo. No asustado de no lo quiero hacer sino de este miedo que te da como a lo desconocido, pero que quieres hacerlo. Entonces, ya platicando me dicen que tenían planeado empezar probablemente un año después, lo cual a mí me dio mucho tiempo para hacer toda una búsqueda a fondo de este personaje, porque requiere de trabajo físico, de entenderlo y hacerlo tuyo. Tuve la la gran fortuna de que me apoyó una muy buena actriz mexicana como lo es Patricia Reyes Spíndola (”El galán”).
-¿En qué consistió el trabajo con Patricia?
Me mandaba un grupo de preguntas todos los días, charlábamos mucho porque es verdaderamente complicado, no llegas a entender el 100% de una mente que cree que está haciendo lo correcto porque por más que analizábamos no hay una maldad para su familia. Él siempre busca un bienestar detrás de un hecho tan terrible y pues obviamente está lejano a cualquier similitud de lo que yo pudiera pensar. Entonces el trabajo fue largo y muy interesante para mí porque siempre es bueno el tener una gran actriz junto a ti, que te cuestione, que te pregunte. Eso te da un entendimiento, y es como yo digo, el actor nunca acaba de aprender. Yo creo que el día que el actor dice ya lo sé todo, ese día el actor se seca. El actor aprende día con día. Para mí fue como estar en un curso intensivo, de verdad interesantísimo donde creo que aproveché mucho.
-¿Te exigió más de lo que pensabas?
Creo que despertó también cosas en mí que las tenía ahí pero necesitaba explotarlas. Entonces creo que todo esto se va a ver ahí, en este cúmulo de de sensaciones que es “Los secretos de la familia Greco”.
-Conocemos a la persona real en la que se inspira este personaje y lo hemos visto interpretado, primero por Alejandro Awada y después por Guillermo Francella. Además, esta historia es el remake de la serie argentina de 2015
Quisiera aclarar que es un remake pero con un plus porque los escritores, que son la misma pluma y conocían la historia, ahora le dieron un plus, empezando por mi personaje. Si conoces la historia, cuando veas esta nueva versión verás que este tiene un trabajo activo diferente a como lo han hecho los otros personajes, por lo que creo que es una propuesta interesante. Mis otros compañeros hicieron un gran trabajo, pero creo que ahora se hizo un producto con toques diferentes, lo cual le va a dar otra dimensión.
-En todo caso, ¿qué crees tú que le aportas al personaje a diferencia de los actores antes mencionados?
Creo que le aporto una nueva psicología que me permitió la pluma del escritor, al llevarme con otro tipo de consecuencias y otro tipo de acciones activas al personaje.
-¿Qué tan involucrado estuviste con el trabajo del director y del guionista?
El señor Santana como el señor Ortega quisieron que desde el principio yo estuviera pegado con ellos en todo lo que se iba haciendo. Me dieron la posibilidad de estar en todo, en ver cómo se iba construyendo la historia de todos mis demás compañeros. Tuve el acercamiento con los escritores todo el tiempo lo cual para mí fue fantástico.
-Siempre te hemos visto de galán y ahora bueno, como te decía al principio, verte en un personaje así es un cambio tremendo. ¿Te gustaría seguir descubriéndote, probando como actor con proyectos similares a este?
Creo que mi compromiso con el público es ese. Siempre estarme refrescando, buscando, y como te dije, creo que los actores estamos abiertos a seguir siempre estudiando y aprendiendo. No es que me vaya a quedar haciendo siempre personajes así sino que es bueno poder salir y ver otra textura de lo que puedes hacer para poder abrir ese arco dramático que uno tiene y seguir haciendo cosas.
-Hablemos de la caracterización de tu personaje.
El trabajo que hicieron a nivel caracterización fue muy complejo porque no se recurrió a los clásicos implantes sino que fue un trabajo de mis compañeras a base de puro pintar. Puras sombras, puras tintas. Además, me tuve que rasurar un pedazo de cabello. Ellos trabajaban diario en el cabello porque no quisimos recurrir a pelucas ni cosas. Quisimos que todo fuera natural y eso le da al personaje un carácter, una fortaleza porque te ves en un espejo todos los días y vas viendo cómo va llegando esta oscuridad y se va metiendo en ti.
- ¿Cuánto tiempo duró la grabación?
Empezamos en octubre de 2021 y acabamos a principios de marzo.
- ¿Cómo habrá terminado esa cabeza?
¡Imagínate! Terminamos y no tenía la parte de cabello de enfrente, tengo que dejar crecérmelo otra vez.
. Lo decía por el nivel mental, sobre todo.
Sí, ahí iba (Risas). Yo soy una persona que me deshago muy fácilmente del trabajo en cuanto a la inmersión. Yo llego, doy 100% en el set y saliendo pongo una maletita, un muñequito y lo dejó ahí esperándome en la puerta hasta el día siguiente. Llego, estudio a nivel técnico, memorizo, entiendo que el personaje ya va preparado pero sí prefiero que me espere en el set.