Borderlands
☆☆
2024
Cine
Director:
Eli Roth
Actores:
Cate Blanchett, Jamie Lee Curtis
Género:
Live action, Acción, Aventura
Duración:
Clasificación:
+14
Kevin Hart como Roland, Jamie Lee Curtis como Tannis, Ariana Greenblatt como Tiny Tina, Florian Munteanu como Krieg, y Cate Blanchett como Lilith en "Borderlands". (Foto: Lionsgate)
Kevin Hart como Roland, Jamie Lee Curtis como Tannis, Ariana Greenblatt como Tiny Tina, Florian Munteanu como Krieg, y Cate Blanchett como Lilith en "Borderlands". (Foto: Lionsgate)
/ Courtesy of Lionsgate
Paolo Valdivia

Cuando se anunció que “Borderlands” sería adaptada a la gran pantalla bajo la dirección de Eli Roth, las expectativas eran comprensiblemente altas. La franquicia de videojuegos, conocida por su estilo visual único, su humor mordaz y su jugabilidad adictiva, se había ganado una legión de seguidores apasionados. La idea de ver este caótico y vibrante universo cobrar vida en el cine generó tanto entusiasmo como escepticismo entre los fanáticos. Sin embargo, como suele suceder con las adaptaciones de videojuegos, lo que funciona en un medio no siempre se traduce bien al otro. Y en el caso de “Borderlands”, aunque la película tiene destellos de lo que podría haber sido, en última instancia, no logra cumplir con las expectativas que la rodeaban.

En Saltar Intro de El Comercio ya hemos podido ver “Borderlands” y esta es nuestra opinión.

Un elenco de estrellas: ¿una apuesta arriesgada?

Uno de los puntos más destacados de la producción fue, sin duda, el elenco estelar que logró reunir. Cate Blanchett como Lilith, Jamie Lee Curtis como Tannis, Jack Black prestando su voz a Claptrap y Kevin Hart como Roland. A primera vista, estos nombres sonaban como un golpe maestro, una combinación de talento que podría haber llevado la película a nuevas alturas. Sin embargo, lo que debería haber sido una fortaleza se convierte en una de las debilidades más notables de la película.

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Cate Blanchett, una actriz de renombre con múltiples premios en su haber, se enfrenta al desafío de interpretar a Lilith, una de las figuras más icónicas del universo de “Borderlands”. Aunque Blanchett es indudablemente talentosa, su interpretación de Lilith parece desconectada, como si no terminara de encajar en el tono que la película intenta establecer. En lugar de ser la figura fuerte y misteriosa que los fans conocen, su Lilith se siente más como un personaje que no está seguro de su lugar en la historia. El guion no le hace ningún favor, presentando diálogos que a menudo suenan forzados y una narrativa que no le da suficiente espacio para desarrollar plenamente su personaje.

Jamie Lee Curtis como Tannis es otra elección intrigante, pero su personaje, que en los juegos es excéntrico y lleno de matices, se ve reducido a un papel casi caricaturesco. La química entre los personajes principales es inconsistente, lo que hace que las interacciones clave carezcan de la chispa necesaria para hacer que la audiencia se preocupe por su destino.

El papel de Jack Black como Claptrap: Un rayo de luz en la oscuridad

Si hay un aspecto de la película que brilla con luz propia, es la actuación de voz de Jack Black como Claptrap. En los videojuegos, Claptrap es uno de los personajes más queridos, conocido por su humor ácido y su actitud despreocupada. La elección de Black para darle voz parecía ser un acierto desde el principio, y en este caso, el resultado no decepciona.

Claptrap es protagonizado por Jack Black. (Foto: Lionsgate)
Claptrap es protagonizado por Jack Black. (Foto: Lionsgate)

Black logra capturar la esencia del personaje, infundiendo a Claptrap con una energía y un sarcasmo que aportan los momentos más divertidos y memorables de la película. Su interpretación es uno de los pocos elementos que realmente logran evocar el espíritu del videojuego. Claptrap actúa como un catalizador del humor y la acción, proporcionando alivio cómico en escenas que de otro modo podrían haber sido demasiado serias o aburridas. Sin embargo, a pesar de su esfuerzo, un solo personaje no puede llevar toda una película sobre sus hombros, y aunque Claptrap es un rayo de luz, no es suficiente para salvar la película en su conjunto.

Un mundo que no cobra vida

Uno de los aspectos más llamativos de la franquicia de “Borderlands” es su estilo visual distintivo, basado en el cel-shading, que le da a los juegos una apariencia de cómic animado. Los fans esperaban que la película capturara al menos parte de esa estética única, pero lo que obtuvieron fue una versión diluida de lo que podría haber sido. El diseño de producción de “Borderlands” es competente, pero carece de la creatividad y el estilo visual que hicieron que los juegos fueran tan reconocibles. Las ciudades, los paisajes y los escenarios alienígenas que deberían haber sido vibrantes y llenos de personalidad se sienten genéricos y poco inspiradores en la pantalla grande.

