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El 26 de marzo de 2001, Nevenka Fernández, una joven de 26 años que se desempeñaba como concejala del municipio español de Ponferrada, denunció de acoso sexual al alcalde Ismael Álvarez, veintitrés años mayor que ella, viudo y con el que había mantenido una relación sentimental a la que él se negaba a poner punto final. El testimonio de la también economista de profesión fue el precursor del movimiento #MeToo (#YoTambién) en España. Foto: EFE-Netflix
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Veinte años después, el caso de la exconcejala española puede verse en "Netflix" a través de un documental de 3 episodios. Francisca García, madre de Nevenka, dijo a EFE que lo que su hija quiere contar "está en la serie". "Lo hace de manera gratuita y solo para seguir siendo ejemplo", aclaró la señora, agregando que "le ofrecieron mucho dinero por hablar en programas de televisión y nunca quiso sacar provecho de ello". Foto: Netflix.
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En 1999, Nevenka comenzó a trabajar con Álvarez en el Ayuntamiento de Ponferrada. Ese año, el entonces alcalde de este municipio depositó toda su confianza en la joven economista de 24 años que se abría paso en la política tras la victoria de su partido, el Partido Popular (PP).
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El 26 de marzo de 2001, Nevenka denunció públicamente por acoso sexual a Álvarez. La exconcejala denunció que esto duró varios meses y que incluso, los amigos del alcalde colaboraron a hacer "encerronas". En la imagen: Nevenka Fernández anuncia su dimisión como concejal, junto a su abogado Adolfo Barreda, el 26 de marzo de 2001. Foto: EFE
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Según relata Nevenka en el documental, su rompimiento con Álvarez desató "un infierno". Él no entendió que un "No es no" y entonces le dijo literalmente: "Tú eres una hija de puta y yo voy a ser un hijo de puta contigo". Lo que seguiría después, serían amenazas por parte del alcalde, sentimientos de culpa de ella y un estado mental mermado al punto de analizar asistir o no a un psiquiátrico. "Fue horroroso, como una película de miedo", dijo la exconcejala.
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Durante el juicio, el fiscal del caso, José Luis García Ancos, interrogó a Nevenka como si fuera ella la acusada. Para muestra de ello, una de sus preguntas: "¿Por qué usted, que ha pasado ese calvario, usted, que no es la empleada de Hipercor que le tocan el trasero y tiene que aguantarse porque es el pan de sus hijos; por qué no dice 'se acabó, me voy'?". En la imagen: Ismael Álvarez. Foto: EFE
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Álvarez negó las acusaciones en su contra e incluso llegó a decir que el acoso fue de Nevenka, asegurando que fue él quien terminó su la relación con ella porque comenzó a perder confianza en su “lealtad y fidelidad”. Fue “despecho o venganza, a celos amorosos o profesionales convertidos en auténtica enfermedad”, dijo.
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Nevenka acabó ganando el juicio a Álvarez. Este fue condenado a nueve meses de prisión por delitos de acoso sexual y tuvo que presentar su renuncia como alcalde. Sin embargo, el apoyo al político de la misma gente de Ponferrada, y el rechazo a Nevenka, a quienes llamaban mentirosa, hizo que esta se marchara a vivir a Londres. En la imagen: Ismael Álvarez, el día que dimitió (en 2002) tras hacerse pública la sentencia por acoso sexual. Se fue proclamando su inocencia. Foto: EFE
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Álvarez está a punto de cumplir 70 años. "Es muy habitual verle paseando con sus nietos", revela el diario La Vanguardia en su edición del 6 de marzo. Nevenka, por su parte, vive actualmente en Irlanda junto a su marido y sus mellizos de ocho años, donde trabaja en una auditoría y es una profesional "reconocida".
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