
Boluarte se retira en estos momentos de la sede del Legislativo.
Han sido aproximadamente 4 horas y 10 minutos de discurso. No ha llegado a ser tan extenso como el año pasado.
José Jerí, presidente del Congreso, está con cara de aburrido.
La presidenta culmina su mensaje, saltándose cerca de 15 páginas que habían estado previstas.
Ahora Boluarte salta de la página 80 a la 96. El discurso está por llegar a su fin.
Boluarte habla ahora de las relaciones internacionales, en especial con países como Estados Unidos, Francia y China.
Boluarte ha mencionado algunas acciones para prevenir la violencia sexual contra las mujeres. Lo que no señala es que, según un informe publicado hace unos días en El Comercio, en el primer semestre del año se han reportado 6.677 violaciones sexuales y 78 feminicidios.
El prófugo Vladimir Cerrón también ha usado su red social de "X" para criticar a la presidenta Dina Boluarte. La acusa de "desleal" y que es "incapaz de entender la necesidad del pueblo".
La presidenta Boluarte anuncia un nuevo programa social dirigido a reforzar la alimentación escolar. Tuvimos programas fallidos como Qali Warma, que luego pasó a llamarse Wasi Mikuna.
La presidenta ya superó las 3 horas de lectura y va por la página 65. Se calcula que podría terminar en dos horas más.
Vamos en la página 65 del discurso.
Boluarte habla de tolerancia cero frente a la minería ilegal. Sin embargo, el Gobierno amplió dos veces el plazo del Reinfo y ahora reevaluará la salida de 50 mil mineros que tenían registro vencido.
Habla de detenciones, pero oculta que la mayoría son por delitos menores. Habla de estados de emergencia, pero en las zonas intervenidas los crímenes siguen ocurriendo como si nada. Esa es la desconexión más peligrosa: un Estado que cree que controlar el crimen es posar con uniforme, mientras las bandas se profesionalizan y se expanden. No se puede combatir a las mafias sin conocerlas, sin mapearlas, sin anticiparse. Y en el discurso presidencial no se escucha ni una palabra sobre eso.
Hay una brecha enorme entre lo que dice el gobierno y lo que ocurre en las calles. Mientras Dina Boluarte asegura que está enfrentando la delincuencia, las mafias avanzan con total impunidad, los comerciantes pagan cupos, los transportistas son asesinados a plena luz del día, y los barrios viven con miedo. El gobierno habla de patrullajes, pero no menciona planes concretos de inteligencia.
• En el 2016, el discurso de PPK fue de poco más de una hora.
• Los discursos de Martín Vizcarra duraron entre una y una hora y media.
• Pedro Castillo, por su parte, habló en el 2022 durante poco menos de dos horas.
Según el tamaño del mensaje en curso de Dina Boluarte, que tiene 97 páginas, este podría durar otra vez alrededor de cinco horas, terminando después de las 4 de la tarde. Veremos.
Vamos ya casi tres horas de discurso. El año pasado, Boluarte batió récord con su discurso de 28 de julio, que duró más de cinco horas, el más largo del siglo XXI. Ese día la escuchamos desde las 11:30 hasta las 4:30 pm.Los discursos anteriores han sido mucho más cortos. En el 2012, por ejemplo, Alejandro Toledo habló por menos de una hora, el más corto de las últimas décadas.
A pesar de esto, se han reducido los fondos para combatir el crimen. El IPE mostró que el presupuesto en términos reales del Ministerio del Interior se redujo en más de 18% entre el 2019 y 2025.
No olvidemos que, según un informe del Instituto Peruano de Economía publicado en El Comercio, desde el 2019 las denuncias por extorsión por cada 100.000 habitantes se han incrementado en todas las regiones del país, multiplicándose por seis a nivel nacional, y la población víctima de algún hecho delictivo aumentó de 18,3% a 27,7% entre el 2021 y 2024.
No hay una estrategia. No hay un liderazgo. Y no hay un mínimo gesto de autocrítica. La inseguridad no se enfrenta con discursos duros, sino con planes sostenidos, tecnología, inteligencia operativa y un Estado que no le tema a los verdaderos poderes criminales. Nada de eso estuvo en el mensaje.
