(Foto: Luis Gonzáles / El Comercio)
(Foto: Luis Gonzáles / El Comercio)
Graciela Villasís Rojas

Por: Graciela Villasís, Unidad de Investigación.

A dos años de concluir el gobierno de , su esposa, la entonces primera dama , solicitó US$230.000 a la empresa brasileña para contratar encuestadoras de opinión con miras a la campaña presidencial del 2016. Así lo señala el testimonio de un ex ejecutivo de la constructora que se ha acogido a la colaboración eficaz.

Hasta el momento, solo se conocía de los aportes por US$3,5 millones que OAS y Odebrecht entregaron para la campaña presidencial de Humala del 2011.

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En setiembre del 2014, el entonces gerente de contratos de OAS en el Perú, Leonardo Fracassi, recibió una llamada inesperada. “Era un pedido para que vaya a una reunión en Palacio de Gobierno, dicha cita sería con la señora Nadine Heredia Alarcón, en ese momento primera dama del Perú. La indicación era entrar por la parte de atrás de Palacio, en donde hay un jardín y una escalera por donde se entra a las dependencias”, señaló el colaborador eficaz N°101-2019 a los fiscales del equipo Lava Jato que viajaron a Sao Paulo, Brasil, en marzo de este año.

El colaborador relató además: “Leonardo Fracassi llegó y entró a Palacio y le invitaron a dirigirse a una sala donde esperó y llegó sola la señora Nadine Heredia, de manera muy objetiva le comunicó al señor Fracassi que el Partido Nacionalista no sabía si iba a lanzar o no candidato para las elecciones y tampoco tenía definida su estrategia electoral y que, por lo tanto, ella necesitaba hacer un sondeo con el objetivo de evaluar nombres y otros factores que podrían generar elementos para la toma de dichas decisiones y que para eso necesitaba US$230.000 a ser entregados a una persona que iba a comunicarse con él”.

Según las encuestas de la época, entre agosto y setiembre del 2014, Nadine Heredia contaba con una aprobación que oscilaba entre 30% y 32%. En aquel entonces se especulaba sobre la posibilidad de que iba a postular a la Presidencia de la República.

Para esa fecha, el gobierno de Humala ya había adjudicado a OAS tres proyectos por S/1.371’852.070. Uno fue la carretera Lima-Canta, otorgada al Consorcio Vial Santa Rosa (integrado por OAS, Mota Engil y Constructora Upaca S.A.) el 28 de marzo del 2012 por S/319’248.819.

También se adjudicó, el 21 de marzo del 2013, la construcción de la carretera Quilca Matarani por el Consorcio Vial Quilca-Matarani (integrado por OAS, Cosapi y Obrainsa) por S/553’293.163. El 30 de enero del 2014, OAS se adjudicó la buena pro para edificar el Centro de Convenciones de Lima, ubicado en San Borja, por S/499’310.088.

El colaborador declaró que Fracassi “informó a la señora Heredia Alarcón que no podía tomar esa decisión, sino que debía consultarla con los dueños de la compañía en Brasil. Sé también que habló del tema con el señor Adelmario Pinheiro Filhio [presidente de OAS] y [este] aprobó dicha entrega y con esta aprobación solicitó al departamento de la controladoria que se cumpliera lo indicado”. La controladoria era la división de sobornos de OAS.

Finalmente, relató el colaborador: “Se entregó el dinero, solo parte del acuerdo fue cumplido porque después de la fecha del primer pago que fue cerca de US$120.000 hubo la detención del señor Pinheiro así como de tres miembros del sector de la controladoria, por lo tanto ya no sería posible hacer más entregas”, remarcó.

Agregó que el interés de Fracassi de entregar el dinero era “porque ya conocían el poder que tenía [Heredia] y por ello querían mantener buenas relaciones con ella para que no se bloqueen las contrataciones con OAS” y estas continuaran.

—En una mochila—
La entrega del dinero, según lo ha descrito el mismo colaborador, se hizo a través de “Ricardo Silva Ferreira […] un courier. El mismo Fracassi entregó a este una mochila para que a su vez se la entregara a una persona, indicándole que la debía contactar con un número de teléfono celular”.

—El primer encuentro—
Los nexos de los Humala Heredia con OAS se remontan a unos años antes de que estos llegaran al poder. Según otro colaborador, el 105-2019, después del primer encuentro que sostuvo la pareja con Valfredo de Assis (ex gerente de OAS en el Perú), en el primer semestre del 2009, se coordinó una cena con Pinheiro.

“La cena se dio en la casa de Valfredo de Assis, ubicada en la calle Nicolás de Ribera 778, departamento 371, distrito de San Isidro, el 3 de febrero del 2010”, dijo el colaborador. Así lo consignó la propia Nadine Heredia en una de las agendas que está bajo custodia de la fiscalía. “A dicha reunión concurrieron Ollanta Humala, Nadine Heredia, Adelmario Pinheiro”, agrega el testigo.

En la agenda incautada a Nadine Heredia se encuentra registrada la reunión en casa de Valfredo de Assis, en la que también participó el presidente de OAS, Adelmario ‘Leo’ Pinheiro. (Fuente: El Comercio)
En la agenda incautada a Nadine Heredia se encuentra registrada la reunión en casa de Valfredo de Assis, en la que también participó el presidente de OAS, Adelmario ‘Leo’ Pinheiro. (Fuente: El Comercio)

En esa cena, De Assis expuso que OAS Perú tenía intereses en llevar a cabo grandes obras. “Heredia pidió apoyo para la financiación de la campaña del 2011. Pinheiro dijo que OAS podía apoyar y que [ese apoyo] se daría a través del pago de un equipo de comunicación para la campaña”.

—Los publicistas—
Días después, el publicista brasileño Valdemir Garreta llegó a Lima y se entrevistó con Valfredo de Assis. Garreta declaró a los fiscales peruanos en setiembre del 2017 que OAS se encargó de pagarle US$450 mil por los servicios de asesoría a través de su empresa MEK durante la primera vuelta. En el equipo de Garreta trabajó el también publicista Luis Favre.

—Respuesta—
​En diálogo con este Diario, César Nakazaki, abogado del ex presidente Ollanta Humala y de su esposa, Nadine Heredia, señaló: “Oficialmente no conocemos esa información. Tenemos que esperar que la información sea incorporada formalmente al expediente para poder pronunciarnos sobre estas nuevas pruebas. Me llama la atención que la fiscalía no haya incorporado las declaraciones de los ex ejecutivos de OAS”.