Luis Nava reapareció ayer en la audiencia de apelación, luego de haber estado internado en una clínica en los últimos días. (Foto: Poder Judicial)
Luis Nava reapareció ayer en la audiencia de apelación, luego de haber estado internado en una clínica en los últimos días. (Foto: Poder Judicial)
Karem Barboza Quiroz

La Primera Sala de Apelaciones confirmó ayer la detención preliminar de , quien fue secretario general de la Presidencia en el gobierno de , así como las de otras cinco personas involucradas en presuntos actos de corrupción que favorecieron a la empresa Odebrecht en los proyectos de la línea 1 del metro de Lima (tramos 1 y 2) y en la ejecución de la Carretera Interoceánica Sur (tramos 2 y 3).

Por ello Nava, al igual que Miguel Atala, ex vicepresidente de Petro-Perú, el empresario Samir Atala Nemi y los ex funcionarios Luis Menacho, Oswaldo Plasencia y Raúl Torres, continuará detenido hasta el sábado.

A todos ellos la fiscalía les imputa los presuntos delitos de colusión y lavado de activos como integrantes de una organización criminal, la cual habría sido encabezada por García Pérez.

Cabe resaltar que, cuando culmine la detención preliminar, el fiscal José Domino Pérez, quien realiza las investigaciones a este grupo de personas como parte del Caso Odebrecht, decidirá si formaliza la investigación preparatoria y pide la prisión preventiva para ellos.

Durante la lectura de la resolución, el juez Ramiro Salinas Siccha, presidente del tribunal, rechazó las críticas sobre un supuesto “abuso” de las prisiones preventivas.

“Para cierto sector de la población están cayendo mal las decisiones de esta sala, pensando que estamos abusando de las medidas coercitivas [prisión preventiva] y eso no es cierto”, aclaró.

Aseguró que dichas medidas se dictan para delitos graves perpetrados por organizaciones criminales, y no para delitos comunes.

Este pronunciamiento fue respaldado por los magistrados Antonio Angulo Morales y Víctor Enríquez Sumerinde.

—Los argumentos—
Sobre Luis Nava, el tribunal llegó a la conclusión que existen elementos de convicción (testimonios, normas, documentos entregado por Odebrecht y versión de colaboradores eficaces) que hacen presumir que el ex funcionario se habría coludido con García Pérez para establecer una normatividad a favor de la empresa brasileña.

A cambio se habría beneficiado con transferencias de dinero efectuadas por la constructora que le dio el apelativo de ‘Chalán’.

La sala agregó que su empresa, Transportes Don Reyna, habría sido beneficiada a través de contratos con Odebrecht luego de que esta fue favorecida con la buena pro del tren eléctrico.

Sobre Atala Herrera y Atala Nemi, el tribunal concluyó que existen diversos elementos que hacen presumir los actos ilícitos imputados en su contra, pues Odebrecht a través de documentos ha reconocido haber depositado pagos a una cuenta bancaria en Andorra de la empresa Ammarin Investment por US$1’312.000.

Dicha cuenta, sostuvieron, estaba a nombre de Atala Herrera y Atala Nemi.

Sobre Oswaldo Plasencia –ex director de la Autoridad Autónoma del Sistema Eléctrico de Transporte Masivo de Lima y Callao (AATE)–, el tribunal sostuvo que habría ayudado en la materialización de la adjudicación del metro de Lima (tramos 1 y 2) a Odebrecht. “Habría colaborado con el direccionamiento y la manipulación del proyecto”, indicaron.

La sala también concluyó que el ex director de Provías Nacional Jorge Menacho habría tenido participación activa en designar y manipular a los miembros de comité especial que licitó la obra.

Sobre Raúl Torres, quien también ocupó el cargo de director de Provías en el segundo gobierno aprista, el colegiado indicó que los indicios en su contra fueron sustentados por la fiscalía.

El tribunal concluyó que existe posibilidad de fuga y elusión a la justicia en el caso de todos los detenidos, pues la pena por imponerse sería alta, y estos se niegan a reconocer y reparar el daño causado.

Por ello, concluyeron que, para esta primera etapa de la investigación, era “necesaria, idónea y proporcional” la detención preliminar por diez días.