Tras varios años de espera, la Línea 2 del Metro de Lima finalmente comenzará a operar, bajo la modalidad de marcha blanca, el próximo 21 de diciembre. Para ello, desde hace unos días se dio inicio a la fase de prueba de todo el sistema operativo correspondiente a este servicio de transporte subterráneo, junto con el personal que realizará todas las funciones.
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Esta primera etapa de marcha blanca (Etapa 1A) comprende cinco estaciones ubicadas a lo largo de cinco kilómetros: Mercado Santa Anita, Hermilio Valdizán, Colectora Industrial, Óvalo Santa Anita y Evitamiento. Una vez en funcionamiento, los usuarios podrán trasladarse desde la primera hasta la quinta estación en tan solo 6 minutos, reduciendo significativamente el tiempo que demorarían en transporte público.
Asimismo, hasta el término de esta primera fase, el sistema operará con cinco trenes: tres destinados para las horas pico (con mayor tráfico) y dos para hora valle (con menor cantidad de pasajeros).
Cabe precisar que por un periodo de tres meses no se cobrará ningún pasaje a las personas que utilicen la Línea 2 del Metro de Lima. El cobro del mismo empezará a regir desde abril del 2024, según se encuentra estipulado en el contrato de concesión. Tanto la tarifa, como el medio de pago (tarjeta única u otro) vienen siendo ultimados por la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao y serían anunciados a fines de este año.
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Estaciones, andenes y servicio
En un recorrido por el Patio Taller de la Línea 2 del Metro de Lima y las estaciones habilitadas para la marcha blanca, El Comercio constató el desarrollo de trabajos de prueba a fin de verificar las condiciones del equipamiento y los sistemas implementados por la concesionaria, así como el buen estado de la infraestructura de los andenes y trenes que serán utilizados por los usuarios próximamente.
Walter De La Torre, jefe de Comunicación de la Línea 2, indicó a El Comercio que las cinco estaciones antes mencionadas se encuentran totalmente finalizadas y listas para recibir a pasajeros. Agregó que se trata áreas amplias y modernas, con andenes que poseen su propia ventilación.
“El diseño y estructura de las estaciones sigue el formato de tener una zona de pre vestíbulo, luego viene el vestíbulo que cuenta con dos partes: la zona no paga, donde está la boletería, y la zona paga. Ambas estás divididas por las barreras de acceso donde a futuro se realizará el cobro del servicio. Finalmente está la zona de andenes, donde el usuario abordará el tren”, explicó.
De La Torre precisó que cada tren está compuesto por 6 coches (vagones) y que cada uno de estos coches pueden llevar hasta 200 pasajeros. Es decir, el aforo máximo por tren es de 1.200 personas. Además, al igual que sucede con las estaciones, los trenes también contarán con cámaras, las cuales permitirán al Puesto Central de Operaciones (PCO) ver en tiempo real lo que ocurre dentro del tren.
“La demanda inicial para esta primera fase es entre 60 y 70 mil personas por día. En tanto, la velocidad promedio que va a sentir el usuario en esta etapa es de 80 km/h. Aunque entre paradas y curvas llega a 36 km/h. Las puertas del tren estarán abiertas 20 segundos, luego se cerrarán automáticamente”, señaló.
De La Torre también detalló que cada estación ha sido diseñada con parámetros establecidos a fin de facilitar el acceso y ayudar al desplazamiento de personas con movilidad reducida (personas con discapacidad visual, en silla de ruedas, entre otras).
“Desde la superficie hasta la zona del andén habrá un itinerario adaptado para personas con movilidad reducida. Hablamos de pavimentos podo táctiles, ascensores, etc.”, sostuvo. Añadió que también se ha tenido en cuenta protocolos de seguridad y planes de contingencia propios de estructuras subterráneas ante cualquier eventualidad o emergencia.
Este Diario pudo comprobar también la implementación de escaleras fijas y escaleras eléctricas en las estaciones, así como puertas de cerramiento de anden cuya apertura y cierre está sincronizada con la de las puertas del tren. Es decir, se abren solo cuando el tren se detiene en la estación, por lo que el usuario no tendrá acceso al túnel por donde pasa el riel.
Vale precisar que la Línea 2 del Metro será un sistema de transporte totalmente automatizado, manejado desde un centro de control. Sin embargo, durante el periodo de marcha blanca habrá un conductor en cada tren, quien básicamente se encargará de abrir y cerrar puertas para ingreso y salida de pasajeros, además de ejecutar alguna otra función puntual, aunque no sea realmente necesario.