En su mensaje de 28 de julio, el vacío es elocuente: no hay una sola propuesta seria sobre inteligencia policial, ni una línea sobre cómo se van a desarticular las mafias que operan desde las cárceles, ni sobre el lavado de dinero del crimen organizado.
Además, el Gobierno ha tenido como medida bandera la vieja confiable: estado de emergencia. Se ha promulgado o ampliado esta medida al menos 6 veces en distritos de Lima y Callao desde que comenzó la gestión Boluarte, el 30% del total de su mandato. ¿Resultados? Ninguno.
Dina Boluarte no hace ningún mea culpa por el fracaso de su gobierno frente a la inseguridad ciudadana. Ha ofrecido anuncios efectistas, estados de emergencia que se renuevan sin resultados y medidas que jamás se concretaron: como restringir el tránsito de dos personas en moto o sacar militares a las calles. Todo quedó en titulares. Mientras tanto, los delitos no han disminuido. Por el contrario: el sicariato, la extorsión y los asesinatos múltiples se han disparado.
El Ejecutivo celebraba que se han hecho 45 mil detenciones, pero cuando uno revisa el detalle, el 98% corresponde a delitos menores o faltas como conducir en estado de ebriedad. Solo el 2% está vinculado a sicariato, homicidio o extorsión. Enfrentar la delincuencia no es inflar cifras, es enfrentar la realidad.
“Al gobierno le ha tocado encarar la delincuencia”, dice Dina Boluarte. Pero lo dice al frente de un Estado que ha manipulado cifras para dar la impresión de que estamos ganando la batalla contra el crimen.
Ni una sola mención a la Ley Mape ni al retroceso que ha tenido su gobierno, cuando hace unos días anunció que se crearía un subgrupo para evaluar la exclusión de más de 50 mil mineros que tenían registros inactivos en el Reinfo.
Este espacio ha sido criticado por su enfoque limitado. La fiscal Delia Espinoza expresó preocupación por la exclusión inicial del Ministerio Público, señalando riesgos para la legitimidad y transparencia de las políticas públicas.
Boluarte hace mención ahora a la mesa técnica sobre formalización minera que instaló el pasado 14 de julio.
Anuncio del sector gasífero: el Minem y el concesionario Cálidda tiene ya un acuerdo para ampliar el suministro de gas natural en 15 localidades de 7 regiones del país. Se construirán 4 subestaciones distribuidoras, 12 plantas regasificación y 3.711 km. de redes de distribución.
Horizonte promisorio para Petro-Perú, dice la presidenta. La cuota de mercado de la estatal es hoy de 30% y exporta productos a Brasil, Ecuador y Bolivia. Hay un acuerdo con PetroEcuador para la compra directa de petróleo.
La presidenta lee la página 47 del discurso, que en total tiene 97 páginas. Estamos llegando casi a la mitad del discurso.
En un mensaje que el vacado expresidente, Pedro Castillo, hace público a través de su cuenta "X", asegura que este gobierno [de Dina Boluarte] es "un gobierno usurpador" y que es sostenido por el "fujicerronismo".
Comienza el balance del sector agricultura en la página 37 del discurso.
Para el 2026, se culminará con el estudio de perfil del ferrocarril Lima-Barranca. Se suscribirá el contacto de gobierno a gobierno del ferrocarril Lima-Ica, dice la presidenta.
Mientras Boluarte dirige su discurso en el Congreso, desde la cárcel, Pedro Castillo ha compartido en X su propio mensaje a la Nación.
Como ya es costumbre, el gran ausente del discurso presidencial fue el transporte urbano. En un país donde la informalidad domina las calles y está a punto de legalizarse en Lima —la séptima ciudad del mundo con peor tráfico—, el silencio es escandaloso. Aquí mueren más de 3,500 personas al año en accidentes viales, y millones pasan hasta 4 horas diarias en un bus. Movilidad digna no es un lujo, es un derecho. Pero sigue sin estar en la agenda del poder.
No ha habido mención en el discurso al tren Lima-Chosica que impulsa el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga.
La presidenta dijo que durante este último año de gobierno trabajará en las vías de entrada y salida del Aeropuerto Jorge Chávez, recién inaugurado.
La presidenta resalta el lanzamiento de la Ruta Turística relacionada al papa Robert Francis Prevost (León XIV).
Se construirán 3 buques de investigación científica del Imarpe (Instituto del Mar del Perú). Una buena noticia, pues se solicitaba esta inversión desde hace varios años.
