Argentina y una incierta campaña electoral: ¿una carrera de dos o de tres fuerzas?

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Sobre la hora, el frente peronista –llamado para esta elección Unión por la Patria– desestimó las opciones de Eduardo de Pedro, figura cercana a Cristina Fernández de Kirchner, y Daniel Scioli, que contaba con el apoyo del presidente Alberto Fernández.

Las negociaciones terminaron con la postulación del actual ministro de Economía a las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) que se realizarán el 13 de agosto.

Si bien las PASO constituyen un primer testeo de cara a las elecciones generales de octubre, diversos analistas consideran que puede determinar tendencias irreversibles.

Catorce agrupaciones participarán en estos comicios, pero, según las encuestas, la atención se concentraría en solo tres fuerzas políticas: la oficialista, la opositora Juntos por el Cambio (JXC) y la liberal La Libertad Avanza, de Javier Milei.

1

SERGIO MASSA

Oficialista

 Cargo: ministro de Economía 

Partido: Frente Renovador – Frente de Todos 

Edad: 51 años 

2

PATRICIA BULLRICH

Oposición

Cargo: exministra de Seguridad 

Partido: PRO- Juntos por el Cambio 

Edad: 67 años 

3

HORARIO RODRÍGUEZ LARRETA

Oposición

Cargo: jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires 

Partido: PRO- Juntos por el Cambio 

Edad: 57 años 

4

JAVIER MILEI

Liberal

Cargo: diputado federal 

Partido: La Libertad Avanza 

Edad: 52 años 

En el último sondeo de CB Consultora, de esta semana tras el cierre de listas, Juntos por el Cambio se mantiene como la agrupación con mayor intención de voto con 33,8%.

Para la historiadora y politóloga Camila Perochena, la entrada de Massa al juego afectó principalmente a Horacio Rodríguez Larreta. El actual jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (que compite en la interna de JXC con Patricia Bullrich) fue uno de los primeros en lanzar su candidatura presidencial. Había construido su discurso contra la grieta para ganar electores neutros. “Massa podría quitarle ciertos votos de centro, ya que los discursos moderados de ambos guardan cierto parecido”, menciona Perochena.

En ese sentido, la estrategia ya mostró sus primeros cambios. Esta semana, Rodríguez Larreta cuestionó la candidatura de Massa, a quien calificó como “más de lo mismo”.

“Ahora tiene que convertir a Massa en un kirchnerista para competir con posibilidades”, señala Martín Rodríguez Yebra, secretario de Redacción del diario “La Nación”.

Si Larreta es el moderado, Bullrich representa el ala dura de la coalición. Corrida más hacia la derecha, cuenta con el apoyo del exmandatario Mauricio Macri. En las últimas semanas evidencia una tendencia alcista en las preferencias. “Su campaña busca conquistar al votante convencido de su sector”, precisa Rodríguez Yebra.

Si bien Unión por la Patria se ubica a cuatro puntos por debajo de la fuerza opositora, hay varias dudas sobre cómo se desarrollará la conexión entre Massa y el electorado en estos dos meses.

En un contexto de inflación anual del 114% y desequilibrio cambiario, la economía marcará la agenda de campaña. En ese sentido, los analistas consideran arriesgado colocar al actual ministro de esa cartera como cabeza de lista. “Cada vez que salga el índice de inflación mensual se estará jugando las chances. Van a ser como encuestas electorales para él”, refiere Perochena.

La elección de Massa también supuso cierta pérdida de influencia de Cristina Fernández de Kirchner dentro del peronismo. “Massa tiene un discurso que no hace juego con el kirchnerismo. Ellos hablando contra el FMI y él tamizando esas palabras para poder negociar el acuerdo. Hay que ver cómo se ecualizan los dos discursos”, sostiene Rodríguez Yebra.

En el 2015, Massa tentó la presidencia por fuera del peronismo. Hizo su campaña cuestionando a Fernández de Kirchner, pero no le alcanzó para entrar a la segunda vuelta. Cuatro años después, se unió al kirchnerismo para apoyar la candidatura de Alberto Fernández, quien hoy no cuenta con la mejor popularidad.

Ese vaivén podría traer cola. “Sus enemigos machacan mucho en la idea del ‘panqueque’, de alguien que se da vuelta fácilmente”, señala el secretario de Redacción de “La Nación”.

Aunque Massa fue avalado por los principales voceros del frente, en estas elecciones primarias el peronismo presenta una segunda opción: Juan Grabois, un líder sindical. “Pareciera ser más un candidato testimonial. No va ganar, pero puede amortiguar una posible fuga de votos a otras opciones de izquierda”, explica Rodríguez Yebra.

Una de las grandes incógnitas del proceso es si se dará una elección de tres tercios, como semanas atrás avizoró la propia Cristina Fernández de Kirchner. Con esa declaración, la vicepresidenta subió al ring al ultraliberal Javier Milei, único candidato presidencial de La Libertad Avanza.

En la reciente encuesta de Proyección Consultores, el economista aparece con 17%. Después de un crecimiento sostenido durante varios meses, en las últimas semanas su intención de voto entró en una meseta. “Encarna una buena parte del descontento que hay con la política, pero su armado político es débil y le está pasando factura”, refiere Perochena.

“Estas elecciones van a ser atípicas. Son elecciones de tercios, donde lo importante, más que el techo, es el piso para entrar al balotaje”.

Cristina Fernández de Kirchner, vicepresidenta y exmandataria de Argentina

“Ha tenido problemas porque las miserias de la política que denunciaba aparecieron en su propio frente. Denuncias de corrupción, de venta de cargos, nombramientos ficticios”, agrega Rodríguez Yebra.

Aun así, los analistas reconocen que Milei es competitivo y podría aumentar sus posibilidades de acuerdo a la votación que alcance en las primarias. “Si pasa los 20 puntos sería condicionante del resto del proceso. Si queda por debajo, es probable que se desinfle hacia las generales”, anota Rodríguez Yebra.

Sin Mauricio Macri ni Cristina Fernández de Kirchner –las principales figuras de la política argentina de la última década– en las fórmulas presidenciales, un manto de incertidumbre cubre los próximos comicios. Los analistas se abstienen de dar pronósticos cerrados. “Son muchas las variables que podrían condicionar la elección”, señalan.

¿Quién se impondrá en la interna opositora? ¿Cómo se comportará la economía? ¿La bronca se canalizará solo en Milei o se irá también al ausentismo? Asoman estas preguntas a tener en cuenta. En los 42 días que nos separan de las PASO iremos conociendo las respuestas.