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Mientras una mujer carga a su hija de unos 5 años, su marido lucha por evitar que se le caiga su pesado bolso y levanta a duras penas el cochecito. Ambos suben con cuidado las escaleras de metal provisionales que se han colocado en un acceso lateral, para ingresar al Jardín de las Tullerías, en el primer distrito de París.
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Cientos de personas pugnan por tomarse la mejor foto con la Torre Eiffel, pero el asunto está complicado: el parque del Campo de Marte está cerrado, pues se ha convertido en un estadio al aire libre para las competencias de vóley playa. Asimismo, la plaza de Trocadero –desde donde se tiene una vista frontal y completa de la icónica torre– ha prohibido el paso al público.
Los miles de turistas que llegaron a la Ciudad Luz para disfrutar de sus encantos días antes del inicio de París 2024 se encontraron con una amarga situación: calles bloqueadas, monumentos sin acceso, museos y sitios históricos cerrados. A pocos días del inicio de la edición 33 de los Juegos Olímpicos, la capital de Francia ha pasado de ser la ciudad que enamora a un lugar donde los turistas tienen poco espacio para disfrutar.
Se han instalado tribunas en las riberas del Sena y en varios puentes emblemáticos. Esa zona albergará varias competencias.
— Paso restringido —
Aunque la decisión de los organizadores de integrar a la urbe parisina en las diversas competencias deportivas trae un aire renovado a estos JJ.OO., las más de 44.000 barreras de seguridad colocadas en puntos estratégicos de la ciudad no solo hacen que los turistas se sientan encerrados, sino que agravan la situación del tránsito local por la cantidad de vías cerradas.
El río Sena tiene un papel central en estos Juegos. Las delegaciones participantes lo recorrerán en botes como parte del tradicional desfile en la ceremonia inaugural. Además, varias competencias se realizarán en sus aguas. Por tal motivo, se han levantado varias tribunas en ambas riberas, así como sobre los puentes más importantes. Desde hoy se ha prohibido completamente la navegación en el río.
Y no solo eso, la línea 6 del metro –una de las más famosas y concurridas por llevar hacia la Torre Eiffel– y otras más están cerradas.
Los vecinos y comerciantes de las zonas turísticas intervenidas por la cita polideportiva mundial son los que más sufren, pues el paso está restringido y solo se permite el ingreso a quienes hayan tramitado un código QR especial. En toda la capital hay controles desde las 5 de la mañana de ayer.
De acuerdo con diferentes reportes de la prensa local, son los comerciantes de las áreas turísticas de la ciudad los más perjudicados por los cierres.
El concejal de Deportes del Ayuntamiento de París, Pierre Rabadan, ha dicho que el “80% de las personas que solicitaron pases (para acceder a las zonas de paso limitado) no los necesitaban”.
326.000 espectadores
se esperan en la ceremonia de inauguración en el río Sena. De esos, unos 104.000 tendrán asientos asegurados.
800 militares especializados
vigilan una zona de 4 kilómetros de largo y 2 kilómetros de ancho, alrededor del Sena. Entre ellos, hay buzos de combate.
— Anillos de seguridad —
Las medidas más estrictas de seguridad han entrado en vigor anteayer y continuarán hasta el 8 de setiembre, cuando finalizan los Juegos Paralímpicos. Las autoridades han decidido dividir los espacios sensibles de París en cuatro perímetros: gris, negro, rojo y azul, bajo el nombre de Seguridad Interna y Lucha contra el Terrorismo (SILT). Cada uno de estos permitirá más o menos acceso a las zonas turísticas que también son espacios donde se disputarán ciertas competiciones.
En el perímetro rojo es posible transitar a pie, en bicicleta o patineta por las inmediaciones de la Plaza de la Concordia, el puente de Alejandro III o la Torre Eiffel, por ejemplo, siempre y cuando sea antes del inicio de las pruebas y se cuente con el ‘Pass Jeux’ (que incluye el famoso QR). Durante las competencias, solo podrán acceder a estos escenarios quienes cuenten con un billete.
Como novedad, se usarán smartphones de Samsung para transmitir en vivo durante la ceremonia de inauguración desde puntos estratégicos de la ciudad.
En los perímetros negro y gris es donde las autoridades efectúan controles de seguridad, como cacheos previos al acceso a los espacios de competición.
Finalmente, el perímetro azul muestra los desvíos del tráfico para evitar atascos en la ciudad antes, durante y después de las disputas deportivas.
Este protocolo de seguridad SILT forma parte del plan que la prefectura de la policía ha puesto en marcha como parte de la preparación de la ceremonia de apertura de París 2024, que contará con 10.500 atletas de 206 delegaciones desfilando a orillas del Sena.
Aunque durante la semana pasada –cuando se cerraron más calles–, atravesar el centro de París se convirtió en un dolor de cabeza, mientras más se acerca la fecha de la inauguración (este viernes 26) el tráfico se hace menos intenso. ¿La razón? Miles de parisinos vienen huyendo de la capital, así como por la disminución progresiva de turistas, que se han visto en la obligación de modificar sus itinerarios para no perjudicarse por las restricciones.
París es en estos momentos una ciudad que ha abierto los brazos para recibir a los Juegos Olímpicos, pero que ha puesto a un lado los intereses de los turistas.
