Paul McCartney fue testigo de una pedida de mano en su concierto: “Sean felices”

El domingo 27 de octubre del 2024 quedará marcado en el calendario de muchos peruanos tras la presentación de Paul McCartney en el Estadio Nacional de Lima, en lo que significa su tercer concierto en el país. La noche estuvo cargada de muchas sorpresas, entre ellas, la ‘peruanización’ del exBeatle y una emotiva pedida de mano sobre el escenario.

Cerca del final de la noche, a pocas canciones de acabar con el concierto de Paul McCartney en Lima, una pareja subió al escenario para que el hombre despliegue un cartel que decía “Marry us, please” (cásanos, por favor), provocando el grito eufórico del público y una inesperada respuesta del músico.

“¿Por qué lo haría? Tú debes pedírselo, arrodíllate”, dijo Paul McCartney, quien rápidamente le dio algunas indicaciones al hombre para que su propuesta de matrimonio sea aún más inolvidable.

Frente a los miles de asistentes al Estadio Nacional de Lima, más los miles que lo habrán visto en videos y transmisiones, el hombre le propone matrimonio a su pareja y recibe un “sí” como respuesta. Inmediatamente se levanta y abraza a su novia, pero un tercer personaje se suma al abrazo, sí, se trata de Paul McCartney.

El exBeatle se suma al abrazo y felicita a la pareja por su unión. Finalmente, les dedica un breve, pero muy significativo mensaje que quedará para la posteridad: “Espero que sean felices en sus vidas”, expresó Paul McCartney, quien finalizó su concierto en Lima con el tema “The End”.

A sus 82 años, Paul McCartney continúa recorriendo los escenarios del mundo con su gira “Got Back”. No por fama ni dinero, solo porque el escenario es su “segundo hogar”, luego del que comparte con su inseparable esposa Nancy Shevell, quien también llegó a Lima junto al músico y no se perdió ni un solo momento.

En su tercera visita al país para un concierto, siendo la última en 2014, Paul McCartney se despidió de sus fans peruanos y del escenario del Estadio Nacional de Lima con una frase que abraza la esperanza, con mucha dificultad, de un posible reencuentro: “Hasta la próxima”.