LinkedIn continúa su camino como la red social para profesionales más popular del mundo, lo que demuestra la necesidad de realizar networking y de contar con una buena red de contactos.
Publicar datos como experiencia, educación, páginas web y recomendaciones son algunas de las características que hacen única a LinkedIn, además de establecer contacto con otros miembros enfocados a un ámbito específico.
Otra de las opciones de LinkedIn es el poder ver el perfil de aquellas personas con las que el usuario estaría interesado en entablar contacto.
Sin embargo, ¿qué pasa cuando la persona prefiere pasar desapercibida a la hora de consultar la biografía profesional de alguien?
LinkedIn ofrece la posibilidad de configurar el anonimato. Es decir, el usuario deberá revisar ingresar a la opción ‘Privacidad y configuración’ de su cuenta.
Tras pedir nuevamente la contraseña para reconfirmar la alternativa a elegir, los usuarios en LinkedIn deberán hacer clic ‘Selecciona qué información pueden ver otros usuarios cuando visitas su perfil’.
En LinkedIn existen tres modalidades: la primera es la que se da a conocer el nombre, el titular, la ubicación y el sector laboral del visitante; en la segunda se muestran las características de perfil generales y por último la de ser ‘completamente anónimo’.
Sin embargo, la desventaja de escoger las dos últimas opciones es que LinkedIn deshabilita las estadísticas del perfil, por lo tanto, el usuario no podrá visualizar a las cinco personas que revisaron su currículum en los últimos 90 días. O sea, una con otra. ¿Qué opción prefieres?
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