Los jugadores de fútbol no solo nos sorprenden con nuevas jugadas y demostraciones de talento. También nos alegran el día con acciones curiosas.
En la Europa League, por ejemplo, sucedió algo insólito. Quizá sea la jugada más cómica en la historia. Sucedió en el encuentro entre el Krasnodar de Rusia y el Diosgyor de Hungría.
Primero, el arquero del cuadro húngaro se tropezó y regaló un balón al delantero rusa, quien increíblemente falló. El resultado del partido (5-1 para el Krasnodar) quedó relegado por la curiosa acción.