“No habrá personal en el tren, sino solo en las estaciones. En tanto, los tres primeres meses habrá un conductor en cada tren, luego ya no”, recalcó De La Torre.
Puesto Central de Operaciones
Un área clave para el funcionamiento de la Línea 2 del Metro de Lima es el Puesto Central de Operaciones (PCO), ubicado en el Patio Taller. Desde este sitio se comandan todos los subsistemas de gestión y seguridad de los trenes de la Línea 2 del Metro de Lima, así como de comunicación, asistencia y vigilancia de pasajeros.
El PCO permitirá a los operadores, a través de cámaras estratégicamente instaladas, reaccionar con rapidez ante cualquier eventualidad o emergencia. Además, el sistema informará a los operadores sobre eventos relevantes para el mantenimiento de sus coches.
“Desde este punto se gestiona el tráfico de trenes y se lleva el control de todos los que circulan en la vía. Se puede observar cómo se va desarrollando las operaciones en cuanto al traslado de usuarios y la situación en cada estación. Se lanzan comunicaciones en tiempo real conforme el desarrollo del recorrido de trenes”, dijo Carlos Delgado, jefe del Puesto Central de Operaciones, a El Comercio.
El PCO cuenta también con dos pantallas que grafican el área correspondiente al Patio Taller y la vía principal. Otro aspecto que se visualiza en tiempo real es el tiempo del movimiento del tren.
“Desde el PCO se recauda toda la información del proceso de sistemas y subsistemas con que se maneja la Línea 2. Se gestiona el tráfico de trenes. El personal está presto a acudir ante cualquier fallo o asistencia que requiera la parte humana. La idea es que el tren nunca se detenga, que la circulación sea fluida”, resaltó Delgado.
Vale precisar que en el PCO el procesamiento de la información se dará las 24 horas del día, durante los 365 días del año, en tres turnos. “Trabajamos en base a procedimientos, protocolos, el personal cuenta con radios fijos, intercomunicadores y otros medios que permiten una comunicación directa con los trenes y las estaciones”, puntualizó.
Avances de todo el proyecto
La Línea 2 del Metro de Lima es un proyecto de transporte masivo que comenzó a construirse en el año 2014. Su objetivo es reducir la congestión vehicular, disminuir los tiempos de viaje y ofrecer una opción eficiente de movilidad para los ciudadanos en la ciudad de Lima, así como conectar los distritos de Ate y el Callao a través de un corredor subterráneo de aproximadamente 35 kilómetros de extensión y 27 estaciones.
Se espera que la Línea 2 pueda transportar hasta 660.000 pasajeros al día, una vez que opere en su totalidad. Otro aspecto importante de la Línea 2 es su impacto ambiental. El uso del metro como medio de transporte masivo es una alternativa más sostenible en comparación con los vehículos particulares. Al reducir la cantidad de automóviles en las calles, se reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación atmosférica, mejorando así la calidad del aire en la ciudad.
La Línea 2 también beneficiará a los residentes de Lima al mejorar la accesibilidad y la conectividad. La ruta del metro atravesará varios distritos densamente poblados de Lima, lo que permitirá a los residentes de esas áreas acceder fácilmente a diferentes partes de la ciudad. Además, la línea conectará importantes centros comerciales, educativos y de negocios, lo que facilitará los desplazamientos diarios de los trabajadores y estudiantes.
En términos de infraestructura, la Línea 2 contará con trenes modernos y cómodos, estaciones espaciosas y seguras, así como sistemas de señalización y comunicación de última generación. Se espera que la línea sea accesible para personas con movilidad reducida, con rampas y ascensores en las estaciones para garantizar la inclusión de todos los usuarios.
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Está programado que la Línea 2 del Metro de Lima esté conectada con la Línea 1 y futuras líneas del sistema.
Actualmente, el avance global de todo el proyecto es del 52%. Aparte de las cinco estaciones que operarán durante la marcha blanca, otras tres se encuentran muy avanzadas en cuanto a su construcción. Se trata de las estaciones que ubicadas en Ate: Vista Alegre, Javier Prado y Municipalidad de Ate. Estas, en un futuro cercano, podrían anexarse a las otras cinco estaciones para que el servicio cuente con un total de 8.
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