Bajo el último halo de luz de la tarde, Bruno Pinasco (Lima, 1974) llega a Quinta Esencia para hablar de la segunda parte de su novela “Tea Shop”, pero también del momento personal que atraviesa, el futuro de “Cinescape” y los proyectos que tiene en mente, mientras compartimos una taza de té verde. Con gran entusiasmo, el conductor de TV explica que le llegó la oportunidad de expandir el universo literario de Grey, el protagonista del libro, gracias al éxito de su primera entrega. “Ya me están pidiendo la tercera parte y no tengo ni una palabra escrita”, bromea. Así es Bruno. Una persona que suele tomarse la cosas con simpatía y buen un humor, dos rasgos que le han permitido conectar con el público y ser uno de los personajes más queridos de la televisión.
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-En esta segunda parte, el libro aborda el tema de la homofobia a través de uno de los personajes. ¿Por qué decides ahondar en este asunto?
En el primer libro, Grey está como protegido en su propia burbuja. Lo que quería ahora era sacarlo de ahí. Que se enfrente a situaciones que son las cotidianas, a situaciones que todos podemos pasar cuando sales de tu casa, de tu entorno. Entonces, me parecía importante y muy natural que le pudiera ocurrir algo así al personaje. Quería jugar un poco con eso, con el tema de la inseguridad que tiene él.
-¿Cómo percibes que ha sido recibida la novela por la comunidad LGTBIQ?
Hace unos días, estuve en Arequipa presentando el libro y fue maravilloso porque mucha gente, muchos chicos y chicas, se me acercaron a contarme su experiencia con la novela, lo bonito, estimulante e inspirador que había sido. También había chicos que me decían: “Oye, mi papá no quiere que lea tu libro”. Es increíble que en pleno 2024 todavía sigamos con eso.
-Esta publicación ha coincidido con tus cincuenta años. ¿Tiene un significado especial ese número para ti?
Justo en la tarde estuve con mi papá y recordaba cuando él cumplió cincuenta. No sé si estoy siendo infidente, pero se puso tristísimo, no lo recibió nada bien. Como que le afectó bastante el número, a pesar de que estaba en su pico máximo de popularidad. En cambio, a mí me pasó todo lo contrario. Quizás es una cuestión generacional. En general, al tema de la edad nunca le he dado mucha importancia, salvo cuando aparecen ciertos achaques. Allí es cuando recién piensas: “Caray, ya estoy grande”.
-Hace unos días, publicaste un video en el que decías que te dejen “envejecer tranquilo”. ¿Qué te llevó a hacerlo?
Por esta idealización absoluta de la juventud. En distintos momentos de la historia, se ha venerado la belleza y rendido culto a lo joven, lo cual me parece maravilloso. Pero lo que no entiendo es por qué se estigmatiza a la vejez. Según como yo lo veo, el paso de los años te otorga sabiduría. Para mí, llegar a los 50 y hacerme viejo es un privilegio, no un castigo. Normalmente se tiende a pensar que todos vamos a llegar a los 70, 80 años. Y no es así. Acabamos de vivir una pandemia donde gente joven se moría. Me parece importante empezar a cambiar el chip y valorar eso.
-¿Te molesta que, hasta ahora, te digan Brunito?
No me molesta. Casi siempre me lo dicen con cariño. De repente es algo que se vincula a mi personalidad y a esta energía que tengo. Hay gente, incluso amigos que son menores que yo, que me llaman así. A veces, uno ya no puede luchar contra eso.
-El próximo año se cumple un nuevo hito en tu vida con los 25 años de “Cinescape”. ¿Esperabas durar tanto tiempo con este espacio?
Todos estos años han sido una aventura fascinante. Yo he vivido en la tele indirectamente por mi papá, pero no tenía la intención de convertirme en presentador, en conductor, en nada. Lo mío era estar detrás de cámaras, ese era mi mundo. Pero bueno, las cosas pasaron y ya. “Cinescape” llegó a mi vida como un regalo. Me cambió la vida totalmente.
-¿Es cierto que piensan terminar con el programa?
Sí, estamos evaluando cerrar el ciclo ahí. No es oficial, pero tenemos que sentarnos con el equipo de producción y el canal para ver cómo podemos cerrar un ciclo bonito con la audiencia. En paralelo, existe la posibilidad de hacer otro proyecto con América Televisión que me entusiasma un montón. La idea es crear un contenido nuevo, sin dejar de lado los viajes y las coberturas internacionales. Esperamos anunciarlo el próximo año.
-¿Crees que el streaming está desplazando a la televisión?
El ser humano tiende a decir que ya se murió tal cosa y nunca es así. Cuando salió el fonógrafo, dijeron que los músicos ya no eran necesarios; cuando salió la fotografía, dijeron lo mismo de los pintores, cuando salió la televisión, la gente decía que ya no íbamos a ir al cine. Hoy en día te cuestionan: ¿para qué sigues mirando televisión abierta si todo lo puedes ver por Internet? Al final, creo yo, es un tema de convivencia y adaptarse a las demandas de los públicos.
-Hoy vemos a muchos creadores de contenido e influencers entrevistar a las estrellas del cine. ¿Sientes que compites con ellos?
Yo no lo siento como una competencia. Cuando Pepe Ludmir en su momento hablaba de cine, tenía una magia especial que ya no existe más. Hoy hay un montón de gente que hace entrevistas y crítica de cine en Internet, que me parece está generando una democratización interesante. En el caso de “Cinescape”, nuestras redes y contenido digital son muy potentes. Además, el acceso a los actores de cine ya no es imposible. Hay campañas de promoción y difusión para llegar a todos los públicos. Prácticamente no hay exclusividad. Es una tendencia mundial.
-En medio de todos los planes que tienes, ¿el amor es una prioridad en tu vida?
Creo que, en general, el amor es sumamente importante para los seres humanos. En mi caso, por ahora, sigue siendo un gran proyecto por venir. Estoy tan abocado a mi trabajo, a las dinámicas que tenemos, que no es fácil seguirme el ritmo. Será así hasta que aparezca un loco como yo y se quiera subir al mismo barco. //
“Tea Shop” (Planeta) cuenta la historia de un romance en apariencia imposible, que se desarrolla en un centro comercial llamado Boulevard Valencia. En esta segunda parte, Grey y Eliot enfrentan su relación con una nueva energía y un amor que promete ser más fuerte que nunca. A la venta en las principales librerías del país.