La última novedad del gigante chino Geely se llama Galaxy, una gama de modelos híbridos y eléctricos premium que buscará conquistar el mercado global. Se trata de siete vehículos cargados de tecnología y un diseño futurista, los mismos que se lanzarán en China a finales de 2023.
Asimismo, también podrían llegar a otros mercados como el Europeo a finales del 2025.
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La gama de los nuevos Geely Galaxy comprende cuatro híbridos y tres eléctricos y la compañía china iniciará con el SUV híbrido Galaxy 7. Su lanzamiento está proyectado para el segundo trimestre del año, ello como paso previo a la llegada del Galaxy L8, una imponente berlina.
Geely competirá cara a cara al segmento premium en China
Para finales de año presentará el Galaxy E8, el primero de los modelos eléctricos de esta novedosa gama. La firma solo ha desvelado un sedán de lujo, con unas grandísimas proporciones que le pueden competir a modelos como el Mercedes EQS, destacando por un diseño muy futurista. El frontal está dominado por unos rasgados y finos faros que recuerdan a los del Polestar Precept y una amplia parrilla en el paragolpes iluminada.
El extremo opuesto sigue la misma línea de vanguardia, con unos finos pilotos que se extienden entre extremos. Pero entremedias, también se puede notar que este eléctrico carece de pilar central y sus puertas abren de forma inversa, al estilo Rolls-Royce, facilitando el acceso y salida de un habitáculo en el que el espacio y la tecnología reinan a lo grande. El tablero dispone de una gran pantalla horizontal que se extiende hasta el pasajero, sin conexión con un túnel central. Un aspecto muy futurista, en el que la iluminación ambiental también es una importante característica.
Los híbridos de Geely ofrecerán una autonomía de 1370 kilómetros
Basados en la plataforma SEA que comparte con Polestar y smart, los PHEV de Geely contarán con el sistema de propulsión «NordThor 8848» y una potente batería Aegis equipada con un sellado especial que evita fugas en caso de accidente, pero con la que puede conseguir una autonomía máxima de 1370 kilómetros, junto al tanque de combustible. Una cifra que descartaría por completo a cualquier eléctrico europeo.
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