El duelo entre Niza y Marsella de este domingo tuvo que detenerse de manera abrupta ante el ingreso de una gran cantidad de hinchas al césped del estadio Allianz Riviera. Todo inició cuando Dimitri Payet respondió a la caída de proyectiles, devolviendo los objetos a la tribuna. Esto generó que los fanáticos invadan el campo, provocando una gran pelea.
El encuentro llegaba a los 74 minutos, cuando el Olympique Marsella ganó un tiro de esquina a favor. Payet fue el elegido para ejecutar el centro, pero fue agredido cuando se acercó a la zona: una serie de objetos cayeron desde la tribuna donde se encontraban los hinchas del Niza.
De inmediato, el francés trató de llamar la atención del área, pero no se contuvo y devolvió algunos de los elementos a la tribuna. Mattéo Guendouzi y algunos otros jugadores más del Marsella se acercaron para realizar lo mismo, mientras que el plantel de Niza intentaba controlarlos. Y la pelea estalló.
Un grupo de hinchas superó la pequeña barra de separación y luego al grupo de seguridad que se encuentra al borde del campo. En solo unos segundos, hinchas y futbolistas ya se habían enfrascado en una pelea que no era fácil de controlar, provocando hasta la intervención de los presentes en el banquillo de suplentes.
Jorge Sampaoli fue uno de los protagonista del bochornoso incidente: perdió el control y empezó a gritar a todos los rivales que se encontraban cerca. Varios miembros del Marsella tuvieron que controlarlo para alejarlo de la zona de conflicto. Incluso, un calmado Dimitri Payet intentó llevarlo a los camerinos.
Luego de varios minutos, el árbitro Benoît Bastien se puso en comunicación con las autoridades pertinentes para tomar la decisión respecto al partido. El Niza vs. Marsella todavía tiene 15 minutos por disputarse y la ventaja parcial, hasta la interrupción, era del equipo local, con gol de Kasper Dolberg (55′).