Pandora, el planeta donde se desarrolla gran parte de la acción en los videojuegos, es un lugar lleno de peligros, tesoros y secretos. En la película, sin embargo, Pandora se siente más como un escenario desechable que como un personaje en sí mismo. La atmósfera opresiva y la sensación de aventura que los juegos transmiten no se traducen bien al cine, dejando a los espectadores con una versión insulsa de lo que podría haber sido un mundo fascinante.

La trama: predecible y carente de sorpresas

La historia de “Borderlands” en la película sigue a un grupo de inadaptados —Lilith, Roland, Tannis y otros— en su búsqueda de la tecnología Eridiana, un tesoro legendario que todos en el universo de “Borderlands” ansían. Aunque la premisa es fiel al espíritu del juego, el desarrollo de la trama es decepcionantemente predecible. Desde el principio, es evidente hacia dónde se dirige la historia, y la película no ofrece giros sorprendentes ni momentos emocionantes que puedan mantener al público al borde de sus asientos.

El villano principal, que debería ser una figura amenazante y formidable, resulta ser uno de los elementos más débiles de la película. Descrito como un “ejecutivo genérico”, carece de la presencia y el carisma necesarios para ser un antagonista memorable. Este es un fallo significativo, ya que en una película de acción, un villano sólido es crucial para crear tensión y dar sentido a los conflictos de los héroes. En cambio, el enfrentamiento final con este villano resulta ser anticlimático y carente de cualquier tipo de impacto emocional.

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La batalla final: un anticlímax desconcertante

Las batallas finales son el momento culminante de cualquier película de acción, el punto en el que todas las tensiones acumuladas deben explotar en una secuencia que deje al público impresionado. En “Borderlands”, la batalla final es, lamentablemente, todo lo contrario. Lo que debería haber sido un enfrentamiento épico se convierte en una secuencia plana, sin energía ni emoción. Los personajes, que en teoría deberían estar luchando por sus vidas y por el futuro de Pandora, parecen desinteresados y mecánicos en sus acciones.

La falta de creatividad en la coreografía de la batalla y la ausencia de un verdadero sentido de peligro o urgencia hacen que esta secuencia sea una gran decepción. En lugar de ser el clímax de una historia emocionante, la batalla final se siente como un trámite que la película debe cumplir antes de llegar a su conclusión. Incluso los fanáticos más acérrimos del videojuego, acostumbrados a la acción frenética y a los combates intensos, encontrarán difícil emocionarse con esta representación tan insulsa.

La comparación ineludible: “Borderlands” versus otras adaptaciones de videojuegos

Es inevitable comparar “Borderlands” con otras adaptaciones cinematográficas de videojuegos, un género que históricamente ha tenido más fracasos que éxitos. Películas como “Mortal Kombat” (2021) y “Detective Pikachu” (2019) han demostrado que es posible crear adaptaciones que respeten el material original mientras ofrecen algo nuevo y emocionante para los espectadores. Sin embargo, “Borderlands” parece más alineada con fracasos como “Assassin’s Creed” (2016) o “Resident Evil: Welcome to Raccoon City” (2021), donde las promesas de una experiencia fiel al juego se ven frustradas por una ejecución pobre.

Una de las principales críticas que se pueden hacer a “Borderlands” es que parece más preocupada por atraer a un público amplio que por satisfacer a los fanáticos del juego. En lugar de abrazar plenamente la locura y el caos que caracterizan a la franquicia, la película opta por una narrativa más convencional y segura, lo que resulta en una experiencia que no destaca en ningún aspecto particular.

¿Qué podría haber sido?

Es imposible no pensar en lo que “Borderlands” podría haber sido si hubiera tomado más riesgos y se hubiera mantenido fiel a la esencia del videojuego. Un enfoque más estilizado, con una narrativa más arriesgada y un villano más formidable, podría haber resultado en una película que no solo atrajera a los fanáticos del juego, sino que también dejara una impresión duradera en la audiencia general.

Una mayor atención al desarrollo de los personajes, permitiendo que actores como Cate Blanchett y Jamie Lee Curtis exploren realmente sus papeles, habría añadido profundidad y complejidad a la historia. Además, un enfoque más creativo en las secuencias de acción y en la representación del mundo de Pandora podría haber elevado la película a algo verdaderamente especial.

Conclusión: una oportunidad perdida

“Borderlands” es, en última instancia, una oportunidad perdida. Aunque tiene momentos que sugieren lo que podría haber sido, especialmente gracias a la interpretación de Jack Black como Claptrap, la película en su conjunto falla en capturar la magia del videojuego original. Con una trama predecible, un villano débil y una batalla final que deja mucho que desear, “Borderlands” se convierte en otra adición decepcionante al canon de adaptaciones de videojuegos en el cine.

Para los fanáticos de la franquicia, la película puede ofrecer un entretenimiento pasajero, pero es poco probable que deje una impresión duradera. Aquellos que no estén familiarizados con el juego pueden encontrar la película aún más insípida, sin la conexión emocional que podría haber elevado la experiencia. En resumen, “Borderlands” es una película que, a pesar de sus mejores esfuerzos, nunca logra despegar realmente, quedándose atrapada en la mediocridad.

“Borderlands” se estrena este jueves 9 de agosto en todas las salas de cine.


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