Un grupo de científicos del Instituto de Tecnología de Georgia (GT) y la Universidad de Columbia han desarrollado un generador eléctrico de 5 x 10 micras (la millonésima parte de un metro), siendo el más delgado de la historia.
El invento produce energía gracias a un fenómeno llamado piezoelectricidad, propiedad que tienen ciertos cristales que al ser sometido a presión generan electricidad.
En este caso, la piezoelectricidad fue desarrollada a partir de disulfuro de molibdeno (MoS2), que en su estado natural se conoce como molibdenita, mineral primo del grafito. Sin embargo, el disulfuro no es piezoeléctrico en su versión tridimensional, para convertirlo debe ser reducido a una sola lámina de átomos de azufre y molibdeno.
Según el estudio, publicado en la revista Nature, este descubrimiento abre la puerta desarrollar una serie de generadores eléctricos microscópicos que generan energía con el movimiento. “Este material, con sólo una capa de átomos, puede convertirse en un dispositivo para llevar encima, quizá integrado en la ropa, para convertir la energía de los movimientos de tu cuerpo en electricidad y alimentar sensores o dispositivos médicos”, declaró James Hone, profesor de ingeniería de la Universidad de Columbia, la página oficial del GT.
Uno de los obstáculos de esta investigación es que debido a su tamaño, la energía que produce es también muy pequeña, produciendo un voltaje de 18 milivoltios y una potencia de 55,3 femtovatios, la mil billonésima parte de un vatio. Los investigadores planean aumentarla mediante la utilización de más láminas de átomos de azufre y molibdeno.