WASHINGTON (Reuters). Los ictiosaurios fueron un grupo de reptiles marinos que dominó los océanos hace más de 150 millones de años. Su fisiología era similar a la de los delfines actuales, incluso a la de los cachalotes.
Pero entre el gran número de fósiles de ictiosaurios hallados no había aparecido ninguna de sus formas más tempranas, que representan la transición desde su antecesores reptiles a criaturas totalmente adaptadas a la vida en el mar. Hasta ahora.
Un equipo de científicos anunció el miércoles que había desenterrado en China el fósil de un pequeño ictiosaurio con aletas largas y flexibles que le permitían moverse en tierra como una foca, mientras pasaba la mayor parte del tiempo en el agua, hace 248 millones de años.
Lo catalogaron como el eslabón perdido permitirá conocer la primera evolución de los ictiosaurios. "Finalmente logramos este hito del primer ictiosaurio", dijo el paleontólogo Da-yong Jiang, de la Universidad de Beijing, quien codirigió el estudio publicado por la revista "Nature".
La criatura, bautizada como "Cartorhynchus lenticarpus", medía 40 centímetros de largo y tenía un corto hocico que podría haber usado para alimentarse, succionando criaturas como gusanos en el fondo marino. Asimismo, tenía muñecas flexibles, necesarias para arrastrarse por la tierra.
El fósil, excavado en 2011 en la provincia china de Anhui, está bastante bien conservado y solo le falta parte de la cola. "El Cartorhynchus representa una etapa de la transición de la tierra al mar que faltaba en el historial de fósiles del linaje del ictiosaurio, si bien era conocido en la mayoría de estirpes de otros reptiles marinos y mamíferos", comentó Ryosuke Motani, paleontólogo de la Universidad de California, el otro líder del estudio.
"El fósil que hallamos es el primero que completa esta brecha en el historial", agregó Motani. "Es especialmente importante porque algunos creacionistas intentaron usar a los ictiosaurios como un ejemplo contrario a la evolución darwinista".
Aunque la mayoría de los ictiosaurios posteriores tenían parte de la cabeza alargada, como el delfín, el Cartorhynchus tenía un hocico corto como los reptiles terrestres. Vivió al principio del periodo Triásico, 4 millones de años después de que la peor extinción masiva de la Tierra acabara con incontables criaturas marinas al final del Pérmico. Es por eso que esta especie emergió rápidamente como el principal depredador del nuevo ecosistema marino nacido tras la calamidad. Prosperaron hasta que el grupo se extinguió hace unos 95 millones de años.