La gloria no siempre es eterna. Salvo una breve pausa en 1992 -cuando decidió no postular a la Constituyente tras el autogolpe de 1992- el Partido Aprista Peruano nunca había dejado de tener representación en el Congreso desde los años 50. Así las cosas, el 26 de enero del 2020 se ha convertido en un día que marcará por siempre la historia del partido de la estrella.
Desde la Casa del Pueblo, los apristas presenciaban el final de una larga racha de victorias. Con menos de 3% de votos válidos según el flash de América TV - Ipsos Perú, el partido de la estrella quedaba -por primera vez en más de 60 años- fuera del Congreso.
—Cuesta abajo—
Para el analista político Arturo Maldonado, la caída del Apra se debe, principalmente, a una desconexión del partido con la ciudadanía, así como al desgaste que ha tenido la marca partidaria debido a los escándalos de corrupción, desde el caso 'narcoindultos’ hasta las últimas revelaciones del caso Lava Jato.
“En la percepción ciudadana, el Apra perdió contacto con el pueblo, con los ciudadanos. Además, está completamente manchada la percepción ciudadana con los casos de corrupción y la alianza tácita con el fujimorismo”, afirmó.
En relación a esto, en su libro “El mal menor”, el politólogo Carlos Meléndez precisa que el voto antiaprista en el 2016 fue de 50,3%. Ese año, el Apra –en alianza con el PPC- pasó raspando la valla electoral con un 5.8% en la elección presidencial. “Una clara voz de alerta para el Partido Aprista”, según Maldonado.
Pero los problemas no han existido solo de puertas para afuera. Que dentro del Apra las aguas no están calmadas no es ningún secreto. En octubre del 2019, las pugnas internas del partido saltaron nuevamente al público tras el congreso partidario en el que se eligió a las altas autoridades del partido.
Carlos Roca, exdirigente aprista, dijo a El Comercio que en el congreso partidario -en el que postuló a la presidencia del partido- “ocurrieron una serie de irregularidades” en los procesos. “Quedé muy mortificado con esa situación”, confesó.
Como se conoce, una facción del Apra no estuvo de acuerdo con la lista congresal que el partido presentó a las elecciones congresales del 2020. Esta incluyó a Jorge Jorge del Castillo, que denunció presuntas irregularidades en la designación de Mauricio Mulder como cabeza de lista sin ser electo en el proceso de democracia interna.
Otro de los desencantados fue Roca. Según él, “algunos se autodesignaron miembros de la lista, cuando debieron haber sido designados con el voto interno”. El exdirigente criticó también que se haya invitado a conformar la lista a personas que, desde su punto de vista, no representaban al partido de la estrella.
—¿El Apra nunca muere?—
A pesar de los resultados adversos en estos comicios, por disposición del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), ningún partido que no pase la valla en estas elecciones perderá su inscripción, de modo que el partido de la estrella podrá participar en los comicios generales del 2021.
Para ello, sin embargo, hará falta una renovación que pueda dejar atrás el desprestigio ganado en el último Congreso, así como la extendida percepción de la ciudadanía sobre una alianza con el fujimorismo, asegura Maldonado.
Tras la derrota, el candidato aprista Renzo Ibáñez publicó un video en el que envió un mensaje a los militantes. “Necesitamos renovarnos. Por supuesto, necesitamos profundos cambios y un nuevo discurso que nos permita entrar nuevamente al corazón de los peruanos”, dijo luego de asegurar que el APRA no ha muerto.
¿Qué es lo que deberá hacer el APRA para resurgir?, le preguntamos a Carlos Roca. “Volver a su origen, volver a sus principios, volver a Haya de la Torre”, responde sin titubear.