La presidenta indica que el sector pesca y agricultura registró una caída de 12,7% en su PBI y un aporte mínimo de 0,8%. Hoy, el sector ha crecido 5,4%. Recordemos que el sector pesca tuvo un pésimo 2024, debido a que no se abrió una temporada de pesca. Esta situación no se ha repetido y por ello el sector muestra significativo avance.
Con un hemiciclo medio vacío, la presidenta sigue leyendo su largo mensaje de Fiestas Patrias. Los pocos parlamentarios que aún están en sus curules conversan entre ellos o se entretienen con sus teléfonos celulares. Mientras que lo únicos que no se pueden mover son los ministros de la señora Boluarte.
La presidenta entra a la página 25 de su discurso hablando de las micro y pequeñas empresas.
Se evalúan 134 autorizaciones de inversión en exploración y exportación en el sector minero, lo que significarán inversiones inmediatas estimadas en más de US$6.000 millones, dice la presidenta.
Sobre el sector minero, Boluarte indica que se prevé iniciar Zafranal y Pampa del Pongo, entre otros proyectos mineros, con una inversión superior a US$4.700 millones.
Además, indica que a la fecha se han aprobado 254 medidas desregulatorias, estando en proceso 257. Recordemos que el ex titular del MEF, José Salardi, publicó más de 400 medidas desregulatorias durante su breve período en este ministerio.
Boluarte destaca el avance de la inversión pública. Eso es cierto, dado que este indicador sí se ha mostrado al alza. Sin embargo, es importante mencionar que la inversión pública pesa 20% de la inversión total. El 80% restante corresponde a la inversión privada.
Boluarte anuncia la suscripción de 4 adendas estratégicas de contratos ya firmados en los sectores transporte, gas natural y salud por un total de US$2.500 millones.
La presidenta resalta las APP y los Proyectos en Activos que ha impulsado su Gobierno. Este año se adjudicarán más de 30 proyectos por US$8.000 millones, dice la presidenta.
Que no se cambie la regla fiscal es una buena noticia y es lo mínimo que podemos esperar; que no se incrementen los gastos del gobierno de manera desmedida sin asegurar mejores servicios públicos para ciudadanos.
La presidenta menciona que la previsión de su gobierno es que el déficit fiscal logre estar en el rango de 2,6%-2,8% al cierre del 2025. Recordemos que el MEF anunció hace algunos días que ya no buscaría cambiar la regla fiscal este año.
Los invitados y asistentes al Congreso para escuchar el mensaje de Fiestas Patrias comienzan a mostrar aburrimiento o cansancio. Ya pasó una hora del discurso y hasta el vocero presidencial, Feedy Hinojosa, comienza a bostezar.
Siempre se resalta la baja inflación, lo que, en estricto, le corresponde controlar al Banco Central. Además, el rango de crecimiento que brinda la presidenta (de 3,1% a 3,5%) ya se conocía; especialistas indican que podríamos crecer aún más.
La presidenta hace un repaso de los indicadores macroecónicos de su gobierno. Para el cierre de este año -dice- se estima crecer en el rango de 3,1% y 3,5%. “Esto nos posicionará como una de las economías que liderará el crecimiento en América Latina”, dice la presidenta. Además, resalta la fortaleza del sol como moneda y la bajada inflación que registra nuestro país.
En este momento, vamos en la página 15 de 97.
Se han destinado más de 500 millones de soles para las ollas comunes y comedores populares, 145 millones más que en el 2023.
La presidenta menciona la inauguración de Chancay y el nuevo aeropuerto Jorge Chávez. Dice que su gobierno encontró 57 obras paralizadas y hoy, indica, todas están destrabadas.
La presidenta resalta como logro de su gestión el financiamiento a más de 550 mil hogares con el programa Bonogás. Además, indica que se han beneficiado a más 3.800 micro y pequeñas empresas en todo el país, generando más de 84 mil empleos.
Los que critican a su gobierno son "pesimistas, nihilistas, escépticos y amargados".
Un discurso con tintes de ficción el que realiza la presidenta Dina Boluarte, de espalda a la realidad. Y ahora usa el mensaje a la Nación para victimizarse por las diversas investigaciones que se han abierto en su contra y su hermano Nicanor Boluarte.
