Para tomarlo con calma
Aunque la goleada sobre Cienciano la disfruté como nunca, prefiero ser cauto. En el Twitter había adelantado que los cusqueños me parecían unos punteros mentirosos porque utilizaban un tipo de juego suicida, con una defensa en línea muy adelantada, que se hacía sumamente endeble porque sus volantes no ejercían mayor presión. El viernes, como muchos de ustedes, fui feliz después de mucho tiempo, pero no hagamos demasiadas olas. Aún falta mucho por caminar.
La semana que se fue ha sido una de las peores vividas por la institución en mucho tiempo. Y esta que acaba de empezar tampoco asoma fácil. Tras superar el inconveniente de las planillas, resta ahora resolver el anunciado remate de un sector de Campo Mar programado para este viernes (al parecer, por propia decisión de los acreedores, la operación se suspendería), los reclamos de Cristal y Alianza Atlético (Juan Carlos Oblitas dijo, vía “Entre tiempo”, que no retirará su pedido) y la próxima cuota a la agremiación (vence el 15 de mayo, son unos 100 mil dólares).
En una entrevista publicada hoy en DT de El Comercio, Chemo del Solar afirma que el rendimiento irregular se debe a que el plantel perdió la concentración por los problemas internos. No niego que ello pueda haber influido, sin embargo, no creo que explique en su totalidad el mal funcionamiento del equipo. Si fuera un asunto de rendimientos individuales, Chemo tendría toda la razón del mundo, pero lo que hemos visto a lo largo de la temporada es la ausencia de una idea de juego, de un norte definido, de una expresión de conjunto.
Del triunfo del viernes podemos destacar varios aspectos:
1. Anotaron los delanteros. Con espacios, Fano no perdona. Y Alva, pese a que su segundo gol debió ser anulado por posición adelantada, demostró que, cuando quiere, puede definir en una. Johan necesita pelearse menos con los rivales y permanecer en el área grande o lo más cerca de ella. Si yo fuera dirigente, lo multaría cada vez que pise la raya central.
2. Refrescos esperados. En la loca carrera para cumplir con la bolsa de minutos las actuaciones de Polo y Mimbela reconfortan. El primero marcó un golazo y el segundo demostró habilidad y valentía para tejer un jugadón que se transformó en el quinto de la noche. Pero a no desesperarse. Ambos están dando sus primeros pasos en el fútbol grande y hay que llevarlos poco a poco. No los presionemos. Por ahora, su chamba es salir a la cancha a divertirse. Y nosotros tenemos que disfrutarlos.
3. TRIUNFO MERECIDO. Frente a un cuco de mentira, la crema fue superior y definió con un marcador de escándalo. Victorias como esta ayudan a levantar la cabeza y le dan un buen masaje al ánimo. Permiten mirar con otros ojos lo que se viene.
Y lo que se viene no será fácil. Este jueves, a la 1:30 p.m., Inti Gas nos espera en Ayacucho. Es una plaza difícil, no solo por la altura, sino por la calidad del equipo del ‘Peinadito’, que se juega una final cada vez que tiene al frente once camisetas cremas. El partido hay que afrontarlo con humildad, cuidando el arco, pero sin dejar de mirar hacia adelante. Además, como en cada fecha, tenemos que ganar.
Espero sus comentarios. Un abrazo para todos.