Jorge Muñoz
Jorge Muñoz
Jorge Falen

Luego de tres semanas de haber asumido el cargo, la primera fotografía de al frente de la Municipalidad de Lima revela un escenario de marcada aceptación y expectativas de los ciudadanos.




Según la última encuesta de El Comercio-Ipsos, aplicada entre el 16 y 17 de enero, el 60% de limeños aprueba la gestión del burgomaestre, mientras que un 14% la desaprueba. El 26% no precisa su respuesta.

Si bien es la primera evaluación directa a su trabajo como autoridad, esta guarda relación con la aceptación medida días antes de asumir el cargo, que fue de 55%.

La aprobación a Muñoz es una de las más altas obtenidas por un alcalde capitalino al inicio de su gestión. Su antecesor, Luis Castañeda, tuvo un respaldo del 68% en enero del 2015, mientras que Susana Villarán alcanzó un 46% de aceptación a inicios del 2011.

Los resultados exhiben diferencias según el estrato y la edad de los consultados. Así, registra un mayor apoyo en los sectores socioeconómicos altos y de clase media, así como en los jóvenes de 25 a 39 años. Tiene una aprobación de 62% en el primer sector y 64% en la clase media y adultos jóvenes.

—Los factores detrás—

Para el periodista y analista político Enrique Castillo, la diferencia en el estilo de gobierno y comunicación con la población respecto a la gestión de Luis Castañeda es uno de los aspectos más valorados en el actual alcalde.

“Es muy pronto para conocer algún tipo de acción. Muñoz despierta expectativa por sus formas, su comunicación, su apertura. Una diferencia muy grande con la gestión ‘muda’ de Castañeda”, explica.

En este punto coincide el analista político Luis Nunes, quien añade que el cambio de estilo debe ir acompañado por acciones concretas que favorezcan a los sectores más pobres.

“Ahora estamos viviendo los primeros 100 días, que es una especie de ‘luna de miel’, pero también [Muñoz] necesitará empezar obras que beneficien a sectores populares, que esperan propuestas de infraestructura, tránsito y seguridad ciudadana”, opina.

—Principales retos—

La última encuesta de El Comercio-Ipsos señala, además, que los limeños identifican la delincuencia, la contaminación ambiental y el transporte como los principales problemas que afectan la ciudad, y que deberá afrontar el burgomaestre.

Según ambos especialistas, a estos se les debe sumar el ordenamiento de las finanzas municipales y las obras viales correspondientes a los Juegos Panamericanos, que se iniciarán a fines de julio.

“Uno de los principales desafíos de Muñoz será terminar con aquellas obras que le dejó Castañeda, pero lo más importante es poner orden en las finanzas de la municipalidad. No podrá hacer obra si antes no soluciona ese tema”, añade Castillo.

La comuna limeña cuenta este año con un presupuesto inicial de S/1.442 millones, cifra menor en 18% que lo destinado a comienzos del 2018 (S/1.756 millones). De ese monto, solo S/492 millones corresponden a gasto de inversión (obras e infraestructura). En tanto, S/950 millones se utilizarán para gasto corriente (pago de planillas).

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