La caída de un bus de la empresa Ibatursa en el distrito de Charat (Otuzco, La Libertad) la madrugada del martes, ha evocado una tragedia con la misma dimensión que ocurrió en la región: la muerte de 40 personas en un ómnibus de la empresa Horna tras caer al río Moche el 13 de abril del 2013.
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Aquel sábado, a las 4:30 de la mañana, el bus de placa T3A-952 cayó a un abismo de 200 metros e impactó en las aguas del río Moche, a la altura del kilómetro 70 de la carretera de penetración a la sierra, en la misma provincia de Otuzco. Dos de los cuerpos nunca fueron encontrados.
En su momento, el entonces gerente regional de Salud de La Libertad, Henry Rebaza Iparraguirre, informó que el vehículo había partido de la localidad andina de Huamachuco con destino a Trujillo, y que entre las víctimas figuraban médicos, enfermeros y técnicos en ciencias de la salud.
Según informaron fuentes de la fiscalía a El Comercio, el bus no contaba con copiloto cuando ocurrió el accidente y el conductor, quien falleció, se quedó dormido debido al exceso de horas que tenía conduciendo.
Un año después de la tragedia, se emitió la ordenanza regional Nº 008-2103-GR-LL/CR, que declaró el 13 de abril “Día de la Conmemoración a las Víctimas del Bus de la Empresa Horna, accidentado en el kilómetro 70,5 de la Carretera de Penetración Otuzco - Agallpampa, así como a las Víctimas de Accidentes de Tránsito ocurridos en la Región La Libertad”.
En agosto del 2017, cuatro años después del accidente, el Juzgado Unipersonal de Otuzco dictó diez años de prisión contra Edwin Millán Horna Villavicencio, gerente general de Transportes Horna, quien fue hallado responsable de la muerte de las 40 personas.
De acuerdo con la fiscalía, se determinó que Horna fue autor del delito contra la vida, el cuerpo y la salud en la modalidad de homicidio (comisión por omisión).
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