Los primeros minutos del discurso de Boluarte tienen una connotación mesiánica. Ella es la salvadora que encontró un país en crisis y rescató la democracia. Y un tono confrontacional con sus críticos. Difícil que haya algún tipo de mea culpa.
Contradictorio que la presidenta hable de cifras de crecimiento económico y reducción de la pobreza. La mandataria, que se ha subido el sueldo, puede que vea prosperidad, pero a la población le pide cocinar desayuno, almuerzo, cena y postre con 10 soles.
Dina Boluarte debe hablarle no solo a Lima, sino también al sur andino, al norte post El Niño y a los pueblos amazónicos olvidados. La ciudadanía no espera un discurso técnico, sino uno que traduzca las urgencias sociales en acciones medibles. Más allá de la narrativa, el país exige un gobierno que deje de improvisar y comience a ejecutar con responsabilidad. Este mensaje a la Nación es una de las últimas oportunidades que tiene Dina Boluarte para reconciliarse con un país al que no ha sabido escuchar.
Ruth Luque protesta al escuchar a la presidenta Dina Boluarte hablar de las protestas del fines del 2022 e inicios del 2023. Parece que la congresista se retiró del hemiclo.
Por tercer año consecutivo la presidenta Dina Boluarte reitera este discurso que viene repitiendo erigiéndose como una "salvadora" del gobierno golpista de Pedro Castillo. Pero se olvida que ella es solo la continuidad de ese gobierno y que llegó de la mano de Castillo.
El año pasado, el mensaje a la Nación duró cinco horas con 79 páginas. Por lo que vemos hoy en el podio, hay más de 100 páginas. Esperemos que haya una versión sustancial del mensaje, los peruanos se merecen anuncios que se logren plasmar en la realidad, no promesas que ni la actual presidenta podrá poner en marcha en lo que le queda de gestión.
Según nos cuenta el equipo de Nuevas Narrativas, si es que el discurso se lee en el mismo ritmo que el año pasado, duraría aproximadamente 2 horas y media.
El sentimiento en las calles y en las redes es uno solo: el país no necesita promesas, sino señales claras de gobernabilidad y empatía con los problemas reales. El mensaje de Dina Boluarte debe dejar de ser una defensa personal y pasar a ser un compromiso nacional. No basta con mencionar salud y educación: se espera claridad en metas, presupuestos y prioridades. En transporte y vivienda, la inacción es tan notoria como la ausencia de proyectos de largo aliento. En un país donde los conflictos sociales no cesan, el silencio o el lugar común en el discurso solo profundizarán la desconexión del Gobierno con el territorio. El mensaje debe reconocer que el Estado está rebasado en muchas zonas del país y explicar cómo piensa recuperarlo.
El discurso este año tiene 97 páginas, más que el año pasado. El año pasado fueron 79.
¡Hola a todos! Desde ECData estaremos haciendo un fact-checking en vivo del discurso. Por acá les iré contando cualquier otra información importante.
Buenos días a todos. Ya vemos a la presidenta Dina Boluarte, en su desplazamiento hacia el Congreso de la República para brindar su último discurso a la Nación por Fiestas Patrias. Por cierto, lo hace a bordo de uno de estos lujos vehículos que conforman la flota de vehículos oficiales que trasladan a la mandataria.
En esta jornada nos acompañan María Rosa Villalobos (editora de Economía y Día 1), Karem Barboza (periodista especializada en temas judiciales ), Ariana Lira (jefa de la Unidad de Periodismo de Datos) y Juan Pablo León (editor de Nacional). En los próximos minutos compartiremos nuestros comentarios y análisis del mensaje presidencial.
Muchos esperaban que esta vez el discurso, a diferencia del año pasado, sea breve. Pero por las imágenes que hemos visto hace un rato, parece que no será así.
¡Felices Fiestas Patrias! En este en vivo, los periodistas de El Comercio comentaremos en tiempo real todos los detalles de lo que será el último mensaje a la Nación de 28 de julio de la presidenta Dina Boluarte ante el Congreso de la República.








Hemos llegado al fin de esta larga jornada. Quiero agradecer a la audiencia de El Comercio que ha estado conectada estas horas y a Maro, Ariana, Karem y Juan Pablo. ¡Gracias y hasta la próxima oportunidad!